BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales


TEMAS

Francisco Javier Contreras Horta

Esta página muestra parte del texto pero sin formato.

Puede bajarse el libro completo en PDF comprimido ZIP (266 páginas, 475 kb) pulsando aquí

 

 

 

 

 

¿CÓMO EDUCAR A SU HIJO?

Educar a un hijo es un problema: primero porque no siempre se sabe lo que se tiene que hacer, y segundo porque a veces sí se sabe lo que se tiene que hacer, pero por angas o por mangas no se hace. Hay ocasiones en que ve uno a alguien haciendo funciones de padre y piensa uno "él debería de hacer esto o aquello", pero curiosamente uno no lo aplica en sus hijos.

Por todo ello, para tener elementos para la educación de su hijo, es necesario que consideremos primeramente lo siguiente:

- Su hijo es ante todo un ser humano.

- Ello significa que tiene las potencialidades para ser el más grande sabio, científico o héroe que haya tenido la humanidad.

- Pero también existe la posibilidad de que haga en el futuro cosas reprochables ante los ojos de la sociedad.

- Al estar a tu cuidado, de alguna manera es arcilla fresca que tomará el molde que tú le des.

- Cada uno de nosotros creemos estar en lo correcto cuando actuamos y, por ello, queremos que nuestros hijos actúen como nosotros.

- Sin embargo, no sabemos todo lo que sabe un médico, un ingeniero. No podemos hacer una televisión, un radio, un auto, un avión, etc.

- No sabemos todo lo que deberíamos de saber. En realidad desconocemos más de lo que conocemos.

- Se puede estudiar para muchas cosas, pero no hemos estudiado para ser padres.

- Al educar a un hijo, nosotros quisiéramos prepararlo para que sea feliz, para que sea bueno, para que sea útil a la sociedad. Quisiéramos verlo inteligente, sano, productivo, autosuficiente.

- Pero, ¿Qué tanto de lo que deseamos que sean nuestros hijos, lo somos nosotros?

- ¿Cómo podríamos llevar a alguien a ser lo que nosotros no hemos podido ser?

- Tenemos que llegar a la conclusión de que no estamos preparados para la función de conducir a otros, pero debemos hacerlo.

- Nos puede servir, saber la manera en que el niño se desarrolla, y conocer los descubrimientos y teorías que sobre el desarrollo del ser humano se han hecho; pero mientras que conocemos esto, nos servirá practicar algunos principios básicos:

1. Edúcalo para ser hombre libre de prejuicios.

Los prejuicios son conceptos equivocados que tenemos de las cosas sin darnos cuenta. Es difícil reconocerlos cuando los tenemos; sólo se ven cuando los hemos dejado atrás.

Prejuicios = Pre-Juicios

Juzgar algo antes de conocerlo realmente. Ejemplo: Juzgar que alguien hizo algo malo sin tener certeza de ello, darle a una sospecha valor de verdad sin serlo. (Ejem. Seguramente fulanito ya hizo esto o aquello).

2. Limita tus juicios sobre los fenómenos naturales y sociales al mínimo posible.

3. Cuando no conozcas la verdad sobre algo, manifiesta el concepto que tengas sobre ello, pero aclarando la posibilidad de que tu hijo en un futuro amplié su información.

4. Aprende a dudar razonablemente sobre tus conceptos y trata de sopesarlos con los vertidos por otras personas.

5. Parte siempre del supuesto de que no conoces todo y cuando hagas afirmaciones ten presente tu ignorancia. No tengas miedo de decir no sé y ofrécete a investigar el tema, sea solo o junto con tu hijo. (Muchas personas por miedo de decir no sé, se convierten en mentirosos y eso enseñan a sus hijos)

6. Recuerda siempre que tu hijo capta y se moldea por tus actitudes y características, la mayoría de las cuales adoptará, por lo tanto, revisa tus actos y siempre recuerda que él creerá natural hacer lo que tú haces.

7. Tu hijo es inteligente y por ello curioso; no mates su curiosidad con miedos infundados y restricciones innecesarias.

8. Tu hijo necesita jugar mucho; pero te puede ayudar en trabajos y hacer sus tareas si ve sus deberes como un juego.

8.1. No dejes a tu hijo trabajar solo. Cuando quieras que trabaje en algo, hazlo junto con él y buscando que lo que hacen los dos, le parezca un juego.

8.2. Dedica tiempo a tu hijo. Jamás serás padre si todo el tiempo tienes ocupaciones más importantes que atender a tu hijo.

