Yousy Baby Ramírez*
Universidad de Guantánamo, Cuba
Correo: ybaby@cug.co.cu
Resumen
El Caribe es una región llena de acontecimientos  artísticos y culturales de gran transcendencia que le otorgan merecida fama. La  geografía cultural del Caribe es el resultado de procesos sociales, donde los  encuentros étnicos son una condicionante histórica. Las fiestas populares del  Caribe juegan un importante papel en la conformación de la identidad cultural  caribeña, por su carácter esencialmente transcultural. Por la vitalidad que en  la actualidad poseen, merecen una mirada crítica para preservar de ellas sus valores  auténticos. El presente estudio determina la influencia de las fiestas  populares en las costumbres y tradiciones del Caribe. La investigación se apoya en métodos  y técnicas de las metodologías cualitativa y cuantitativa. Aporta criterios de  diferentes autores acerca del Caribe, las fiestas populares y su impronta en  las nuevas generaciones. 
Summary
The Caribbean is a region full of artistic and cultural events of great importance that give it deserved fame. The cultural geography of the Caribbean is the result of social processes, where ethnic encounters are a historical condition. The popular festivals of the Caribbean play an important role in shaping the Caribbean cultural identity, due to its essentially cross-cultural character. Because of the vitality they currently have, they deserve a critical look to preserve their authentic values from them. The present study determines the influence of popular festivals in the customs and traditions of the Caribbean. The research is based on methods and techniques of qualitative and quantitative methodologies. It provides criteria from different authors about the Caribbean, popular festivals and their imprint on the new generations.
Palabras claves:
El Gran Caribe – The Greater Caribbean
Costumbres caribeñas – Caribbean customs
Tradiciones culturales – Cultural traditions
Identidad caribeña – Caribbean Identity
Fiestas populares – Popular parties
Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato: 
Yousy Baby Ramírez (2020):  “Las fiestas populares del caribe: una mezcla de costumbres y tradiciones”, Revista Caribeña de Ciencias Sociales (marzo 2020). En línea:
 https://www.eumed.net/rev/caribe/2020/03/fiestas-populares-caribe.html
http://hdl.handle.net/20.500.11763/caribe2003fiestas-populares-caribe
Introducción
El Caribe como región es una de las grandes encrucijadas  del mundo. Posee diversidad de criterios y  puntos de vista sobre los países que la integran. Conserva  una gran diversidad de lenguas, costumbres y tradiciones resultante de la  convergencia de pueblos de diversas culturas. Presenta elementos culturales  comunes que son fruto de la historia y las experiencias compartidas de sus  gentes.
El nombre del Caribe proviene de  aquellos aruacos marineros que se extendieron por todas las Antillas. Durante  cinco siglos la zona ha sido un ámbito geopolítico de excepcional complejidad e  importancia. En este sentido, el arte ha revelado el enorme caudal de las  fiestas populares que actúan como catalizadoras de la imagen visual del Caribe.  Se trata de un diálogo artístico que aporta al archivo sociocultural de las tradiciones  pasadas y presentes. 
Las fiestas populares tanto en el  pasado como en el presente son manifestaciones materiales, artísticas y  espirituales, transmitidas y creadas por los pueblos. Contienen en sí las distintas  tradiciones, creencias, ritos religiosos, música, danzas, comidas,  oridntación, expresiones literarias, vestuario y otros aspectos de la cultura  espiritual y material. Forman parte de  la cultura popular tradicional que resulta básica para el estudio integral de  las principales costumbres, hábitos y comportamientos de un núcleo social. 
Teniendo en cuenta lo anterior expuesto, el presente estudio se propone como problema de  investigación: ¿Cómo influye las fiestas populares en las costumbres y  tradiciones del Caribe? Con el objetivo de: Determinar la influencia de las  fiestas populares en las  costumbres y tradiciones del Caribe. La investigación se apoya de métodos y técnicas  de las metodologías cualitativa y cuantitativa.   Aportando diferentes criterios de autores acerca de las costumbres,  tradiciones, fiestas populares de la región del Caribe y su impronta para las  nuevas generaciones. 
