9.6.- PUEBLOS FANTASMAS DEL ESTADO DE MICHOACÁN.

Los pueblos “fantasmas” de Michoacán seguirán siendo tales en diciembre, toda vez que la inmensa mayoría de paisanos que radican en Estados Unidos no podrán regresar a sus lugares de origen para pasar con sus familiares las fiestas de fin de año, lo que representará bajas ventas en el sector turístico y comercial, afirmó Edmundo Alire Moreno, representante de la Comisión de los Derechos Humanos en Livermore, California. Entrevistado en su finca de descanso que tiene en Jiquilpan, Michoacán, afirmó que la situación económica para los migrantes, con mayor énfasis en quienes no cuentan con documentos migratorios, una vez más se quedarán en los pueblos donde radican en Estados Unidos, con la ilusión de regresar a los pueblos que los vieron nacer, clavada en sus corazones.

Recalcó que a las vejaciones y el abuso del poder por parte de las autoridades migratorias, se suman las que les causan los cuerpos policiacos y que ésa es la actividad principal que de manera cotidiana tienen que atender, toda vez que, no obstante ser ilegales muchas de las víctimas, son seres humanos que tienen derechos y son los que la agrupación que representa trata de darles a conocer en forma individual o en grupos.

Detalló que en los últimos tres años son menos los mexicanos que tienen oportunidad de regresar a sus casas, debido a la precaria situación económica en que viven, ante la falta de empleo; fenómeno que se ha agudizado con las redadas que realizan elementos del departamento de Migración, principalmente en industrias, campo, huertos, y en todos los lugares donde normalmente se contratan los migrantes a cambio de un salario inferior al mínimo.

Alire Moreno remarcó que el trabajo ha escaseado en Estados Unidos, ante la persecución que realizan diariamente las autoridades migratorias, que aplican sanciones muy elevadas a los patrones que los contratan; por lo tanto, al hacerlo de manera ilegal o furtiva y ante la desesperación del migrante ilegal por no encontrar dinero, ambas partes se arriesgan, lo que causa que el salario sea mínimo; por lo tanto, éste apenas les alcanza para sobrevivir, y no tienen recursos para mandarles a sus familiares que se quedaron en México.

Ello, dijo que ha sido factor para la reducción de las divisas, que son el principal sostén de la economía de los michoacanos. De igual forma, estableció el entrevistado que la recesión económica que se dio en Estados Unidos, pegó duramente a la empresa constructora, toda vez que las viviendas bajaron de precio en el caso de querer venderlas sus propietarios y se incrementó en el caso de tratar de adquirir una, lo que obligó a la paralización en cuanto a la construcción de viviendas.

Indicó que son muchos los mexicanos que han querido regresar a sus lugares de origen; sin embargo, no lo han podido hacer debido a que la mayoría ha tratado de vender sus propiedades y no lo han logrado debido al bajo costo en que se cotizan, sin embargo, recalcó que si tratan de comprar una casa, inexplicablemente su costo es muy elevado, lo que detalla la injusticia que se vive en el vecino país del norte. Paralelo a ello, Edmundo Alire subrayó que un grave problema para regresar es el cruzar la frontera, dado que la vigilancia es extrema por parte de autoridades migratorias y del Ejército norteamericano, y que en algunos estados fronterizos inclusive se han organizado patrullas de civiles para detener el flujo de ilegales.