BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales


ASPECTOS SOCIOPSICOLÓGICOS DEL TURISMO

Miguel Matute Peña y otros


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CAPITULO 3. EL TURISMO A LA LUZ DE LOS ESTUDIOS POBLACIONALES.

Cuando el turista se mueve dentro de las instalaciones que les son destinadas, tales como hoteles, balnearios y otras, sus relaciones son con personal especializado, los productos que han de consumir guardan los requisitos de calidad requeridos y así ocurre con todo lo que ha de satisfacer a estos turistas.

No quiere decir que no se presenten inconvenientes, tanto para el turista como para aquellos que en estos ámbitos han de entrar en contacto con ellos. La Sociología ha de ocuparse, también, de estos problemas.

Un problema mas complejo, resulta cuando el turista se mueve, especialmente en la ciudad (Pérez Montero O. 1998) ,entre los habitantes de la misma y utiliza aquellos servicios que no les están destinados específicamente.

Para dar un tratamiento sociológico, alternativo y congruente con las teorías sociológicas, al problema del movimiento turístico, hemos concebido considerar a éste como un movimiento de población, tal y como se trata en la Sociodemográfica.

En general, cuando consideramos los movimientos turísticos como movimientos poblacionales, podemos aplicarle la lógica inherente a una terminología ya existente en el campo de la Sociodemográfica.

Emisores turísticos pasan a ser aquellos lugares de donde procede el turismo y los destinos turísticos pasan a ser tratados como receptores de población turística. De aquí se desprende que podemos utilizar la noción de saldo poblacional turístico, como la diferencia entre el turismo que se emite y el turismo que se recibe.

Los indicadores asociados a variables demográficas como el sexo, la edad, las migraciones y otras pasarían a enriquecer la forma de emisión de los datos asociados con el turismo y lo que es más importante, aumentaría la potencia analítica del tratamiento al fenómeno turístico.

El movimiento de la población turística puede ser considerado como una de las formas de movimiento poblacional que no implica cambio permanente de residencia o hablando en términos positivos se trata de un tránsito de personas con cambio temporal de residencia.

De esta índole son los movimientos oscilatorios o pendulares, que son movimientos de ida a un lugar y retorno al lugar de residencia habitual. A diferencia de éstos, los movimientos turísticos son selectivamente periódicos, en el sentido de que no todo turista regresa con periodicidad a un destino turístico dado y muchas veces no regresa ni una sola vez.

Esto no guarda similitud con el caso de personas, que viajan desde una localidad a la ciudad, para trabajar, para vender u otros menesteres, regresando a su vivienda periódicamente pero repitiendo esta operación durante un tiempo prolongado que puede extenderse a algunos años.

La periodicidad de los movimientos turísticos, a los efectos de poner de relieve sus peculiaridades, se ve mas clara si consideramos el movimiento entre un emisor y un receptor o destino dado.

De esta manera, cabe introducir tasas relacionadas con el retorno de turistas de una temporada a otra a un destino dado. Podemos concebir una tasa bruta que de cuenta del retorno turístico respecto al total anterior, tasas específicas por cohorte y emisor para un destino dado, tasas específicas por sexo o por edades, etc.

Cualquiera de los indicadores demográficos puede ser utilizado, cuando consideramos al turismo como un movimiento poblacional, pero no todos son igualmente apropiados.

Nos inclinamos por utilizar criterios generales para la selección de los indicadores demográficos .Asociamos éstos al propósito de determinar el peso de los factores sociales en la calidad de la oferta turística y la necesidad de la minimización de los efectos negativos que en el orden social pudiera comportar el turismo en casos concretos.

Esto nos lleva a clasificar los indicadores demográficos, asociados al turismo, en:

1-Indicadores cuyos valores pudieran resultar favorables, a partir de un cierto número, para el mantenimiento o incremento del flujo turístico.

2-Indicadores cuyos valores pudieran resultar negativos a los efectos de la “potencia atractiva” del destino turístico.

3-Indicadores cuyo desbalance requiere de un examen, en previsión de la existencia de determinados problemas.