Desarrollo: 
          El Caribe lo integran los países bañados por  las aguas de su mar: de Norte a Sur, Venezuela, Colombia, Panamá y las naciones  centroamericanas de Costa Rica, Nicaragua, Honduras, Belice, Guatemala y  México. También pertenecen las Islas Antillanas en tres grandes conjuntos que  se extienden en forma de arco hasta las costas de Venezuela: el primero el  archipiélago de las Bahamas, el segundo las Antillas Mayores con Cuba, La  Española (Haití y Santo Domingo), Puerto Rico y Jamaica; y el tercero  denominado Antillas Menores (divididas en islas de Sotavento y de Barlovento).  1  
          El término el Caribe ha sido definido por  varios estudiosos de distintas ramas del saber cómo: la historia, geografía,  política, geopolítica, antropología y los estudios de carácter sociocultural.  Los criterios coinciden en que el Caribe no siempre se nombró así y es una invención  del siglo XX. Es una zona especialmente heterogénea por su composición étnica,  racial, diversidad lingüística y pluralidad de enfoques para incluir o excluir  a las naciones del universo caribeño.
          Para Gaztambide (1996:75):
  “(…) No,  no siempre se ha llamado “Caribe” ese mar al sur de Puerto Rico; no, no hace  mucho tiempo que llamamos “Caribe” a las Antillas, menísimos a parte  de las masas de tierra continentales. El Caribe, con tanta denominación de una  región geográfica, es un invento del siglo XX. Esta invención arranca  precisamente de la transición en nuestra región de la hegemonía europea a la  estadounidense.” 2 
          Girvan (1999:6) considera: 
  “(…) Asumir  que los nombres en español y francés - El Caribe y La Caraïbe - son  traducciones exactas de la palabra en inglés Caribe sería un error. Para la  mayoría de los hispanoparlantes El Caribe se refiere a las islas de habla hispana  del archipiélago. El uso que los francoparlantes hacen del término La Caraïbe  tiende a tener un enfoque en las islas, en particular, las Antillas Menores.  También existen otros nombres que se utilizan para la región, tales como (West  Indies) las Indias Occidentales y (Les Antilles) Las Antillas.”  3
          Se considera que la palabra Caribe se utiliza  para nombrar al mar, las islas y las costas continentales adyacentes al mismo.  El término es una invención de fines del siglo XIX, pero sobre todo del siglo  XX. Los términos Caribe y Caraïbe suelen utilizarse indistintamente. Los  estudios acerca de los vocablos revelan que estos tienen sus propias  connotaciones y asociaciones específicas. Incluso entre los parlantes del mismo  idioma, tienen diferentes criterios para decidir qué lugares conforman su cuadro  imagen del Caribe. La mayor parte de la literatura académica describe el Caribe  como un espacio delineado por la historia común de la esclavitud, la sociedad  de plantación y la colonización. 
          López (2019:1) plantea:
  "(...)  vivir en el Caribe es como vivir en el centro del mundo. Somos la síntesis  singular de culturas, razas, tradiciones y como consecuencia de nuestra  combinación, constituimos un resultado vivo de color, movimiento y armonía.  Aunque pudiéramos ser otra cosa, preferiríamos ser siempre caribeños, ser  papelón, mofongo, ron, calalú, fufú, casabe o chicha y llevar además la carga  cultural de Europa, quien nos dejó sólo un poco de lo que se podía dejar y se  llevó todo lo que se podía llevar consigo". 4 
          El Caribe es una región rica en  manifestaciones culturales que le imprimen un sello personal. La música, las  danzas tradicionales y contemporáneas, la gastronomía, las fiestas populares,  su gente y los sitios históricos convierten a esta región en un lugar mágico  lleno de riquezas por descubrir. La pluralidad étnica, lingüística y religiosa la  hace heterogénea y al mismo tiempo, la historia común de sus pueblos la  singulariza dentro del continente americano. Espacio cultural en la que  confluyen tres entornos culturales (anglófono, francófono e hispano) marcados  por el proceso transculturación. Su estudio es un libro abierto que se  actualiza cada día. 
