BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales


EL PROCESO DE SUSTITUCIÓN DE IMPORTACIONES EN AMÉRICA LATINA:
EL CASO DE MÉXICO, 1940-1980

Ana Luisa González Arévalo


Esta página muestra parte del texto pero sin formato.

Puede bajarse el libro completo en PDF comprimido ZIP (134 páginas, 269 kb) pulsando aquí

 

 

1.2. El comportamiento industrializador en América Latina de 1950-1960.

Esta etapa se caracteriza porque en un principio el aspecto externo fue favorable en relación a las exportaciones y precios de materias primas, como consecuencia de la Guerra de Corea; posteriormente esta situación fue poco favorable hasta mediados de los años 60’s. Los términos de intercambio se vieron deteriorados, disminuyó la capacidad de endeudamiento y la disponibilidad de financiamiento. No obstante, las condiciones externas no se tradujeron en una marcada desaceleración de las tasas de crecimiento del producto manufacturero regional.

El proceso de industrialización mediante la sustitución de importaciones a comienzos de los años 50’s se intensificó a partir de 1954, hasta 1962 la evolución industrial empezó a dar muestras de debilitamiento culminando en el año 63’, cuando se registra una tasa de crecimiento del producto manufacturero más bajo de la posguerra. En términos generales fue del 1% anual en los años 60’s el ingreso por habitante en el conjunto de América Latina siendo la expresión de la insuficiencia de la dinámica del desarrollo latinoamericano. Este resultado compárese con el mismo periodo con el registrado en Europa Occidental del 3.7%, el 8.3% en Japón y una tasa entre 5.3% y 9.0% detectado en Europa Oriental, se consideraba que con el ritmo que se observó en América Latina se tardaría 70 años en duplicar el ingreso para el conjunto de la región.

Otra característica es el crecimiento de la población activa, la cual no es absorbida en el proceso productivo, está la margen del desarrollo económico. La población se desplaza del campo a las ciudades, sin embargo, no es incorporada a la vida de las ciudades, vive en tugurios miserables. Esta fuerza de trabajo generalmente es ocupada en servicios personales con un ingreso muy bajo, es considerada más bien en franca desocupación.

Es necesario señalar que la industria desempeña un papel muy importante en la dinámica de la mano de obra, para que sea absorbida es necesario que el sector industrial crezca a un determinado ritmo; de no ocurrir, la población es desplazada a la agricultura, se tiene que incorporar a grupos de inferior remuneración en las ciudades, o sea, en los servicios no calificados.

Otro factor es el incremento de la productividad producto del progreso técnico y del aumento del coeficiente de inversión y que también resultan necesarios con una tasa mínima de crecimiento del ingreso, para que se cumpla la actividad de absorción de la fuerza de trabajo.

En América Latina se encontraba muy lejos de tener el requerimiento mínimo necesario e incluso la del 2.5% señalada en 1962 en la Carta de Punta del Este.

La congestión de mano de obra redundante es una característica del desarrollo latinoamericano. De 1945 a 1962 la población activa creció a razón del 2.6% anual, la ocupación en actividades de producción y transporte de bienes a una tasa de 1.9%, los servicios lo hizo a una tasa del 5%.

La gran dinámica industrial no existe en la región, efecto del desequilibrio entre la productividad que genera mayor capacidad de ahorro, sin embargo, el capital requerido necesario para absorber la mano de obra redundante ocasionada por esa mayor productividad fue inferior en estos países al ahorro.

Los empresarios realizaron inversiones y utilizaron nuevas técnicas donde les resultó más conveniente por el costo del trabajo de y del capital. Sin embargo, estas inversiones no tomaron en cuenta que la economía de la mano de obra que había sido desocupada en las actividades donde hubo despido de personal. Esta situación para el empresario no fue considerada en sus cálculos, por tanto, no les importó las repercusiones que pudiera tener para la actividad industrial.

En América Latina se emplean formas de capital que inciden de una manera no favorable en la incorporación de mano de obra, ello se acentúa más por los efectos de los costos de producción, la protección aduanera, las cargas sociales, los impuestos indirectos o la importación de bienes de capital que no pagan aranceles o sus costos son muy bajos. La asimetría de la política proteccionista, ha contribuido al desenvolvimiento de industrias de escasa absorción, en efecto, la protección significa subsidiar a las industrias sustitutivas de importación pero no a las de exportación.

Los establecimientos que se instalan para producir los bienes que anteriormente se adquirían en el exterior es muy alto porque es bajo el contenido de capital y de mano de obra. Las empresas que absorben escasa fuerza de trabajo y elevados stocks de capital, es resultado de los estratos superiores de la sociedad, su consumo está dirigido a estos grupos económico.


 

Grupo EUMEDNET de la Universidad de Málaga Mensajes cristianos

Venta, Reparación y Liberación de Teléfonos Móviles
Enciclopedia Virtual
Biblioteca Virtual
Servicios