Revista: Atlante. Cuadernos de Educación y Desarrollo
ISSN: 1989-4155


LA PREPARACIÓN DEL MAESTRO EN ORIENTACIÓN EDUCATIVA A ESCOLARES CON RETRASO MENTAL

Autores e infomación del artículo

Willian Ortega Arada*

Blanca Nieves Rivas Almaguer**

Universidad de Las Tunas, Cuba

E-mail: williamoa@ult.edu.cu


RESUMEN
La importancia de la labor de  orientación educativa que puede y debe desarrollar el maestro para contribuir al desarrollo integral de la personalidad de los escolares con retraso mental y consecuentemente elevar su calidad de vida, necesita, ante todo, de una adecuada preparación, que tiene su fuente principal en el trabajo metodológico que se realiza en cada uno de los niveles de organización de la escuela. Constituyendo una problemática de actualidad en el campo de la Pedagogía Especial, la insuficiente preparación de los maestros en este sentido, dadas  las continuas demandas de orientación educativa de estos escolares en correspondencia a sus necesidades y potencialidades, como elemento determinante para lograr la preparación para la vida socio laboral de estos escolares. En el presente trabajo se presenta una sistematización teórica relacionada con el trabajo metodológico para los maestros de la Educación Especial y la orientación educativa como contenido de este proceso, los que constituyen fundamentos de valor que justifican la necesidad de esta investigación.
PALABRAS CLAVES: orientación educativa, trabajo metodológico, educación especial, labor educativa, retraso mental.

SUMMARY
The importance of the work of educational guidance that can and should be developed by the teacher to contribute to the integral development of the personality of school children with mental retardation and consequently raise their quality of life, needs, above all, adequate preparation, which has its main source in the methodological work that is carried out in each one of the levels of organization of the school. Being a current issue in the field of Special Pedagogy, the insufficient preparation of teachers in this sense, given the continuous demands of educational guidance of these students in correspondence to their needs and potential, as a determining element to achieve the preparation for the life partner of these school children. In the present work a theoretical systematization related to the methodological work for the teachers of the Special Education and the educational orientation as a content of this process are presented, which constitute value bases that justify the need of this investigation.

KEY WORDS: educational orientation, methodological work, special education, educational work, mental retardation.

Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato:

Willian Ortega Arada y Blanca Nieves Rivas Almaguer (2019): “La preparación del maestro en orientación educativa a escolares con retraso mental”, Revista Atlante: Cuadernos de Educación y Desarrollo (enero 2019). En línea:
https://www.eumed.net/rev/atlante/2019/01/preparacion-maestro-orientacion.html
//hdl.handle.net/20.500.11763/atlante1901preparacion-maestro-orientacion