9. Salvo en casos de peligro real, más que impedir a un niño hacer algo, adviértele de los riesgos en los que incurre y enséñale la manera adecuada de comportarse.

10. Lo que más necesita tu niño de ti es amor; dile que lo amas, acarícialo y demuéstrale lo que significa para ti a la primera oportunidad, con frecuencia.

11. La mayoría de los padres creen que lo están haciendo bien y por ello no revisan su comportamiento; duda pues, sistemáticamente, de que lo que haces sea correcto: analiza y busca de ser posible, información al respecto.

12. Lo que debe guiar tus decisiones para con tu hijo es el amor hacia él, el deseo de que obtenga lo mejor; siempre piensa en la posibilidad de estar tú en su lugar.

13. Nunca corrijas a tu hijo con coraje. Si debes hacerlo, espera a serenarte y siempre analiza un poco antes de hablar o actuar.

14. Si debes castigarlo, que ello sea a pesar tuyo, nunca con satisfacción. Compara el hecho con una medicina amarga o curación que a pesar tuyo debas administrarle.

15. Concédele a tu hijo el beneficio de la duda. Si tienes que equivocarte, hazlo a favor de él. Ejem: si no estás completamente seguro de que debas castigarlo, entonces no lo hagas.

16. Tu hijo necesita manipular y hacer lo que tú haces; siempre que sea posible, permíteselo bajo tu vigilancia.

17. Si tu hijo lastima a otro niño o hace algún daño, sé muy claro en afirmarle que eso está mal y que no lo debe hacer. La primera vez infórmale, y las siguientes, recuérdale cariñosamente pero con firmeza.

18. No lo amenaces y siempre cúmplele lo que le prometes, si no, él dudará de si hablas en serio y supondrá que puede ignorarte.

19. Distingue siempre una sospecha o suposición sobre los actos de las personas, de las cosas que te consten.

20. No platiques algo si no es verdadero, útil y bueno.; pues de otra manera enseñarás a tu hijo a platicar cosas sin sentido que dañan a otros y a juzgar mal las actitudes de los demás aunque no lo sean. Nadie queremos que nuestro hijo sea un chismoso, ¿Verdad?

21. Educa a tu hijo igual como lo enseñas a caminar; protegiéndolo sólo lo suficiente para que no se caiga, para que no se dañe. Sólo porque aún no camina, pero deseando que lo haga pronto; sin dejarlo a su suerte, sin abandonarlo; sintiéndote responsable de su destino pero sin querer decidir por él.

22. Siempre debes ser un ejemplo a seguir por tu hijo, por ello, compórtate como desees que él lo haga; pero no lo obligues a imitarte.

23. Tu hijo siempre debe tener la seguridad de que contará contigo y de que si actúa mal y se da cuenta, al regresar a ti, antes que reproches, encontrará tu apoyo.

24. El amor es la medida de tus actos para con tu hijo: actúa para él, no para ti. (Lo que divide el amor del egoísmo es una línea apenas visible. Algunos creen que aman cuando apenas quieren. El más odioso de los egoístas supone que es bueno y que la razón está de su parte).

25. Cuando tengas un hijo, no esperes que te retribuya tus trabajos: pues entonces no lo estarías viendo como hijo sino como una inversión.

(Hay gente que espera que su hijo cuando sea grande le compense sus esfuerzos, y por supuesto, por más que ese hijo le dé, siempre sentirá esta persona que se le da muy poco, y por ello será siempre infeliz. Si tú esperas que tu hijo te regrese tus esfuerzos, entonces la palabra padre o madre te queda muy grande, y te engañas si crees que lo que sientes por él es amor).

26. Si no encuentras suficiente gozo en atender a tu hijo, entonces no eres un padre de verdad.

27. Todo padre tiene de enemigo a la rutina. Esta es como un vidrio opaco que te impide apreciar la realidad. Esto se combate con descanso y diversión, por ello, si quieres ser un buen padre, sal de vacaciones; intenta distraerte sanamente; envía a tus hijos a vacacionar con algún pariente; o al menos introduce cambios en tu estilo de vida.

28. Los padres se pueden enfadar de atender a sus hijos y estos de soportar las exigencias de sus padres, y ello no significa que sean malos ni unos ni otros, simplemente significa que necesitan descansar ambos; si lo hacen, posteriormente se verán con más gusto y el afecto entre ellos se robustecerá.


Grupo EUMEDNET de la Universidad de Málaga Mensajes cristianos

Venta, Reparación y Liberación de Teléfonos Móviles
Enciclopedia Virtual
Biblioteca Virtual
Servicios