DESCUBRIMIENTO Y CONQUISTA:

Del nombre de los españoles


Pulse aquí para acceder al índice general del libro.

En esta página web no están incluidos los gráficos, tablas, mapas, imágenes y notas de la edición completa.

Pulsando aquí puede acceder al texto completo del Tomo I en formato PDF (125 páginas, 668 Kb)

Pulsando aquí puede acceder al texto completo del Tomo II en formato PDF (153 páginas, 809 Kb)

Alfonso Klauer

Más contrabando

Respecto del contrabando no hay tantos registros como debiera, por lo menos si se les compara con el enorme volumen que dicha práctica alcanzó a tener. Pero algunos, como el que vamos a citar, son muy elocuentes.

De la Puente Brunke declara que el ya referido galeón Jesús María de la Limpia Concepción “llevaba una importante cantidad de barras de plata de contrabando (...) Esto –nos sigue diciendo– no debe sorprender, ya que el contrabando fue muy frecuente en las rutas marítimas del siglo XV (...) hispanoamericano...” 209.

Dice también De la Puente Brunke que en 1669 –es decir, dos años después de dar el préstamo al virrey en funciones–, el oidor Villela fue acusado, por el fiscal del Consejo de Indias, de remitir “grandes cantidades de plata a Tierra Firme”.

¿Qué podía decir el bien prestado virrey Conde de Lemos –que por lo demás estuvo en el cargo hasta bien entrado el año 1674–? ¿Estuvo algún día en prisión el doctor Villela? ¿Devolvió lo prestado el virrey Conde de Lemos? Es lamentable, sin embargo, que De la Puente Brunke crea que el caso de Villela “representa un caso excepcional”.

E igualmente lamentable resulta que crea “que las normas establecidas en cuando al desempeño profesional de los jueces de la Audiencia fueron muy rígidas”; y que el historiador Guillemo Lohman crea que los jueces de la Audiencia requerían de “grados excepcionales de virtud e integridad”.

¿Cómo no saber que el papel aguanta todo? ¿Que las leyes de ayer –como la Constitución de hoy– son letra muerta cuando así lo quiere el poder? ¿Sería tan escandalosamente corrupto y genuflexo el Poder Judicial de hoy si casos como el de Villela hubieran sido excepcionales? ¿O se nos pretende decir, que la corrupción fue inventada, recién durante la República, por los Padres de la Patria?

En verdad pues, como anota Frederic Engel, la “corrupción y la concusión” habrían de imponerse en América. Y agrega: “un funcionario español, para obtener una plaza, un cargo, le debía pagar a alguien; [y] forzosamente tenía que recuperar su inversión; así, desde abajo hasta arriba del sistema, se pagaba para obtener lo que uno deseaba”.

En Lima se pagaban grandes fortunas a oidores corruptos como Villela. En los remotos pueblos de provincias el cura callaba por unas cuantas gallinas o con los servicios de una infeliz muchacha. Todos los servicios y todos los silencios tenían precio: en dinero, en especies o con servicios personales.

Grupo EUMEDNET de la Universidad de Málaga Mensajes cristianos

Venta, Reparación y Liberación de Teléfonos Móviles
Enciclopedia Virtual
Biblioteca Virtual
Servicios