          A nivel  internacional varios investigadores han realizado estudios desde diferentes  perspectivas de la región del Caribe. Destacándose: Alegría (1969), Carew (1970),  Lamming (1972), Glissant (1990), Pépin (1991), Hurbon (1993), Silié (1998), Benítez  (1998), Ramírez (2002), Cruse (2013), Navarro (2014), Bolaños (2019), Poe  (2019) y Ríos (2019). Los criterios se centran en torno a la definición, características  históricas, políticas y socioculturales del área. Buscan acercarse a las realidades  culturales que son distintas y que suelen estudiarse de manera independiente.
          Cuba cuenta con profesionales de vasta experiencia en el tema como: Hebert  (2004), Martínez (2007), Olivera y Pozo (2009),  Yara (2010), Díaz (2012), Benítez (2012), Perales  (2012), Chailloux (2013), Lapeira (2019). Destacan los principales retos que enfrenta la región enfatizando  la identidad caribeña. Proponen  alternativas para la solución de los problemas de la zona y la necesidad  de integración del Gran Caribe. Resaltan  la necesidad de fortalecer la unidad para crear las capacidades analíticas y  educacionales en temas del Caribe. Así como, de establecer espacios para la  creación de redes de investigación y docencia en temas caribeños y sentar las  bases que permitan dar aportes concretos a las políticas de desarrollo  económico y social. 
          La historia del Caribe comienza a inicios de  1492 con el proceso de conquista y colonización iniciado por el genovés  Cristóbal Colón. A este proceso continuó el de las otras metrópolis europeas en  una fase de dominación caracterizada en los primeros momentos por una gran  inestabilidad sociopolítica y de importancia estratégica para un grupo de  naciones ajenas a la región misma. El proceso histórico caribeño se ha  distinguido por la autodeterminación del pueblo contra los opresores foráneos y  la lucha de las masas para mejorar su suerte frente a los explotadores locales.
          La región del Caribe es la única del hemisferio  que presenta un mosaico de influencias europeas, ya que confluye la británica,  española, francesa, holandesa y danesa. Esta variedad de influencias y de  culturas se expresa en el empleo de cinco lenguas: español, francés, inglés,  creole, holandés y de una variedad de dialectos. Se profesan más de cinco  religiones: catolicismo, islamismo, hinduismo, protestantismo, vudú, entre  otras. Existen varios grupos étnicos, principalmente afroamericanos, blancos y mestizos.  Así mismo, el Gran Caribe presenta una gran diversidad en tamaño de poblaciones  que, junto con las manifestaciones económicas, políticas y culturales completan  un cuadro de inmensa complejidad.
          En la actualidad el  Caribe es la zona del mundo donde conviven en reducido espacio geográfico una  mayor cantidad de modelos políticos distintos: el modelo socialista cubano; el  presidencialista periférico colonial al estilo de la República Dominicana; dos  modelos coloniales: el puertorriqueño con el Estado Libre Asociado y el francés  con los departamentos de ultramar; el parlamentario dominante en las islas  anglófonas, y el modelo haitiano. La región enfrenta desafíos como la grave  crisis económica, problemas ecológicos, desastres naturales, lavado de dinero,  tráfico de armas y de personas, entre otros flagelos que afectan la seguridad  regional y hacen vulnerable a la zona.
          Los pueblos del  Caribe contienen un sello cultural que identifica su huella en el mundo. Las  tradiciones y las costumbres salvaguardan la identidad que sostiene a cualquier  grupo social ante los cambios históricos. En ese patrimonio cultural inmaterial  se encuentran las expresiones que permanecen vivas, heredadas de los antepasados.  Espectáculos, gastronomía, artesanía, rituales y fiestas son algunos de los  responsables del apego y orgullo que las comunidades sienten generación tras  generación. El Caribe con su diversidad cultural y características únicas borra  las líneas geográficas y las diferencias entre sus países. 
