Aminta Lourdes Chunga Romero*
María Elena Moya Martínez**
Pontificia Universidad Católica, Sede Manabí, Ecuador
Email: Achunga5647@pucem.edu.ec
RESUMEN
    La presente investigación muestra algunos aspectos relacionados  con las competencias del cerebro en el aprendizaje de los estudiantes, ayudando  al docente a conocer como aprende el ser humano, ya que él es un órgano que se  encarga de todos las funciones y procesos de enseñanza-aprendizaje relacionados  con él pensamiento.
    En síntesis, el cerebro humano es un órgano diestro de habilidades  para pensar, crear imaginar, actuar, percibir, aprender, y otros procesos  cognitivos y cognoscitivos, para conocer más sobre el cerebro se utilizó como  método la revisión bibliográfica, en donde se analizan varios autores que han  estudiado el tema, con el objetivo de obtener un aprendizaje significativo y de  calidad, en el nivel elemental.  
  Palabras claves: Neurociencia, motivación,  aprendizaje, memoria.
ABSTRACT  & KEYWORDS
    The present research shows some aspects related to the brain  competences in the students' learning, helping the teacher to know how the  human being learns, since the brain is an organ that is in charge of all the  teaching-learning functions and processes related to him thinking.
    In short, the human brain is a skillful body of skills to think,  create imagine, act, perceive, learn, and other cognitive and cognitive  processes, to know more about the brain was used as a method bibliographical  review, which analyzes several authors who have studied the subject, with the  objective of obtaining meaningful and quality learning at the elementary level.
    Keywords: Neuroscience, motivation,  learning, memory.
Keywords: brain activity, meaningful learning, conceptual understanding, neuroeducation
Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato: 
Aminta Lourdes Chunga Romero y María Elena Moya Martínez (2019): “El cerebro y aprendizaje”, Revista Atlante: Cuadernos de Educación y Desarrollo (agosto 2019). En línea: 
https://www.eumed.net/rev/atlante/2019/08/cerebro-aprendizaje.html
//hdl.handle.net/20.500.11763/atlante1908cerebro-aprendizaje
Las neurociencias son importantes para los seres humanos a la hora  de aprender. En la actualidad gracias a los avances de la ciencia,  se puede conocer cómo se desarrolla y funciona  el cerebro a través de las conexiones neuronales que se van modificando a lo  largo de la vida como producto de aprendizaje y del ambiente.
  Siendo conocedores que el cerebro es un órgano complejo,  maravilloso y sorprendente de todo el cuerpo humano, el docente juega un papel fundamental  en el proceso de aprendizaje, primeramente el docente debe conocer cómo aprende  el ser humano, cuáles son las habilidades cognitivas y los procesos de  aprendizaje que se deben realizar para que puedan adquirir ciertos  conocimientos que les perdure para toda la vida.
  A través de esta investigación se ha generado interés y motivación  en conocer nuevas estrategias que permiten a los estudiantes aprender (Mora, 2013),  refiere que solo se puede aprender aquello que se ama, por esta razón el docente  debe buscar estrategias con temas que despierten interés en el estudiante y  puedan adquirir nuevos conocimientos para una mejor enseñanza-aprendizaje.
  2. METODOLOGIA
  En esta investigación se aplicó el método  inductivo-deductivo, que permitió conocer sobre la importancia del cerebro en  el proceso de enseñanza-aprendizaje, el estudio es de carácter cuantitativo,  descriptivo-comparativo ya que recolectó información a través de fuentes bibliográficas  de diferentes autores, donde se pudo llegar a las conclusiones sobre la  importancia que tiene el docente de comprender cómo funciona el cerebro de los  estudiantes de nivel elemental y las huellas que dejan los aprendizajes que  adquieren.
El cerebro es un órgano complejo e importante en el desarrollo del  ser humano, a pesar de su poco peso, posee millones de neuronas que hace que  funcionen de forma eficientes coordinando el resto del cuerpo, a medida que va  creciendo sus funciones van aumentando, adquiriendo nuevos conocimientos y  capacidades para aprender.
  Es un órgano biológico y social que se encarga de todas las  funciones y procesos relacionados con el pensamiento, la intuición, la imaginación,  la lúdica, la acción, la escritura, la emoción, la conciencia e  infinidad de procesos que gracias a la  plasticidad entendida como la  capacidad  que posee el cerebro para cambiar respondiendo a las modificaciones del  entorno, puede modificar las conexiones entre neuronas, la red de capilares que  les proporcionan oxígeno, nutrientes y producir nuevas neuronas durante la vida  de la persona y no solamente en la adolescencia o los primeros años de adultez  como se creía anteriormente (Velásquez et al, 2009).
  Cabe mencionar que el cerebro ayuda a desarrollar las diversas  formas de inteligencias, a través de la interacción de la neurociencia permitiendo  un eficaz desarrollo en el ámbito educativo. 
