ELEMENTOS PARA ENTENDER LA CRISIS MUNDIAL ACTUAL

ELEMENTOS PARA ENTENDER LA CRISIS MUNDIAL ACTUAL

Víctor H. Palacio Muñoz
Miguel Ángel Lara Sánchez
Héctor M. Mora Zebadúa

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1.4.3 ¿Y qué pasa con Luz y fuerza del Centro?

En la página de Internet de “Luz y Fuerza del Centro” se nos muestra el estado de resultados de la empresa de enero a agosto del 2007.

¿Qué viene ahí?

• Los ingresos por venta de servicios ascienden a 27,899 millones de pesos (MP) (Luz y Fuerza del Centro, 2007).

• La depreciación es de 1,027 MP.

• Si a los ingresos le quitamos la depreciación, nos quedan 26,873 MP de ingresos netos.

• A estos ingresos netos les restamos los salarios que suman 2,087 MP, que consti tuirían el producto necesario para que las familias de los trabajadores se sostengan.

• De esta manera nos queda un sobrante de 24,785 MP, que podríamos considerar como producto excedente, generado por los trabajadores, a través de los servicios y del trabajo que prestan.

• Si dividimos el producto excedente, los 24,785MP, entre los salarios, 2,087MP, nos da una cifra de 11.87.

Esto quiere decir que por cada peso que la empresa paga en salarios, los trabajadores generan $11.87.

• Si se quiere ser más enfático, se puede ver que del total de los costos de explota ción que llegan a 49,564MP, los salarios representan únicamente el 4.2% del total.

Esto quiere decir que si se exigiera un incremento salarial, digamos de un 50%, el incremento real en los costos de explotación sería de 2.1% ya que no se afecta a la totalidad de los costos de explotación, sino únicamente al rubro de salarios.

Por eso, haber aceptado aumentos de 4%, es equivalente a afectar a los costos de explotación en un 0.17%.

• Estas afirmaciones pueden sonar un poco fuera de sí.

Pero es la realidad que es tamos viviendo.

No solamente se generan casi $12.00 por cada peso que se les paga, sino que además tenemos incrementos salariales de risa.

La conclusión, ra dical si se quiere, es que no deberíamos pagar impuestos, que lo paguen las em presas, y que nuestros salarios deberían ser mucho mayores.

En el mejor de los casos habría que construir tablas que nos lleven a la igualdad en la distribución del ingreso en donde lo que se pague por la vía impositiva sea sustancialmente menor para los trabajadores y “justa” (el 28 o 30%, sin deducibles ni evasiones) para los empresarios.