  Chailloux (2013:5) apunta al  respecto:
  "(...) y esa  enorme multiplicidad de culturas, en oleadas sucesivas a lo largo de 4 siglos,  junto a los remanentes de los pueblos originarios, sentó las raíces del  poblamiento de las islas. Cada una de ellas trajo consigo, aportó y se nutrió  de la cultura que como patrimonio simbólico de los patrones de pensamiento y  conocimiento que se manifiestan, materialmente, en los objetos y bienes, y en  particular mediante la conducta social e ideológicamente, mediante la  comunicación simbólica y la formulación de la experiencia social en sistemas de  conocimientos, creencias y valores, haciendo de la sociedad del Caribe una de  las más notables cumbres de la experiencia humana. 5 
          Las costumbres  y tradiciones de la región del Caribe tienen como base cultural al aborigen y  la colonización española. Portugal, Holanda, Francia e Inglaterra con sus  intereses militares y comerciales le otorgaron al Caribe su impronta y un papel  estratégico. La presencia cultural del africano como fuerza de trabajo esclava  en la producción de azúcar, café, añil, algodón entre otros, forma parte de la  idiosincrasia del caribeño. Reflejado en el mestizaje biológico y cultural que  tiene el Caribe en el lenguaje, variedades raciales, prácticas religiosas,  cultura culinaria, literatura, música, danza, artesanía y fiestas populares.    
          Ariño (1992: 15) plantea: 
“(…) las fiestas populares como manifestaciones de la voluntad colectiva y de la experiencia de regocijo común exaltan a la comunidad celebrante y a los elementos constitutivos de su interés colectivo, como son los programas de actos. La fiesta es, entonces, un tipo específico de acción conjunta, es, ante todo, acción simbólico ritual, cíclica, recurrente y periódica. La fiesta se entiende como un producto social que expresa y refleja los valores, creencias e incluso intereses del grupo o grupos que la protagonizan. Es mucho más que el pretexto de la congregación, es más que la reunión espontánea de individuos alrededor del licor y el jolgorio. Es un evento en el que se manifiestan de manera excepcional los diferentes modos de la práctica colectiva. En ella se hacen aprehensibles las lógicas del poder, tanto en la transgresión y la disputa como en la cohesión y la reafirmación identitaria. Las fiestas populares son eventos privilegiados de la vida en comunidad, y son al mismo tiempo transitivas y reflexivas: la colectividad celebra algo y se celebra a sí misma”. 6
Freitas (2010: 20) reflexiona:  
          “(…)  Las fiestas populares son mecanismos de preservación de la identidad nacional y  estrategias de orden político que permitían la legitimación de ciertas  prácticas culturales que definen a una comunidad en pensamiento y acción.  Figuran como verdaderas celebraciones revitalizadoras de los elementos  fundamentales de la vida comunitaria” 7 
          Teniendo en cuenta los criterios de los  autores se considera que las fiestas populares están ligadas a las costumbres y  tradiciones de cada región. Son consideradas una forma de cohesión social y una  fotografía sociológica de las creencias. Sirven como punto de encuentro y a una  salida de la cotidianidad. Construyen escenarios socioculturales donde  predomina la vida cultural y social. Muestran el carácter alegre de los  habitantes así como, las prácticas culturales que se han conservado de una  generación a otra. 
          El estudio de las fiestas populares del Caribe  permite visualizar el carácter social y cultural de este fenómeno que se manifiesta  en una inmensa diversidad y riqueza de expresiones. Dependen fundamentalmente  de la pluralidad y heterogeneidad social, lingüística, étnica y cultural de los  pueblos y sociedades que los celebran y que, por tanto, son también  susceptibles de distintos tipos de análisis. En la actualidad las fiestas  populares del Caribe constituyen un rasgo cultural que necesita ser conocido,  analizado y difundido aún por y entre aquéllos que son sus actores. Las  investigaciones deben volver a los pueblos que las generan para ser posible un  espacio de reacción y reflexión ante las inevitables transformaciones en curso.
          Los países que forman parte del Caribe tienen  sus fiestas populares que son la mezcla de costumbres y tradiciones. A  continuación se muestran ejemplos de los mismos: 
          Barbados a mediados de febrero conmemora el aniversario  de la llegada de los primeros colonizadores con el Festival de Holetown. Historia  y folclore bajan con arte local, artesanía, conferencias históricas, desfiles  callejeros con la banda tuk, eventos deportivos y comida típica. 
