Observatorio Iberoamericano de la Economía y la Sociedad del Japón
Vol 3, Nº 11 (mayo 2011)

 

TSUNAMI Y EVOLUCIÓN ECONÓMICA DE JAPÓN

 

Ernesché Rodríguez Asien
Profesor-Investigador
Universidad de la Habana
ernesche@rect.uh.cu
rodriguezasien@yahoo.es
 




Los dos fenómenos naturales ocurridos en Japón en marzo del 2011, han sido los más grandes de su historia, un sismo de más de 9 grados en la escala de Richte y un tsunami con olas de hasta 10 metros; lo que afectó una de sus centrales nucleares y generó un estado de emergencia nuclear. Estos fenómenos no tienen precedentes, pues la nación nipona podría necesitar hasta cinco años para recuperarse de los efectos desastrosos del sismo y posterior tsunami, que causaron daños por 235 000 millones de dólares.

El movimiento sísmico ha echado por tierra la recuperación económica. Dentro de los países desarrollados, Japón es el que más sufrió la crisis financiera. Su actividad cayó un 1,2% en 2008 y un 6,3% en 2009. Sin embargo, el año anterior logró de nuevo tasas de crecimiento, a pesar de registrar una caída del PIB en el último trimestre. Ello no impidió que todos los expertos auguraran que la economía japonesa volvería a la senda del crecimiento en 2011. De hecho, el terremoto llegó en un momento en que los pedidos industriales crecían a un ritmo del 4,2%, la producción industrial iniciaba la recuperación y la tasa de paro se situaba en el 4,9%, el nivel más bajo desde marzo de 2009.

El Banco Mundial estima que los daños equivalen a un 2,5% y un 4% del PIB del país en el 2010. También Morgan Stanley, uno de los principales bancos de EE.UU., estimó que los daños causados por dichos eventos, que han implicado la suspensión temporal de operaciones en plantas de empresas como Sony, Toyota y Honda, ubicadas en el noreste del país asiático, significarán una reducción en el crecimiento de la tercera economía más importante del mundo de hasta 12%.

En tanto, otros analistas indicaron que, unido a lo anterior, la interrupción en los sistemas de alimentación y distribución hace pensar en una “recesión casi segura”.

La falta de energía eléctrica es otro factor que incidirá en un menor crecimiento del PIB nipón durante la primera mitad del año. Paralelamente, el ministro de Política Nacional de Japón, Koichiro Gemba, advirtió que podría ser necesario elaborar hasta tres presupuestos adicionales para financiar la reconstrucción del país. “El daño es generalizado, así que dos podrían no ser suficientes”, señaló en referencia a las cuentas públicas del próximo año fiscal, que comienza el primero de abril y termina el 31 de marzo de 2012.

El Banco Mundial estima que la economía decrecerá 0,5% en el 2011. Sin embargo prevé que se recupere de nuevo en el segundo semestre del año. ¨ El daño a la vivienda y la infraestructura no tiene precedentes¨, asegura el Banco Mundial. También dice esta Institución que el crecimiento deberá aumentar en los siguientes trimestres a medida que los esfuerzos de reconstrucción que podrían durar cinco años se aceleren.

Según la CEPAL, las repercusiones en el comercio internacional de esta situación en Japón tendrán un efecto negativo sobre el desempeño del comercio y la inversión mundial, aunque principalmente en la región Asia-Pacífico. La potente industria nipona ha convertido a Japón en uno de los principales importadores de materias primas del mundo.

Por otra parte, el volumen de las relaciones comerciales entre España y Japón es relativamente bajo aunque aumentaron significativamente en 2010. España exportó al país asiático productos por una cantidad equivalente a 1.432 millones el año pasado, un 17% más e importó bienes por 3.471 millones. El principal temor de la economía española es que la crisis de Japón incida fuertemente a Alemania, que supone el motor y la locomotora para el resto de Estados miembros de la UE.

Aun así, reconoce que los daños del terremoto conducirán a corto plazo a cortes de la producción y de la demanda en los mercados internacionales. En cualquier caso, argumenta que la fase de reconstrucción del país, que se iniciará en la segunda mitad del año, servirá para contrarrestar el impacto que sufrirá la producción industrial en los próximos meses.

La comunidad internacional ya ha mostrado su voluntad de socorrer a la tercera economía del mundo. El presidente de EE UU, Barack Obama, reiteró que su país continuará ofreciendo toda la ayuda posible a Japón.

Breve análisis del fenómeno:

La economía japonesa deberá hacer frente a uno de los terremotos más devastadores de la historia en un momento en el que los datos macroeconómicos indicaban una mejora de la actividad.

Japón podría entrar de nuevo en recesión en la primera mitad del año. Pero la reconstrucción, si comienza en la segunda mitad, aún podría permitir un crecimiento positivo para el ejercicio.

Las perspectivas de crecimiento y recuperación de la economía nipona dependen de la situación interna de este país, influyendo al mismo tiempo la crisis financiera internacional como situación externa. Ahora se le suman como lastre para su crecimiento económico los fenómenos naturas ocurridos. Habría que esperar como va evolucionando esta economía asiática.
 


Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato:

Rodríguez Asien, E.:  “Tsunami y evolución económica de Japón" en Observatorio de la Economía y la Sociedad del Japón, mayo 2011. Texto completo en http://www.eumed.net/rev/japon/

 

 

 

El Observatorio Iberoamericano de la Economía y la Sociedad del Japón es una revista académica, editada y mantenida por el Grupo eumednet de la Universidad de Málaga. Tiene el Número Internacional Normalizado de Publicaciones Seriadas ISSN 1988-5229 y está indexada internacionalmente en RepEc.

Para publicar un artículo en esta revista vea "Acerca de...".

Para cualquier comunicación, envíe un mensaje a rodriguezasien@yahoo.es


Director:
Ernesché Rodríguez Asien (CV)
Editor:
Juan Carlos M. Coll (CV)
ISSN: 1988-5229
EUMEDNET