  Dentro de las neurociencias en la educación y los procesos de  enseñanza aprendizaje, existen diversas formas en la que los seres vivos se  adaptan rápidamente al entorno en el que viven o se desenvuelven (Campos, 2014),  plantea que cuando la neurociencia y la educación se acercan, una de las metas  a ser alcanzada es conocer de manera más amplia, pero refinada, la relación  cerebro-aprendizaje, de tal forma que permita a un educador saber cómo es el  cerebro, cómo aprende, procesa, registra, conserva y evoca una información.  Esta sería la plataforma de despegue para que a partir de este conocimiento se  pueda mejorar las propuestas de enseñanza y las experiencias de aprendizaje,  plasmándolas de forma dinámica y motivadora en la planificación de actividades  que tengan mayor sentido y significado para los estudiantes.
  Resulta necesario tener presente que el aprendizaje está  relacionado con la edad del individuo, la motivación, inteligencia y estímulos  que tiene que ver la capacidad que tienen los seres humanos para aprender de  una manera rápida o lenta (Blakemore, et al, 2007), plantea que el conocimiento  de cómo aprende el cerebro podría tener y tendrá, impacto en la educación. El comprender  los mecanismos cerebrales brinda conocimientos sobre el aprendizaje y la  memoria, también fundamenta los efectos de la genética, el entorno, la emoción  y la edad en el aprendizaje, pudiendo transformar las estrategias educativas para  idear programas que optimicen el aprendizaje de personas de todas las edades y  con sus más diversas necesidades.
  Dentro del aprendizaje se puede indicar que sería factible una enseñanza  que ayude a desarrollar el cerebro mediante técnicas que permitan explorar las  diversas capacidades del individuo en el proceso cognitivo y mediante la  enseñanza-aprendizaje, permitiendo al docente implementar un ambiente de  trabajo que ayude a desarrollar los procesos cognitivos en sus estudiantes.
  La enseñanza y la formación en la niñez ofrecen estímulos  intelectuales necesarios para el cerebro y su desarrollo, ya que permiten el  despliegue de las capacidades cognitivas y hacen más viables los aprendizajes,  precisamente entre los tres y los diez años el cerebro infantil es un buscador  incesante de estímulos que lo alimentan y que el mundo ofrece (De La Barrera et  al, 2009).
  El cerebro siempre está aprendiendo, siendo esta su función básica,  por ello a la hora de enseñar se deben buscar técnicas que permitan a los  estudiantes desarrollar su parte visual apoyándose en imágenes, videos, mapas  conceptuales, entre otros que estimulen el aprendizaje.
 Lo que el cerebro humano  hace mejor es aprender, es modificado por el aprendizaje debido a que éste con  cada estimulación y experiencia se conectan; utilizarlo de forma no habitual  estimula la formación de conexiones neuronales. Al cerebro lo estimulan los  cambios, lo desconocido excita las redes neuronales, por esa razón los  ambientes fluidos y variados despiertan la curiosidad favoreciendo el  aprendizaje. Para el desarrollo cerebral es necesaria la riqueza de estímulos y  emociones positivas (Velásquez et al, 2009).
  Existen muchos factores que favorecen el aprendizaje como es la  memoria visual, ya que una imagen vale más que mil palabras, permitiéndoles a  los estudiantes desarrollar sus destrezas y habilidades, además el cerebro  necesita nuevos estímulos para que se active la corteza cerebral y el  estudiante sea más participativo. 
  3.3. El  aprendizaje 
  Dentro del aprendizaje, el estímulo, motivación, atención y la  memoria son necesarias en el proceso de la enseñanza-aprendizaje (Guillén, 2012),  plantea que el aprendizaje es un proceso activo resultado de la experiencia que  conlleva cambios en el cerebro. Cuanto más se trabaja un contenido, mejor  permanece en la memoria ya que este tiene la capacidad de adquirir y almacenar  información muy variada.
  Nuestra identidad personal viene determinada por lo que se aprende  y se recuerda, por tanto, la memoria constituye un recurso fundamental del ser  humano que los hace inteligentes y permite compartir y transmitir la cultura.
  El aprendizaje y la memoria son mecanismos que se activan por estímulos  y pueden darse en el ambiente modificando la conducta en el ser humano, además  la memoria es donde se almacena y se guardan diferentes archivos es decir que la  memoria tiene la capacidad de adquirir, almacenar y recuperar la información, sin  memoria no seriamos capaz de percibir, aprender o pesar, además no se podría  expresar nuestras ideas.
  Cabe recalcar que sin memoria sería imposible el aprendizaje, ya  que esta es una destreza mental que permite recordar momentos del pasado. Todas  estas situaciones de la memoria nos indica que debemos aprender a memorizar (Villalobos,  2015), dice que aprender y memorizar es cambiar, crear conexiones y estructuras  en el cerebro y cuando dichos cambios ocurren en los circuitos neuronales se  concluye en la modificación de una persona para siempre.
  El aprendizaje y la memoria se dan según los estímulos que se presentan  en el ambiente, activando las diferentes regiones cerebrales y a través de  estas tres fases se puede recordar momentos especiales, eventos y hechos que  tenemos almacenados en la memoria (Godoy, 2010).
  3.4. La motivación
  La motivación es una de las partes importante en el aprendizaje,  permite incentivar a los estudiantes durante el desarrollo de un proceso,  además es aconsejable que exista una motivación antes, durante y después de  obtener un nuevo conocimiento, ya que esto permitirá obtener la atención  requerida.
  La motivación es aquella actitud interna y positiva frente al  nuevo aprendizaje, es lo que mueve al sujeto a aprender, es por tanto un  proceso interno, es indudable que en este proceso en que el cerebro humano  adquiere nuevos aprendizajes, la motivación juega un rol fundamental. Pero,  además de una actitud favorable para aprender, el sujeto que aprende debe  disponer, según los estudios de Ausubel, de las estructuras cognitivas  necesarias para relacionar los conocimientos previos con los nuevos  aprendizajes (Carrillo et al, 2009).
  De lo dicho anteriormente se puede plantear que tanto la  motivación como la atención son de importancia en el aprendizaje, si hubiera falta  de atención y de motivación esto puede afectar el proceso de enseñanza  aprendizaje.
  3.5. La atención
  Es uno de los factores que tiene relación con la conducta e incide  en el rendimiento escolar y a su vez necesita de concentración para su buen  desenvolvimiento en el aprendizaje (Ojeda, 2014), piensa que la atención es el  proceso multimodal en el que están involucradas diversas estructuras  cerebrales. 
  Atender puede implicar diversas funciones de acuerdo con los  objetivos de la tarea, en algunas ocasiones la atención debe centrarse en la  selección de unos estímulos, al tiempo que se inhiben otros, en otras las  tareas exigen dividir la atención entre una diversidad de informaciones, en  múltiples actividades especialmente escolares, los objetivos tienen que ver con  el mantenimiento de la atención. Estas funciones evidencian un rol que cumple  la atención en la selección y codificación de la nueva información y a la vez  en los procesos de enseñanza- aprendizaje.
  El estudiante requiere tener suficiente atención durante el  proceso de aprendizaje, pues es ahí donde se activan las áreas cerebrales y el  alumno aprende, caso contrario tendría muchos problemas para lograr mejores  resultados de aprendizajes.
El análisis de los resultados de los diferentes autores, ha permitido comprender que las neurociencias y la educación están ligadas al proceso de enseñanza-aprendizaje, permitiendo a los docentes conocer cómo funciona y aprende el cerebro; además se debe tener en cuenta que se aprende a través de los estímulos novedosos como imágenes, videos que ayuden en la enseñanza, logrando aplicar estrategias innovadoras en el aula de clase para que despierte curiosidad en los estudiantes, de tal manera que ellos mismos gestiones y exploren sus propios conocimientos.
Así mismo, se puede indicar que el aprendizaje es el proceso de adquirir conocimientos de distintas formas lenta o rápida a través de los estímulos que se dan en el ambiente y este aprendizaje que se guarda en la memoria, la recepta, almacena y recuperar dicha información en el momento que se desee. Es de importancia que a los estudiantes se motiven a través de diferentes estímulos ya sean estos internos o externos. Los estímulos inciden de una marea directa en la adquisición de conocimientos y por lo que fortalece la consecución de un aprendizaje significativo.
También se pudo analizar que la atención está relacionada con la conducta ya que si el estudiante, no muestra interés en aprender e ignora los estímulos será difícil concentrarse en el aprendizaje, además es meritorio señalar que los estudiantes presten la debida atención para llegar a un buen proceso de memoria, si esto no se da el estudiante debe ser motivado.
Se ha determinado que la atención y la memoria dentro del proceso enseñanza-aprendizaje van generando cambios en el cerebro, que deben ser aprovechados al máximo para desarrollar las destrezas y habilidades en los estudiantes, permitiendo llevar a mantener una visión más amplia de cómo se desarrolla y aprende el cerebro, cómo reacciona a los estímulos proponiendo que dentro del aula se deben crearse ambientes adecuados para que los estudiantes muestren más interés por aprender de manera fácil e innovadora.
Blakemore,  S. & Frit, U. (2007). Cómo aprende el cerebro. https://books.google.com.ec/books?id=2FwxI2BTf9MC&printsec=frontcover&dq=COMO+APRENDE+EL+CEREBRO+LIBRO&hl.
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  De  La Barrera, M. & Donolo, D. (2009). Neurociencias y su importancia en  contextos de aprendizaje. Revista Digital Universitaria, 10 (4), 1-18. http://www.revista.unam.mx/vol.10/num4/art20/art20.pdf
  Godoy,  J. (2010). La memoria II. Fases de la memoria y tipos de memoria. http://kinesiologiaholistica.com/blog/2010/11/23/la-memoria-ii-fases-de-la-memoria-y-tipos-de-memoria/
  Guillén,  J. (2012). La memoria: un recurso fundamental. https://escuelaconcerebro.wordpress.com/2012/07/13/la-memoria-un-recurso-fundamental-2/
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  Villalobos,  J. (2013). Neuroeducación. Madrid: Alianza editorial. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=6170873