          Costa Rica realiza la Fiesta de los diablitos de Boruca dura tres días y tres noches, del 31 de diciembre al 2 de enero. Es el aspecto  más representativo de la identidad y la cultura indígena Brunka, una procesión  que representa en forma de drama la lucha a muerte entre el invasor español y  la comunidad indígena. 
  Trinidad y Tobago con su Carnaval previo a la Cuaresma, que se celebra antes del  Miércoles de Ceniza entre febrero y marzo.   La fiesta de su tipo más antigua y mayor de toda la región caribeña. El  corazón de la festividad es la música, y es especialmente importante la soca:  ritmo afrocaribeño desarrollado en la isla de Trinidad derivado del calypso. El  mismo se interpreta con los steel pan (tambor de acero), considerado el único  instrumento musical acústico inventado en el siglo XX. 
  República Dominicana el Festival Cocoloemplean música  y danza de origen africano, intrigas, leyendas y personajes dramáticos tomados  de la literatura bíblica y medieval europea. El teatro bailado Cocolo actúa los  25 de diciembre y 6 de enero de cada año. Con el nombre de “Guloyas” se conoce  popularmente a los integrantes del Teatro Cocolo Danzante. Ellos exhiben  llamativos trajes repletos de colorines, espejitos y cascabeles, junto a un  majestuoso sombrero larguísimo, realizado con plumas de pavo real.  
  El Carnaval de Barranquillaen Colombiaa inicios de  febrero es la fiesta folclórica y cultural más importante de Colombia e incluye  todas las variedades culturales y de folclore de la costa caribeña colombiana.  Disfraces y danzas exclusivas de ese evento ha calado en el imaginario popular  de la región. 
          En México el Día  de los Muertos se celebra principalmente los días 1 y 2 de noviembre, aunque en  algunos lugares comienza desde el 31 de octubre. A lo largo de todo México se  colocan vistosos y coloridos altares. Se organizan festivales y certámenes  culturales y artísticos de dibujo, disfraces, fotografías o elaboración del  mejor pan de muertos.  
          Jamaica en el  primer trimestre del año, durante casi diez semanas celebra el Bacanal. Las comparsas ofrecen  clases gratuitas de baile para los ritmos de soca y calypso. Compiten las comparsas  musicales en música, baile y vestuario, para ser elegidas como la mejor banda  de carnaval en Kingston. 
          Puerto Rico celebra  el 3 de mayo la Fiesta de Cruz dedicada  a la Santa de Cruz. La distingue la música con instrumentos  como giro, maracas, congas y guitarra. Se hacen obsequios, dulces, refrescos y  la famosa agua Loja, hecha a base de jengibre.
  San Vicente y las Granadinas entre finales del mes de junio y principios de  julio realiza elCarnaval Vincy el más importante del país. Se  pintan los cuerpos, se hacen competiciones de calypso y steel bands (bandas de  tambores de acero), fiestas en las calles y desfiles. 
          Haití celebra la  fiesta Rara durante la cuaresma, desde el Miércoles de Ceniza hasta la Pascua. Tiene  fuertes lazos con el vudú. Las bandas recorren las calles realizando ceremonias  religiosas con instrumentos tradicionales como el tambor, las trompetas de  bamabú y tcha-tchá (un tipo de maraca).
  Venezuela celebra el 29 de junio la Parranda de San Pedro. Los  fieles entonan cantos populares, a media noche se celebra una misa y luego se  sacan las imágenes a la calle en procesión. Todos llevan la cara pintada de  negro con betún. 8
  Cuba durante todo el año realiza más de 370 fiestas tradicionales por toda la Isla, mezclados con las raíces hispanas, africanas y  de otras nacionalidades que contribuyeron a formar el ajiaco cultural cubano. Posee  siete fiestas populares donde se mezclan la cultura africana y caribeña. Entre  ellas se destacan: 
  La Fiesta del fuego en Santiago de Cuba, que empieza a principios del  mes de Julio. Tiene como objetivo rendir tributo a la música, comida, bailes y  tradiciones de los pueblos caribeños. Dura alrededor de 8 días y se caracteriza  por presentaciones de baile, obras teatrales, ciclos de cine y el coloquio  teórico. Evento propicio para relacionarse con los locales y vivenciar el mundo  cotidiano que experimentan.  
