El desarrollo económico local como parte de la dinámica económica actual
BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales

 

EL TURISMO Y SU INCIDENCIA EN EL DESARROLLO LOCAL DE VILLA CLARA, CUBA
 

María del Carmen Lloret Feijóo y otros

 

 

 

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Capítulo 2: El desarrollo económico local como parte de la dinámica económica actual. El papel del Turismo.

2.1-Desarrollo económico local

Las políticas macroeconómicas son insuficientes para dirigir la economía. El enfoque dominante tiende a ser el territorial, dado que permite mayor eficiencia en la administración de los recursos y en la obtención de resultados. (Antonio Vázquez Barquero, 1993). Ha surgido una nueva estrategia denominada desarrollo económico local, para solucionar los problemas territoriales, cuyo fin se relaciona con el desarrollo y la reestructuración del sistema productivo, el mejoramiento del nivel de vida poblacional, y el aumento del empleo a través del uso racional de los propios recursos materiales, laborales y financieros en inversiones estratégicas para el desarrollo de cada localidad.

El desarrollo económico local basado en la planificación es, sin dudas, una opción para solucionar los problemas de índole económica y social de acuerdo con los objetivos centrales de la economía cubana. (Elier Méndez Delgado, 1997).

Las políticas de desarrollo económico local son una respuesta necesaria a los retos del ajuste estructural real de las economías latinoamericanas, asegurando la introducción de las innovaciones tecnológicas y organizacionales del tejido productivo de los diferentes territorios, sin abandonar el papel del Estado como regulador de la economía.

A mediados de los setenta se otorgaba una puntual importancia a la problemática territorial, ya que la política desarrollada hasta ese momento se basaba en el crecimiento concentrado con el propósito de beneficiar los territorios con recursos de otros. El desarrollo económico local debe tener como base los recursos propios sin dejar de orientar algunos recursos para el desarrollo de localidades mas deprimidas.

Durante los años ochenta el desarrollo económico local se convierte en la estrategia de desarrollo territorial dominante. Las iniciativas locales se instrumentan mediante formas más flexibles de organización como son las agencias de desarrollo. (Antonio Vázquez Barquero, 1993)

Las acciones de las estrategias varían sustancialmente ya que las características de las localidades cambian. Estas estrategias van desde el fomento de la capacidad empresarial hasta la solución de los problemas estructurales.

Los espacios que no encuentran los recursos necesarios para su propio desarrollo deben explotar las potencialidades endógenas, es decir, los recursos presentes en su área geográfica y aprovechar la economía local. Pero para esto es necesario conocer que es el desarrollo económico local: es un proceso concreto de organización del porvenir de un territorio: es el resultado de los esfuerzos conjuntos de la población a la que concierne, de sus representantes, de los actores socioeconómicos y de los agentes del Estado, para constituir un proyecto de desarrollo entre los diversos componentes económicos, sociales, culturales y de las actividades de los recursos locales. (Información Comercial Española, 1990)

Este proceso abarca las actividades de producción y servicios de la localidad sobre las que la sociedad tiene poder de decisión e influencia directa en su desarrollo y funcionamiento.

La oferta de los servicios de desarrollo empresarial debe responder a las circunstancias específicas de los territorios como son los factores productivos, ambientales, sociales, laborales y culturales satisfaciendo la necesidad de ser el resultado del proceso de concertación estratégica de los actores locales y la adecuada vinculación de las autoridades central, regional, provincial y municipal.

Los requisitos de un nuevo modelo de acumulación se basa en el acceso a la información estratégica y el conocimiento por lo que se debe priorizar la calidad de los recursos humanos y su participación en los procesos productivos. A través de las iniciativas creadas en cada localidad se debe incrementar la utilización de los recursos para favorecer el desarrollo económico y la generación de empleo.

En sentido general, el gobierno central prioriza los grandes equilibrios macroeconómicos como la inflación, déficit presupuestario y la balanza de pagos, mientras que las instancias subnacionales (regionales, provinciales, y municipales) analizan los problemas a escala microeconómica como son las transformaciones productivas y empresarial y la generación de empleo en su territorio. Las políticas en los diferentes campos de acción deben estar coordinadas adecuadamente.

Los cambios estructurales miden la capacidad de la economía, instituciones y los actores sociales para asimilar las nuevas circunstancias y condiciones buscando nuevas oportunidades para sus recursos y potencialidades.

Las iniciativas locales se caracterizan por aprovechar en mayor medida los recursos endógenos a través de los actores socioeconómicos locales como empresas, centros tecnológicos, entidades financieras entre otras para lograr una mayor productividad y gestión empresarial.

El desarrollo local necesita una información estratégica sobre capacidades de desarrollo en el territorio, lo cual implica contar con un diagnóstico que sirva de base para ello.

El desarrollo con una óptica local refleja que todas las regiones presentan características culturales, históricas, físicas e institucionales que constituyen un potencial de desarrollo propio. El desarrollo local endógeno posibilita el crecimiento de las localidades con sus propios recursos, su organización y sus valores.

La estrategia de desarrollo local brinda una oportunidad de integración de los sistemas productivos a la economía nacional.

Para una economía local que pretenda articular su producción es necesario que todos los actores participen en el desarrollo ya que su calidad, esfuerzo y crecimiento influye sobre el entorno.

En la mayoría de los países latinoamericanos se ha experimentado alguna apertura económica, sin embargo el mercado interno es amplio y constituye una fuente potencial de crecimiento. Más del 77% de la producción latinoamericana y caribeña permanece en el ámbito nacional o local (Francisco Alburquerque, 1997).

Las economías locales deben reforzar su tecnología y organización para competir en mercados más amplios a nivel nacional.

Algunos factores claves para el desarrollo de este proceso son:

• Tecnología: en regiones en desarrollo es difícil crear la propia tecnología por lo que se adapta la nueva o vieja tecnología y específicamente se lleva a cabo la diferenciación del producto.

• Instituciones: se aborda la colaboración entre las empresas locales y las diferentes instituciones del territorio como universidades, centros de formación e investigación, facilitando el asesoramiento e información.

Prebisch planteaba: el desarrollo no es un mero aumentar de lo que hoy existe sino un proceso de intensos cambios estructurales y la industrialización es la clave del crecimiento del nivel de vida latinoamericano… la industrialización y la tecnificación de la agricultura.

Dentro del concepto de desarrollo hay que tener en cuenta la fortaleza competitiva de las actividades exportadoras e internas, la equidad, la cohesión social, la ecología, los derechos humanos y el progreso democrático.

Los países desarrollados son aquellos que tienen un mayor ingreso real per cápita porque tienen una estructura económica determinada, basada en cierto grado de industrialización. El desarrollo económico de un país se define como un proceso que lo conduce desde su posición económica subalterna hacia esa posición desarrollada.

En los últimos años a nivel internacional se ha consolidado la tendencia de medir el desarrollo de los países a partir de altas tasas de crecimientos, la estabilidad de los indicadores macroeconómicos y el equilibrio en las finanzas públicas.

La desigualdad entre las regiones afecta las perspectivas de desarrollo, algunas de estas son: dotación de infraestructura básica y comunicaciones, capacitación del capital humano y poca presencia del sector financiero. Estas condicionan ventajas comparativas desiguales para la inserción en el mercado turístico.

Para avanzar en materia de desarrollo social es preciso no solo tener una clara convicción en materia económica que permita crecer en un marco de disciplina fiscal y monetaria, sino que es importante concebir una distribución equitativa de la riqueza creada en aras de lograr igualdad de oportunidades para todos.

Para Cuba desarrollo significa acometer la industrialización más allá de la mera tecnificación de la agricultura. A diferencia de los países desarrollados en el siglo XIX y primera parte del siglo XX el factor estratégico básico del desarrollo económico fundamental de Cuba y otros países que están en su caso no es el empresario privado sino el Estado de un contenido democrático popular.

Las fuerzas exteriores que han deformado la economía cubana impidieron el crecimiento industrial en los momentos oportunos. Ahora, para desarrollar toda una serie de renglones de consumo interno hay que hacer frente a una competencia extranjera a base de un desarrollo industrial tecnológico. De esta forma, la inversión se hace riesgosa, atrayendo a la empresa privada con el incentivo de la explotación de la mano de obra aumentando por todos los medios la productividad por hombre y disminuyendo los salarios.

Cuba ha tenido que replantear su metodología e instrumentos para lograr un mejor funcionamiento de los territorios ya que no está exenta de los cambios políticos, económicos, sociales y tecnológicos que ocurren en el mundo.

Por ello toma gran importancia el perfeccionamiento de la planificación y el desarrollo territorial ya que el país necesita pasar a un sistema de planificación acorde a los desarrollos alcanzados. La necesidad de estos cambios esta dada desde 1959 donde al triunfar la revolución existían grandes deformaciones y desproporciones socio-económicas.

Es válido recordar que: “como atributo del ser humano, derivado de su libre albedrío, la planificación jamás podrá estar en crisis, ya que el hombre es el único ente viviente -hasta donde sabemos- capaz de pensar su propio futuro y de actuar en consecuencia sobre él” (Sergio Boisier, 1996).

La planificación es la principal función del sistema de dirección de la economía y debe reflejar objetivamente la vida socioeconómica del país e influir en ella. Debe establecer proporciones adecuadas entre los diferentes sectores, ya sea nacional, territorial o local.

La planificación permite analizar la prioridad, la factibilidad y la competitividad de los propósitos que se persiguen, al tiempo que selecciona los instrumentos más eficientes para alcanzarlo. También verifica y examina el grado en que los objetivos se cumplen, así como los obstáculos que impiden su realización plena. (Elier Méndez, 1997).

El desarrollo territorial presenta las siguientes condiciones: (Elier Méndez, 1997).

• Un proceso creciente de autonomía para emprender un estilo propio de desarrollo y aplicar políticas propias. Para ello es necesario una verdadera descentralización que cuente con la participación política de la población, excluyendo en definitiva cualquier forma de autoritarismo.

• La capacidad de apropiarse del plusproducto para reinvertir en el proceso, lo que permite superar en forma paulatina las estructuras de producción obsoletas y diversificar la base económica. Esto posibilita el desarrollo sustentable a largo plazo, pues ofrece cimientos más sólidos.

• Una actitud permanente de concientización con respecto a la protección ambiental y el uso racional de los recursos naturales, al tiempo que se propicia el incremento del nivel de vida de la población.

• La identificación plena de la población con su territorio, lo que da sentido de pertenencia e identidad al desarrollo territorial.

• Merced al significado social del proceso, es fundamental que el ingreso se reparta entre la población con justicia y equidad, además de garantizar la participación constante de esta en la toma de decisiones.

En este aspecto las autoras coinciden con la idea de que delegar implica traspasar autoridad y poder de decisión a los funcionarios locales, pero la administración central mantiene el derecho de derogar cualquiera de sus determinaciones.

La planificación territorial es un instrumento importante para elevar la eficiencia de la producción social y comparar los niveles de desarrollo de las regiones gradualmente. Facilita el funcionamiento proporcional y equilibrado de la economía y el aprovechamiento racional de los recursos. Además posibilita a los órganos de gobierno de las provincias y municipios participar más activamente en las decisiones centrales del gobierno e incluso corregir excesos o inexactitudes.

Los objetivos del desarrollo territorial son: (Elier Méndez, 1997).

• Satisfacer las necesidades básicas de la población en materias de servicios e infraestructura.

• Mejorar la distribución de los resultados del desarrollo y la participación económica, social y política.

• Aumentar la calidad de vida, entendiendo por ello el mejoramiento general de los asentamientos humanos (urbanos y rurales).

• Incrementar el crecimiento económico por medio del aumento sostenido de la producción de bienes y servicios del territorio.

• Proteger el medio, preservando el natural y el construido.

• Consolidar la autonomía territorial, entendida esta como la creciente autodeterminación política de los territorios, la identificación de los habitantes de cada uno de ellos y la capacidad de apropiarse de su plusproducto económico.

La planificación del desarrollo tiene que adoptar medidas para trasladar las ganancias de empresas estatales rentables a otras que no lo son, o emplear fondos estatales logrados a través de empréstitos para lograr una sostenibilidad temporal hasta lograr consolidar esos renglones. Un gobierno responsable es capaz de regular y limitar las inversiones dentro del marco de las necesidades nacionales. El aprovechamiento de fuentes exteriores de capital es necesario efectuarlo con cuidado para no afectar el equilibrio exterior.

Las limitaciones naturales de nuestro mercado (propio o accesible) presenta ciertos límites para el contenido del desarrollo industrial cubano. Las normas de consumo de nuestro pueblo son altas y el llamado efecto demostración, es decir, la imitación de los hábitos de consumo de los países desarrollados, específicamente de los Estados Unidos opera con notable y peligrosa intensidad.

Nada indica que el desarrollo de la isla no pueda llevarse a cabo con fondos y medios propios. El ritmo del desarrollo deberá ajustarse de manera que no requiera de la subordinación económica y potencial a intereses extranjeros, llevando implícito un desarrollo sin inflación.

La reestructuración tecno-económica y organizativa son procesos de profundo cambio social, institucional y cultural donde se identifican las innovaciones radicales que abren nuevas perspectivas para los óptimos de producción y funcionamiento competitivo teniendo como consecuencia el surgimiento de nuevos sectores y actividades y el declive de otros. De esta manera, se comienza una desinversión y reinversión de capitales con resultados diferentes en cada territorio.

Las modificaciones estructurales se refieren específicamente a la esfera de la producción y al logro de una mayor eficiencia en la productividad, mientras que la globalización hace referencia a la esfera de la circulación en mercados internacionales y el grado de competitividad. Por eso, no se debe confundir y reducir lo anteriormente planteado a un mercado globalizado debido a que se lograría un diagnóstico impreciso de los problemas de las economías locales.

En la denominada era de la globalización es muy importante trabajar desde lo local. El territorio no puede, pues, confundirse ni simplificarse con la visión en términos de espacio homogéneo que incorpora la macroeconomía convencional. (X. Greffe, 1990).

Lo que se busca es lograr que el Estado tenga la función de asegurar la eficiencia y flexibilidad en las operaciones a través de una organización alejada del burocratismo más cercana al territorio.

Los recursos humanos calificados, el sistema educativo y de capacitación con el perfil productivo del territorio, son factores estratégicos que contribuyen territorialmente con el esfuerzo de la sociedad. En cada territorio estos factores deben crear entornos innovadores que encaren con eficiencia los retos del cambio estructural.

El territorio es un actor decisivo de desarrollo, sin el cual, no es posible dar respuestas completas ni eficientes al cambio estructural en esta fase histórica de transición tecnológica, social e institucional.

En cada localidad se deben identificar adecuadamente los problemas del sistema empresarial debido a que la tensión competitiva internacional introduce lentamente mayores requerimientos en los mercados locales. Las empresas deben encontrar en su entorno territorial los insumos necesarios para la innovación productiva y de gestión (tecnología, mercado, logística, financiamiento). Estos componentes son determinantes del éxito de las iniciativas de desarrollo económico local.

La insuficiente información recopilada por instancias centrales impide utilizarlas como herramientas para la actuación local. Desde el punto de vista del desarrollo económico local se necesita una información estratégica sobre capacidades de desarrollo en el territorio para así adoptar políticas inteligentes para enfrentar el cambio estructural en su escenario crecientemente globalizado.

…”el enfoque dominante tiende a ser el territorial dado que permite ser más eficiente en la administración de los recursos y más eficaz en la obtención de los resultados”… (Vásquez Barquero, Antonio, 1993). Por esta razón, se hace necesario buscar soluciones territoriales donde comienza a tomar forma una nueva estrategia de desarrollo conocida como Desarrollo Económico Local (DEL) el cual pretende desarrollar y reestructurar el sistema productivo, mejorar el nivel de vida de la población a través del incremento del empleo en la localidad y todo esto utilizando los propios recursos materiales, laborales y financieros de la localidad.

El DEL es el conjunto de actividades tanto de producción y servicios que tienen lugar en la localidad y sobre las que la sociedad tiene poder de decisión e influencia directa, tanto en lo referido a su desarrollo como a su funcionamiento.

Forman parte de la economía local los ingresos que se perciben por la presencia de instalaciones de carácter nacional o provincial, relacionados con sus utilidades, la ocupación de suelo, el uso de la infraestructura y la contaminación del medio ambiente ; estas instalaciones son además fuente de empleo para la localidad y con ellas pueden establecerse relaciones de cooperación, mediante la elaboración conjunta de pequeños proyectos en beneficio de la comunidad, aprovechamiento de la infraestructura de apoyo de las grades industrias y el uso de residuales y desechos que pueden servir de base a producciones locales contribuyendo a la sustentabilidad del desarrollo económico. (Méndez Delgado, Elier, 2001).

Cada localidad tiene sus propias características por lo que las estrategias aplicadas se modifican según las mismas, abarcando desde el fomento de la capacidad empresarial hasta la solución de los problemas estructurales.

Existen dos elementos fundamentales para materializar las estrategias de desarrollo local: (Méndez Delgado, Elier, 1997)

• Disponibilidad de recursos (humanos, materiales o empresariales y financieros).

• Participación de los agentes públicos y privados interesados en cada iniciativa.

Los territorios que no cuenten con los recursos necesarios propios para su desarrollo deben explotar al máximo los recursos que se encuentren en su área geográfica (recursos endógenos)

El desarrollo local es un proceso que incluye a actores, estructuras, poderes y niveles de organización conectados entre si, que facilitan el mejoramiento de la condiciones de vida. Por lo que la gestión debe ser entendida como el instrumento que contribuye a armonizar las relaciones entre lo local y lo nacional, la centralización y la descentralización, entre los diferentes tipos de recursos posibilitando un mejor uso de los mismos, así como contribuyendo a crear un entorno innovador.

Es posible comprender como local, un espacio cuyos límites están dados por la escala municipal y provincial (en el caso de Cuba), donde ocurren procesos que tienen consecuencias importantes para sus estructuras al promover el desarrollo en las dimensiones políticas, económicas y socioculturales, consolidando en las localidades las redes sociales. De aquí se deriva que el desarrollo local es la realización del potencial de cambios cualitativos que se da en estos escenarios y donde el factor conciencia en el uso eficiente de los recursos endógenos puede favorecer el mejoramiento de la calidad de vida.

El desarrollo territorial y local es el encargado de potenciar las fuentes de riquezas y los recursos de las localidades cuyo objetivo principal está encaminado al logro de un desarrollo pleno.

Desarrollo no es solo crecimiento económico sino una mejora continua y sostenible del nivel de vida y bienestar de la población; por eso es posible plantear que el desarrollo local toma como base la iniciativa de cualquier actividad económica que genere empleo y riquezas, realizándose en una localidad o territorio al que no debe deteriorar. Es por ello que el desarrollo local se basa fundamentalmente en los siguientes elementos:

• Aprovechamiento de cualquier iniciativa en las actividades económicas que promueva la generación de empleos y riquezas.

• La actividad turística en la localidad o territorio donde se desarrolla, no la deteriora ya que constituye un bien económico en si mismo.

Según informe del Banco Mundial del PNB del mundo, se comercializa internacionalmente menos del 20%, reflejando que el 80% de la producción mundial están presentes en las cuentas nacionales de los ámbitos locales o nacionales.

El crecimiento de la producción se encuentra afectado por fluctuaciones denominadas ciclos económicos, que no son más que la fases en la evolución del crecimiento económico, en las que se alternan las situaciones de crecimiento elevado, expansión económica, con períodos reducidos e incluso negativo recesión económica. Y el hecho de que la economía crezca en forma de ciclo no significa que no crezca sino por el contrario.

La forma de crecimiento de la economía en ciclos es aplicable a cualquier dimensión espacial y poblacional, ya que en condiciones normales, el crecimiento económico positivo a largo plazo y la forma de ciclo se encuentra asociada con el carácter general de cualquier economía con independencia de su tamaño, por eso la distinción de ambos elementos en el ámbito de la economía local y regional tenga también relevancia.

Todas las comunidades territoriales tienen un conjunto de recursos económicos, humanos, institucionales y culturales, que conforman el potencial de desarrollo del territorio. Sobre la base de estos recursos se articulan los procesos de crecimiento económico local.

Una colectividad territorial puede por iniciativa propia encontrar nuevas ideas y proyectos para así solucionar competitivamente sus problemas y donde puedan utilizar sus propios recursos. Para esto es necesario el surgimiento de una fuerza emprendedora local, siendo una condición necesaria.

La capacidad de cada territorio o localidad de dirigir el propio proceso de desarrollo, junto a la movilización de los recursos disponibles en el área de su potencial de desarrollo, conduce al desarrollo endógeno.

Para poder eliminar las restricciones al buen funcionamiento de la economía local y a la mejora de la competitividad de las empresas en cada territorio se requiere de tratamientos específicos y la utilización de instrumentos adecuados.

Para lograr el desarrollo de un territorio no es necesario realizar grandes proyectos industriales, sino impulsar los proyectos que utilizan el potencial de desarrollo y promueven el ajuste progresivo del sistema económico local.

La economía local esta conformada por los ingresos percibidos por las instalaciones de carácter nacional o provincial, sus utilidades, ocupación del suelo, uso de infraestructura y contaminación del ambiente, además esas instalaciones son fuente de empleo para la localidad y se pueden establecer relaciones de cooperación a través de la elaboración conjunta de pequeños proyectos en favor de la comunidad, aprovechamiento de la infraestructura de apoyo de las grandes industrias, uso de residuos y desechos como base de producciones locales, contribuyendo a la sustentabilidad del desarrollo económico.

Economía local no se refiere a economía de subordinación local sino a las actividades económicas de la localidad (municipio o ciudad). Es por ello que se puede definir de la siguiente forma: (Elier Méndez, 1997).

• El conjunto de actividades de producción y servicios de la localidad (municipio o ciudad), independientemente de su nivel de subordinación.

• Un potencial que abarca tanto las actividades como los recursos de que dispone ya sean físicos o sociales. Su estudio es indispensable para elaborar propuestas de desarrollo, teniendo en cuenta que este es un proceso cuyo producto final significa más empleo y crecimiento económico.

• El desarrollo económico local no puede concebirse de manera autárquica, ni se le puede aislar del cambiante entorno económico.

Algunos ejemplos que contribuyen con el desarrollo económico local en Cuba son: el avance de la descentralización económica y la gestión empresarial, las empresas que orientan su gestión económica a los mecanismos de mercado, reestructuración de la fuerza laboral e incremento del trabajo por cuenta propia, expansión de mercados agropecuarios e industriales, oficialización de diversas formas de propiedad (empresas mixtas, corporaciones), despenalización del dólar y saneamiento de las finanzas internas.

Algunas barreras que frenan el desarrollo de la economía territorial y local son:

• Limitación y centralización de recursos y decisiones de las instancias centrales del estado.

• Falta de autonomía de los municipios.

• Insuficiencia de reformas tributarias en letra y espíritu de aplicación consecuente.

• Los gobiernos municipales solo cumplen la función de recaudadores del presupuesto.

• La centralización del modelo financiero impide a los municipios tomar decisiones respecto a las inversiones.

• La subutilización de extensas áreas agrícolas.

Para mejorar esta situación es necesario que los gobiernos municipales (locales) tengan cierta autonomía en la aprobación y distribución del presupuesto, en la movilización de recursos financieros y en la ejecución de inversiones.

El desarrollo local se basa en tres elementos fundamentales: la iniciativa, una actividad económica que se desee poner en marcha y genere empleo y riquezas en el territorio, lugar donde voy a asentar la iniciativa, el territorio representa un bien económico en si mismo ya que cualquier deterioro derivado de la actividad económica, conllevará al deterioro del territorio y la devaluación de su armonía, puesto que no todos los territorios están preparados para aceptar cualquier actividad económica sino aquella cuyo desarrollo no afecte las características naturales.

De lo anterior se deduce la estrecha intervinculación del desarrollo territorial, local, con el desarrollo endógeno.

Desarrollo endógeno significa la capacidad para transformar el sistema socioeconómico; la habilidad para reaccionar a los desafíos externos; en la promoción de aprendizaje social; y la habilidad para introducir formas específicas de regulación social a nivel local que favorecen el desarrollo de las características anteriores. (Garofoli, 1995)

El desarrollo territorial es considerado como un proceso esencialmente endógeno y el desarrollo endógeno como emergencia sistemática en un sistema territorial altamente sinergizado. Este concepto se ve afectado por la globalización por lo que ya no se puede confiar ciegamente en la auto-organización y surge nuevamente la necesidad de intervenir.

El desarrollo endógeno se encuentra estrechamente asociado al capital cognitivo(incluye el conocimiento científico acerca de la estructura y la dinámica de los procesos de cambios social territorial), el capital simbólico( incluye la creación , difusión y mantenimiento de un discurso), al capital social(incluye la confianza inter-personal y la asociativa), el capital cívico(incluye la confianza en las instituciones y en las organizaciones y el espíritus demográfico) y al capital institucional (incluye la densidad del tejido respectivo, y al clima de interacción inter-institucional y el modernismo de las instituciones). El manejo de estos capitales asegura al territorio que pueda aumentar su autonomía decisional, su capacidad para retener y reinvertir el excedente, su capacidad para generar innovaciones y su capacidad para crear una identidad de su comunidad con el territorio, es decir, conocimiento, actores e instituciones son los pilares del desarrollo endógeno.

La endogeneidad del desarrollo regional habría que entenderla como un fenómeno que se presenta por lo menos en cuatro planos que se cortan y se cruzan entre si. Primero, la endogeneidad se refiere o se manifiesta en el plano político, en el cual se identifica como una creciente capacidad regional para tomar las decisiones relevantes en relación a diferentes opciones de desarrollo, deferentes estilos de desarrollo y en relación al uso de los instrumentos correspondientes, o sea, la capacidad de diseñar y ejecutar políticas de desarrollo y sobre todo la capacidad de negociar. Esto se ajusta perfectamente a las funciones de los gobiernos provinciales Asamblea Provincial del Poder Popular (APPP) y municiopales Asamblea Municipal del Poder Popilar (AMPP). Segundo, la endogeneidad se manifiesta en el plano económico, y se refiere en este caso a la apropiación y reinversión regional de parte del excedente a fin de diversificar la economía regional, dándole al mismo tiempo una base permanente de sustentación en el largo plazo. Tercero, la endogeneidad es también interpretada en el plano científico y tecnológico, la vemos como la capacidad interna del sistema para generar sus propios impulsos tecnológicos de cambios capaces de provocar modificaciones cualitativas en el sistema. Cuarto, la endogeneidad se plantea en el plano cultural, como una suerte de matriz generadora de la identidad socio territorial. (Boisier, 1993). Para el caso cubano la endogeneidad puede articular perfectamente con el sistema de economía y planificación que impera en el país.

Basta con observar la estructura de cada uno de los factores del crecimiento territorial sobre todo en el marco de la concentración del capital, el progreso técnico, la mundialización y la globalización y la todavía dominante centralización decisional nacional, para caer en cuenta que los territorios solo pueden influir en las decisiones mediante complejos procesos de negociación, a los diferentes niveles.

En el ámbito geográfico, los atractivos naturales, el medio ambiente, el clima social y otras actividades complementan el denominado potencial de desarrollo endógeno, que contribuye al uso eficiente de los recursos disponibles de la localidad en la producción de bienes y servicios en aras del desarrollo mismo.

La acumulación del capital, la acumulación del progreso técnico y la acumulación del capital humano son los tres factores causales del crecimiento, pero al aplicar esta formulación en los territorios hay que agregarles otros tres factores: el proyecto nacional y el ordenamiento territorial incluido en el; la política económica nacional y sus diferentes efectos territoriales; y la demanda externa compuesta fundamentalmente por las exportaciones. Se obtiene una matriz con seis factores causales y cuando se mira desde el punto de vista de los agentes (en la mayoría de los casos estos son externos) que toman las decisiones acerca de la temporalidad, magnitud y dirección de estos factores, haciendo del crecimiento económico territorial un proceso altamente exógeno al propio territorio.

Existen dos posibilidades. Una sería confiar en las capacidades de auto-organización del sistema territorial y esperar por el surgimiento del crecimiento económico también como una suerte de emergencia sistemática, característica del desarrollo endógeno. La otra sería socialmente más aceptable, es intervenir sobre la matriz para así apurar las cosas.

Las aparentes contradicciones de la globalización, la tensión entre la “mundialización” que ella supone y el surgimiento de una suerte de contra-reacción que afirma el valor de los procesos auto-controlados por las propias unidades sumergidas en la globalización: empresa, territorios, culturales, etc. Es la conocida formula global, ya sea su lectura de “piensa local y actúa global” o como “piensa global y actúa local”, la primera más empresarial y la segunda más gubernamental. (Boisier, 2001).

En este contexto se ha producido una revitalización de la idea de endogeneidad debido al cambio en el pensamiento teórico sobre crecimiento económico. Sin dudas, este cambio ha sido de una importancia tal, que pareciera que vivimos ineludiblemente en un mundo en el cual el crecimiento económico es obligadamente endógeno.

El concepto de desarrollo endógeno hace referencia al proceso de acumulación de capitales en localidades y territorios, se trata de procesos de desarrollo que permiten obtener economías de escala externa a las empresas pero internas al sistema productivo.

La utilización del potencial económico local que favorece las instituciones y mecanismos de regulación que caracterizan a cada territorio son la base de los procesos de desarrollo local, ya que favorecen o limitan la dinámica económica y determinan la senda específica de desarrollo endógeno.

El desarrollo endógeno obedece a una visión territorial de los procesos de crecimiento y cambio estructural, ya que cada territorio se enlaza al sistema de relaciones económicas de un país, en función de su especificidad territorial, de la identidad económica, técnica, social y cultural.

Finalmente el concepto de desarrollo endógeno contiene tres dimensiones: desarrollo económico, desarrollo social y desarrollo duradero o sostenible.

El desarrollo local propone alcanzar con sus iniciativas mayor eficiencia, equidad, ecología, lo que representa una tarea compleja siendo necesario el acuerdo táctico o expreso de los actores económicos y sociales y el consenso sobre las prioridades y el camino a seguir.

El desarrollo endógeno es una interpretación orientada a la acción, que permite a las comunidades locales y regionales enfrentar los desafíos de la competitividad y abordar los problemas que presenta la reestructuración productiva utilizando el potencial de desarrollo existente en el territorio (Antonio Vázquez, 2000).

La estrategia de desarrollo endógeno se plantea el desarrollo de territorios en un entorno con elevados niveles de incertidumbre y turbulencias y sus acciones son dirigidas a mejorar la infraestructura para producir y vivir, a fortalecer la capacidad organizativa del territorio, el uso adecuado de los recursos no renovables, a suplir la carencia, mejorar los factores inmateriales del desarrollo, sobre todo se refiere a la calidad de recursos humanos y la difusión de las innovaciones.

El potencial de desarrollo endógeno sería la cantidad de bienes y servicios que en un área puede llegar a producir mediante la eficiente utilización de los recursos disponibles. Esto, sin dudas puede significar el desempeño del turismo como factor de desarrollo local, dada su endogeneidad.

Los recursos materiales y naturales, infraestructura de transporte, comunicaciones, estructuras urbanas, capital físico, humano, aptitud para dirigir empresas, son los elementos que contribuyen al crecimiento de un territorio e incluso se podría hablar de potencial de desarrollo turístico endógeno.

El potencial de desarrollo endógeno o el potencial de desarrollo turístico endógeno lo podemos encontrar dividido en dos grandes espacios de actividades turísticas:

• Turismo litoral: es aquel que se desarrolla en las costas y su principal interés es sol y playa.

• Turismo de interior: es al que se desarrolla en zonas geográficas diferente a los litorales.

• Turismo urbano: sería el que se desarrolla en las ciudades por diferentes modalidades: turismo cultural, turismo de congreso, turismo de negocio, turismo de eventos deportivos y turismo religioso.

• Turismo en espacio rural: es aquel que se desarrolla en pequeños municipios por diferentes modalidades: turismo cinégico, turismo de balneario y ecoturismo.

La conservación y mejora del medio ambiente debe ser compatible con el modelo de desarrollo económico- social del territorio ya que constituye un factor estratégico para la competitividad de los productos y recursos turísticos locales como para el aumento de la calidad de vida de la población.

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