A la primera clase de indicadores pertenecen los indicadores de salud. mortalidad, mortalidad infantil, morbimortalidad, morbilidad, atención de salud, instalaciones de salud y otros.( Moncada Santos M-Tesis, 2002)

A la segunda clase, pertenecen indicadores tales como los referidos a: delito, mendicidad, y similares.

A la tercera clase pertenecen indicadores que pueden dar lugar a comportamientos irregulares del turista o revelar su ya posible existencia. Entre ellos se cuentan los índices de: masculinidad, de desocupación, de población flotante y otros.

Las consideraciones propias de esta tesis, nos llevan a la utilización de indicadores seleccionados con carácter pronóstico. Esto tendría su concreción en ecuaciones de regresión estructuradas sobre datos tomados cronológicamente.

Al analizar al turismo como movimiento poblacional debemos consignar que como tal, no puede considerarse como un movimiento pendular ni como una migración. Tiene de común sólo el que es un movimiento de población y algún parecido a los movimientos pendulares, pero no en todas las ocasiones, según dijimos en líneas anteriores.

Mientras en el caso de las migraciones y movimientos pendulares tienen lugar móviles económicos, políticos, de obtención de servicios y otros relacionados con las necesidades humanas, materiales, de seguridad y las actividades laborales, en el caso de los movimientos turísticos operan móviles que tienen que ver con el descanso, el ocio u otros alejados de lo laboral y dirigidos, mas bien, a intereses recreativos culturales y psicosociales.

Los móviles turísticos han sido estudiados desde diferentes puntos de vista. Entre ellos tenemos aquellos que se basan en la teoría del ocio desde una perspectiva psicosocial (Crandall R-,1980,p.12,45,54) ( Kabanoff B.,1982,p.3,235,45)(García Vega J. L.,2003) o desde esa misma perspectiva utilizando el concepto de flujo (Argyle,1996).

Estos iniciadores de la teoría del ocio, dentro de la Psicología Social, no expresaron o no lo hicieron claramente, los vínculos de las necedidades para el ocio, entre si y con otras necesidades y factores sociales, entro y fuera de la Psicología Social.

Una consideración de todos los factores sociales en el análisis del fenómeno turístico requiere tener en cuenta, la demanda y el producto turístico.

La demanda es resultado del marketing, (San Martín Garcia J. E,,1997, p.54-55).de las características del destino y de otros factores contingentes, tales como el cambio monetario ,los ingresos o el costo del viaje. Es la suma de las intenciones reales de visitar un lugar determinado .La motivación turística, es por tanto, una parte del concepto de demanda.

Una manera de dar tratamiento a la diferencia de los móviles del turista respecto a la de los integrantes de otros movimientos poblacionales, la encontramos en la noción de producto turístico, desarrollada en los estudios de Marketin.

Ya a la altura de la primera mitad de la década de los 80, encontramos, en los estudios de Marketing, una visión unitaria de la noción de “producto” que sirve a nuestros propósitos. (Cardenas Tabares F.-PRODUCTO TURISTICO-1984, p.13-15).

“Producto en general-expresa Cardenas Tabares- constituye todo lo que contribuye a la satisfacción de sus clientes o consumidores .En un análisis final lo que se vende son satisfacciones que esperan obtenerse por el consumo de ese producto. El producto es el resultado de toda la acción del sistema Esta, dentro de la actividad turística, está constituida por los atractivos ,las facilidades y la accesibilidad; los tres aspectos que en la actualidad integran el producto turístico se muestran a continuación:

PERODUCTO =Atractivos +facilidades + accesibilidad

TURISTICO

En una forma más clara: el producto turístico está conformado por los atractivos naturales, artificiales y los humanos.

Estos últimos configuran la denominada hospitalidad, quizás mas importante que los dos anteriores.

Las facilidades se refieren al alojamiento en todas sus formas; a la industria de alimentos y bebidas, al entretenimiento y diversión, a las agencias de viaje, a las arrendadoras de automóviles, y en forma especial, al personal capacitado disponible para atender adecuadamente a los turistas.

Para completar el producto se requiere que los atractivos sean accesibles, ya sea por barco, avión, autobús o automóvil; de ahí la denominación conque se le conoce actualmente: ACCESIBILIDAD.

Los tres componentes del producto turístico reflejan claramente la razón por la cual constituye un error, realizar su promoción por separado, ya que en el fondo implica desintegrar el producto, aspecto que redunda en una pérdida de los recursos financieros dedicados en este campo”. (p.13-15)

En forma sintética nos da la siguiente definición:

“El producto turístico está conformado por el conjunto de bienes y servicios que se ofrecen al mercado -para un confort material o espiritual -en forma individual o en una gama muy amplia de combinaciones resultantes de las necesidades requerimientos o deseos de un consumidor que llamamos turista”.

Mas modernamente, Muñoz (Ver Muñoz, F.-Marketing turístico-Editorial Centro de Estudios Ramón Areces S. A. 1994 p.170) nos define el producto turístico como:

“conjunto de elementos o actividades realizadas por el hombre destinadas a la satisfacción de unas necesidades, que no se presentan bajo la forma de un bien material”

El carácter de servicio que tiene el producto turístico “provoca que el turismo posea una serie de características comunes a todos ellos, pero con aspectos propios y diferenciados” (Ver San Martín Garcia J. E-Psicosociologia del Turismo, Ediciones Aljibe, Málaga, 1997, p.129)

Precisamente, deseamos subrayar, en esta parte de nuestro trabajo, que en los estudios de Marketing se introduce una primera conceptualización sobre la diferencia entre los servicios que se brindan al turista y los servicios ordinarios y los correspondientes a los integrantes de otros movimientos poblacionales.

A los efectos de investigar, tanto el peso d los factores sociales en la calidad de la oferta turística como el efecto del turismo como la población, se requiere profundizar en esas diferencias .Esto conlleva a considerar la existencia de un lugar para los factores sociales dentro de los elementos del producto turístico, como se verá mas adelante.

En preparación de estos aportes nos referiremos a algunos aspectos del comportamiento turístico.

Este comienza más allá de las necesidades básicas, que a nuestro parecer, denotan a aquellas personas que buscan descanso, distracción o placer en sus viajes, en pocas palabras, esta guiado a la satisfacción de necesidades de mero lujo. Resumiendo:

Tránsito de personas con cambio temporal de residencia: movilidad regional limitada en el tiempo.

Existencia o inexistencia de interrelaciones con los naturales del lugar.

Participación en el consumo con medios ganados en el lugar de origen.

Satisfacción de necesidades de mero lujo y, por consiguiente, el consumo también es de lujo.

Afán de confort y de seguridad.

La conducta turística no está condicionada por un instinto biológico, sino que depende del comportamiento social, por ejemplo el característico de la gran ciudad. Así la movilidad regional, limitada en el tiempo, típica de los turistas se halla relacionada con la movilidad que distintos autores estudian como propia de las grandes urbes. Si esa continua movilidad de las grandes ciudades debe considerarse como un impulso colectivo o quizá como una necesidad habitual del hombre moderno.

Tratándose de los signos indicadores de lo que debe entenderse por turista, queremos aquí traer a colación ese afán por la movilidad como un criterio formal definitorio del turista.

Revisando pues, en este sentido, nuestro primer criterio referente a la movilidad regional limitada en el tiempo, deducimos:

Afán de movilidad, que tiene su expresión en la movilidad regional limitada en el tiempo.

Existencia o inexistencia de interrelaciones entre el turista y los habitantes del lugar.

Satisfacción consumidora de necesidades de lujo con medios ganados en el lugar de origen.

Afán de confort y seguridad física.

El dominio de indicadores de la movilidad turística unido al conocimiento de los indicadores demográficos ya mencionados, permite establecer políticas y planes promocionales, tendientes a minimizar los efectos negativos que pudieran tener determinados indicadores y/o la repercusión negativa del turismo sobre áreas determinadas.

Los indicadores sociales negativos y las áreas de movilidad turística son dos variables que entran en compromiso y que debe actuarse sobre su forma de relación, modificación o ambas.


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