  Los Carnavales  en las provincias cubanas que se desarrollan a finales del mes de junio y todo  julio. Durante esta fecha los carnavales cubanos empiezan  en las 14 regiones del país con características similares sobresaliendo:  carrozas, comparsas, conga, música en vivo, ventas de accesorios para  decorar el cuerpo, equipos de juegos infantiles, comida y bebida típica. 
  La Parranda  de Remedios en Villa Clara se realiza del 16 al 26 diciembre. Esta celebración  es una de las más populares y atractivas en Cuba. Sus componentes más  importantes son las luces, bailes, colorido de los típicos trajes de la región  y la música tradicional caribeña. Se celebra en la provincia de Villa Clara en  San Juan de los Remedios. Inició como una tradición religiosa y ha ido  evolucionando con el paso de los años hasta convertirse actualmente en la  mezcla folclórica de religión y tradiciones.
          El Festival del Cubadisco, fiesta internacional qué reúne  a muchos cantantes, compositores y artistas de gran nivel en el mes de Mayo. Cuenta con una gala de premiación,  aunque también pueden disfrutarse de otras actividades relacionadas a este  evento. Distingue a esta celebración, la música en vivo por diferentes  exponentes de la música caribeña.  La exhibición, conciertos y premios llaman a los locales y extranjeros a  disfrutar del talento de los músicos cubanos principalmente. Predomina la  salsa, las baladas y la música tradicional cubana. Es sin duda una presentación  de talento con el indiscutible sello de cubanía. 
          Las Fiestas de los bandos Rojo y el Azul en Ciego de  Ávila a principio de Noviembre. Es una celebración que refleja la cultura del  campesino en el centro de la Isla. Predomina la música, diferentes tipos de  vestuarios típicos del campesino, competiciones regionales y bailes. Hay obras  teatrales y por supuesto lo que da vida a esta fiesta son sus coloridas   ropas con colores rojo y azul. Cantantes en vivo y competencias de  deporte son también comunes en esta celebración.  El canto guajiro, un género que refleja lo  más profundo de la cultura y costumbres de Cuba.
          El popular festival musical Benny Moré  en  Cienfuegos a finales de noviembre. Se celebra con el objetivo de alabar la vida  y obra del excelente músico Benny Moré, uno de los talentos cubanos más  rememorado por cantantes y escritores de Cuba. En esta festividad se pueden  apreciar comparsas, bailes folklóricos, ritmos caribeños, bandas locales y  mucho arte. 
          El Festival de  Teatro en La Habana a finales de octubre celebrado todos los años desde  1980 en teatros y plazas de la Habana. Dónde trasciende el arte de nacionales y  extranjeros. Espacio educativo para aprender sobre la historia, tradiciones y  creencias fundamentales de los locales. El objetivo principal del festival  es recordar el movimiento teatral y exponente que cambiaron el mundo. La fecha  de la celebración no siempre es la misma, participan países como Brasil,  Colombia, Australia, España y Alemania que realizan sus presentaciones  teatrales. 
          Carpentier (1981:1) afirma:
“(…) Ha sido descubierta América y de repente por una serie de circunstancias, resulta que nuestro Caribe se hace teatro de la primera simbiosis, del primer encuentro registrado en la historia entre tres razas que como tales no se habían encontrado nunca: la blanca de Europa, la india de América y la africana. Una simbiosis monumental de tres razas por su riqueza y sus posibilidades de aportaciones culturales que habrían de crear una civilización enteramente original”. 9
Morejón (1996:4) concluye:
“(…) en el Caribe se unen, se entrelazan y se yuxtaponen las más complejas influencias culturales latinas, africanas, anglosajonas y asiáticas en un espacio geográfico marcado por choques, encuentros y mutuas transculturaciones que dieron origen a un nuevo elemento identitario especifico para toda la región y donde las diferencias existentes, y otras que nos quieren imponer, como la barrera lingüística, no han sido impedimento para que la diversidad de culturas que forman nuestro universo cultural, conformen al mismo tiempo nuestra identidad”. 10
Conclusiones:
Bibliografía: