BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales


J.M. KEYNES, EL PROFETA OLVIDADO

Mario Guillermo Gómez Olivares

 

Esta página muestra parte del texto pero sin formato.

Puede bajarse el libro completo en PDF comprimido ZIP (247 páginas, 1.36 Mb) pulsando aquí

 

 

2.4 El conocimiento, la incertidumbre y la motivación humana

La inestabilidad económica y social atribuida a la incertidumbre, a la inseguridad, a las dificultades de índole monetaria y financiera donde se desarrollan la actividad especulativa es el atesoramiento, actividad que constituye un freno al proceso eco-nómico equilibrado. Veremos a seguir algunos de los fundamentos que influyen, a partir del campo lógico-epistemológico, la formación de las teorías auxiliares comprendidas en la Teoría General. En primer lugar, pondremos en evidencia el modo como Keynes sintetiza, a través de su noción de probabilidad, un método en que privilegia el análisis inductivo sin olvidar la importancia del análisis deductiva. En segundo lugar, investigaremos en Keynes la relación entre la lógica y la probabilidad, cuja importancia es decisiva en su noción de incertidumbre. En tercer lugar, examinaremos la distinción entre lo que es atomístico y lo que es orgánico, del cual deriva un abordaje que distingue entre el plano micro y el plano macro de los problemas económicos.

2.4.1. Los problema del método científico: la noción de probabilidad

J.M. Keynes evitó durante su vida recorrer a los métodos deductivos e inductivos en sus formas extremas. Keynes rechazó la visión extrema y altamente abstracta del método deductivo para la teoría económica, afirmando que la ciencia económica no puede ser ni debe ser equiparada a las ciencias naturales : “Economics is esencially a moral science not a natural science… to convert a model into a quantitative formula is to destroy its usefulnes as an instrument of thought” . “(...) is a method rather than a doctrine, an apparatus of the mind, a technique of thinking, which helps its posesor to draw correct conclusions” ... “Economics is esencially a moral science and not a natural science...It employs introspection and judgements of value... It deals with motives, expectations and psycological uncertainties” .

Keynes era partidario de una combinación de ambas metodologías, una vez apartadas las visiones inconvenientes de ambas. Como afirmó en el “Treatises on Probability”: “If a theory is first proposed and is then confirmed by the examination of statistics, we are inclined to attach more weight to it than a theory which is constructed in order to suit the statistics. But the fact that the theory which precedes the statistics is more likely than these other to be supported by general considerations-for it has not- presumably, been adopted for not reason at all- constitutes the only valid ground for this preferences” .

Este elemento metodológico se revela frecuentemente a través del abordaje utilizado en la solución de problema del tipo ‘problem-dependent nature‘‘, es decir., la idea de que la combinación de los métodos deductivo e inductivo debe servir al fin último de interpretar los problemas y de proponer los remedios, idea que está presente en una carta a R. Harrod: “It seems to me that economics is a branch of logic, a way of thinking... One can make some quite worth while progress merely by using your axioms and maxims. But one cannot get very far except by devising, new and improved models. This requires, as you say, a vigilant observation of the actual working of our system” .

Esto implica que el problema del método exige necesariamente una visión integrativa de ambos los métodos, dependiendo de la tarea concreta con que el investigador se enfrenta, aunque teniendo conciencia de los problemas que ambos métodos colocan al investigador. La cuestión de la combinación óptima de estos métodos es una arte singularmente difícil.

Los problema con el método son abordados en el ‘Treatises on Probability‘‘. Esta obra permite al aún joven Keynes, utilizar un método con base en observaciones que creía que eran significativas, a fin de extraer inductivamente conclusiones lógicas en sintonía con esa realidad: Keynes escribe no ‘Treatise‘: “Between two set of propositions, therefore, there exist a relation, in virtues of which, if we know the first, we can attach to the latter some degrees of rational degree. This relation is the subject matter of the logic of probability” .

El grado de creencia racional que podemos dar crédito para ese tipo de conclusiones, es decir, su probabilidad, nada tiene a ver con los acontecimientos actuales. Los conocimientos en los cuales se basa la conducta, la ciencia o la metafísica y, a partir de los cuales formamos la mayor parte de nuestros argumentos sobre las nuestras creencias racionales, son inconclusitos en menor o mayor grado.

Los términos ‘certeza’ o ‘probabilidad’ describen los varios grados de la creencia racional, cujas proposiciones nos permiten especular sobre las diferentes cantidades de conocimientos. La probabilidad permite el estudio filosófico de esos tipos de conocimiento. Keynes establece cuales creencias racionales pueden ser derivadas a partir de un conjunto de hechos adquiridos directamente: “As a consequence the ob-ject of the theory of probability is that knowledge which can best obtained by argument from direct adquaintance with fact. The choises of the facts or propositions used to adquire knowledge by argument is naturally subjective, but the relation, in which other propositions stand to these, and which entitle us to probable belief, are objective and logical”.

Esta teoría de las probabilidades, es un camino metodológico al cual Keynes recorre sistemáticamente en su trabajo teórico y que adquiere en la Teoría General una relevancia que conviene tener presente. Fausto Vicarelli escribe a propósito: “Most of Keynes‘s interpreters have never questioned his extraordinary ability to face up to the complex and at times dramatic problems of his time. On many occasions however the analysis proposed in the General Theory has been considered as having no relation to the vision of the capitalism which emerges from his earlier, fundamental works. This has created considerable and, in some instances, insuperable difficulties, both in understanding Keynes‘s message (the theory) and in the analysis of the functioning of the economic system (the method)” .

Pero la aplicación del concepto de probabilidad la Teoría General podría contribuir para una interpretación diferente de la seguida por la síntesis neoclásica, sea por su método sea por su contenido . El aspecto metodológico se relaciona con el proceso lógico de determinación del equilibrio de subempleo, las cuestiones de contenido se refieren al lugar de las expectativas y al modo como estas representan la visión de Keynes sobre el capitalismo de un punto de vista teórico. Tal vez por eso y de manera equivoca, se ha utilizado el concepto de equilibrio en el sentido más amplio, con raíces profundas en la tradición del equilibrio general, en un cuadro metodológico exclusivamente deductivo, permite aproximar Keynes de Walras, dando lugar a in-terpretaciones en la línea de Hicks o de Patinkin-Clower-Leijonhuvfud, donde el des-empleo es explicado por una situación de rigidez en el sistema de precios y salarios o por restricciones cuantitativas e institucionales.

La habilidad analítica de la Teoría General reside en el hecho de explicar, al nivel más alto de abstracción, las fuerzas que determinan los niveles del ingreso y empleo en un determinado período del tiempo, enfatizando la coexistencia, a cada nivel de tiempo, de las decisiones basadas en las expectativas de corto y largo plazo.

La Teoría General muestra la incompatibilidad entre el equilibrio walrasiano, y por tanto del pleno empleo de los factores, y la visión keynesiana del equilibrio con subempleo. En una explicación teórica que surge posteriormente a la publicación de aquella obra, Keynes deja poca margen para dudas sobre la utilización del abordaje probabilística, afirmando: “The expected results are not on a par with the realised results in a theory of employment. The realised results are only relevant in so far as they influence the ensuing expectations in the next production period. Incomes on the other hand is realised result...Time relationship between effective demand and income is incapables of being made precise” .

La teoría keynesiana de la demanda afectiva en diferentes situaciones de equilibrio es más convincente que el equilibrio neoclásico y es claramente una teoría es construida fuera del cuadro analítico del equilibrio general . Justamente Keynes contrapone a la noción de equilibrio estacionario su noción o de equilibrio móvil (). Como se ve la utilización del término equilibrio es solo un problema de método y lenguaje, porque el equilibrio móvil es no-equilibrio en el sentido marshalliano; considerando que el término equilibrio, emprestado de la física, nos indica algún ponto de reposo, es pela su vez un método de análisis basado en la acción intertemporal de las fuerzas económicas, a su utilización de cierto modo abusiva, i.e., en un otro sentido, se genera apenas confusión. Es claro que es esta utilización por Keynes de la noción de equilibrio, una de las confusiones frecuentemente referida por los economistas interpretes de su pensamiento. El problema, no debe ser de recriminación de las confusiones, pero si por la búsqueda de la forma de entender o que Keynes pensaba.

Se puede entender la teoría de Keynes sin mirar para el lenguaje marshalliano de su exposición, y por tanto considerando que se capturan las fuerzas que determinan el output y el empleo .

Para Keynes, la teoría económica era esencialmente una ciencia moral y no una ciencia natural. La teoría utiliza juicios de valor e introspección, tiene a ver con motivos, expectativas e incertidumbres psicológicas, por lo que no se puede convertir en un modelo, cuja fórmula cuantitativa destruye su utilidad como instrumento del pensamiento. La ciencia económica era principalmente una ciencia moral, pues utiliza opiniones, apreciaciones éticas e introspección, ella tiene a ver con las motivaciones, expectativas e incertidumbres psicológicas de las personas como agentes económicos y sociales, por lo que la teoría económica era por si considerada, más un método que una doctrina, un modo y una técnica de obtener conclusiones rigorosas. Pero era necesario fundamentar esta visión en un método, el que Keynes propone en el ‘Treatise on Probability‘. Este método es un abordaje que representa el intento de sintetizar los métodos inductivos y deductivos.

El conocimiento que obtenemos a través de nuestra observación puede ser cierto o probable. Es sobre el conocimiento probable que se discute, pero en relación al primero, Keynes admite que solo será posible en las ciencias naturales. Keynes parte de una noción en que el conocimiento de una cierta proposición ofrecida por la evidencia e usada para derivar conocimientos por el argumento de proposiciones no observables, con base en una relación lógica existente entre la primera y la segunda. Si la primera proposición es inductiva, la segunda derivada puede ser deductiva, por lo que el conocimiento verdadero depende del valor de la creencia racional atribuida y asociada a las primeras premisas.

La aplicación de este método da sentido y valor a la teoría económica de Keynes. Descubrimos el poder heurístico del método de Keynes cuando comparado con el método deductivo del equilibrio. Así, podemos concluir que el modelo lógico-probabilístico se basa en un método inductivo sostenido deductivamente, lo que significa que Keynes se auxilia en juicios probables basados en creencias para construir teorías.


Grupo EUMEDNET de la Universidad de Málaga Mensajes cristianos

Venta, Reparación y Liberación de Teléfonos Móviles
Enciclopedia Virtual
Biblioteca Virtual
Servicios