Fundamentos teóricos del trabajo metodológico en la orientación educativa a escolares con retraso mental
En Cuba se ha gestado una verdadera revolución educacional motivada en las aspiraciones de equidad y justicia social que presupone una verdadera igualdad de oportunidades, donde la inclusión social de los menos favorecidos ha cobrado especial significación.
En este sentido es de vital importancia el rol del maestro, el  cual desde su humana profesión está convocado a materializar el fin de la Educación Especial que se concreta en lograr el máximo desarrollo integral de las personas con necesidades educativas especiales, poniendo en práctica en cualquier contexto, recursos de apoyos educativos, especializados y complementarios, que les permitan enfrentar con independencia su inclusión social.
Al realizar valoraciones sobre el rol del maestro de la Educación Especial para alcanzar este objetivo R. López expresó: “… en todo proyecto pedagógico, el alma es el maestro, él es el artífice por excelencia del desarrollo del trabajo con los alumnos, y de labrar el alma humana, que es de lo más importante de la obra educacional...” (R. López, 2000, p. 45).
En estas ideas se connota la necesidad de contar con maestros capaces de realizar una certera orientación educativa a escolares con retraso mental, teniendo en cuenta las características especiales que se presentan en su desarrollo psicológico, en aras de prepararlos para enfrentar las exigencias de la vida socio-laboral.
En este humano empeño de formar al hombre para la vida el maestro acompaña al escolar por las diferentes etapas de su ciclo vital, no solo transmitiendo los conocimientos del currículo de las materias que cada grado tiene diseñadas, sino también como el responsable de orientarlo de forma tal que este logre en lo adelante ser capaz de tomar decisiones que le favorezcan en su vida futura. 
En reflexiones que realiza R. Bell en temas relacionados con el rol del maestro de la Educación Especial plantea:
"Para poder cumplir los objetivos de la Educación Especial, los educadores deben estar bien informados y abiertos a las nuevas corrientes con una disposición clara de someter a prueba constante la eficacia de los métodos que aplican en las clases, y estar dispuestos a evaluar los factores que, fuera de la clase son los más apropiados para facilitar la madurez de sus escolares y su adaptación a la vida." (R. Bell, 2001 p. 63)
Por otra parte, es importante destacar que en los lineamientos que trazan la política económica y social del Partido y la Revolución se señala la idea de:
“...continuar avanzando en la elevación de la calidad y el rigor del proceso docente-educativo, así como en el fortalecimiento del profesor frente al alumno, incrementar la eficiencia del ciclo escolar, jerarquizar la superación permanente, el enaltecimiento y atención al personal docente,...” (PCC, 2017 p. 27)
En este sentido, reviste vital importancia el trabajo metodológico, que encuentra sus bases legales en la Resolución Ministerial 200 del 2014. Es el trabajo metodológico el proceso que garantiza la preparación de los maestros y el aprovechamiento de las potencialidades educativas que permiten fortalecerlos. Para lograr ese propósito resulta imprescindible la preparación, fortaleciendo tanto la de los maestros que trabajan directamente con los escolares que presentan retraso mental, como la de los restantes que intervienen en su formación y desarrollo.
El trabajo metodológico en la Educación Especial debe tener como punto de partida la responsabilidad de estos centros en la formación integral de la personalidad de escolares con necesidades educativas especiales y como consecuencia, todas las actividades que se realizan allí deben estar caracterizadas por su intencionalidad educativa.
La labor educativa en la escuela ha de entenderse, según afirma B. Collazo como:
“El conjunto de todas las actividades, sin excepción, que en ella se realizan, tanto docentes como de continuidad de este proceso, dirigidas a alcanzar los objetivos educativos que, de modo integral, confluyen en la formación multilateral y armónica de la personalidad” (B. Collazo 2011, p. 37)
En la labor educativa un elemento primordial, y que se convierte en su primer momento, es el de preparar a los docentes en los métodos  y en las técnicas para caracterizar y prestar la debida atención tanto a los escolares como a su núcleo familiar.
Consecuentemente, la preparación de los maestros de la Educación Especial, desde el trabajo metodológico, para el desarrollo de la orientación educativa a escolares que presentan retraso mental constituye una necesidad; acentuada por el encargo de conducir a sus escolares, hacia el logro del fin de la Educación Especial, el cual declaramos en párrafos anteriores.
Sobre la base de estos elementos el trabajo metodológico de la Educación Especial adquiere características que lo distinguen del que se realiza en el resto de las educaciones. Siendo una necesidad preparar a los maestros no solo en el dominio de los contenidos y su tratamiento metodológico, sino en cómo desarrollar la orientación educativa, que les proporcione una guía a los escolares con retraso mental para lo que ellos deben realizar en su vida social y laboral.
Si bien en la Educación Especial para escolares con retraso mental se ha perfeccionado el trabajo metodológico, todavía en este proceso se hiperbolizan contenidos que preparan al maestro para dirigir el proceso de enseñanza-aprendizaje, esto que se afirma encuentra su sustento en la observación sistemática y la experiencia de trabajo en la escuela especial para escolares con retraso mental, lo cual nos ha permitido constatar las siguientes manifestaciones de insuficiencias:

  • Una parte significativa de los maestros dirigen la orientación educativa sin tener en cuenta las características psicológicas de los escolares con retraso mental.
  • Empleo predominante, por parte de los maestros, de métodos educativos autoritarios que originan conflictos, afectaciones de las relaciones interpersonales, y no contribuyen a la estimulación del desarrollo de la personalidad de los escolares con retraso mental.
  • En el trabajo metodológico no se jerarquizan contenidos relacionados con la orientación educativa a escolares con retraso mental.

Por tanto, queda reflejada la necesidad de perfeccionar  el proceso de preparación de los maestros para la orientación educativa en aras de lograr el desarrollo de la personalidad de los escolares con retraso mental, aún cuando se han logrado avances significativos en esta dirección, persisten dificultades en el trabajo metodológico de los maestros, que no le aporta la preparación necesaria para cumplir con la función relacionada con la orientación educativa, en correspondencia con las necesidades y potencialidades de los escolares con este diagnóstico.
En relación con el  perfeccionamiento del trabajo metodológico diversos son los autores que han abordado esta temática en los diferentes niveles de educación, destacándose en este sentido: Y. Peña (2013) y O. Oquendo (2015)  los que aportan un conjunto de concepciones, metodologías, estrategias y acciones encaminadas a organizar el trabajo metodológico en las instituciones educativas de los diferentes niveles, sin tener en cuenta las particularidades de la escuela especial. Estos aportes están dirigidos esencialmente a garantizar la preparación del maestro de la educación regular para que cumpla con las funciones y tareas que la sociedad exige.
Por otra parte, en la comunidad científica, el tema de la orientación educativa ha sido abordado por importantes autores, entre los que se destacan: B. Collazo (2006), P. Sánchez (2017), entre otros; los que dan elementos consustanciales que denotan la importancia del tema en la formación integral de la personalidad de  los escolares.
Estos autores también hacen referencia a la función orientadora que le corresponde al maestro como profesional de la educación de llevar a cabo esta tarea, no solo a través del proceso docente educativo, sino en todo su accionar con los escolares en cualquier contexto. Sin embargo en la literatura consultada no se encontraron precedentes en cuanto a la preparación de los maestros de la Educación Especial en orientación educativa a escolares con retraso mental.
A pesar de las numerosas investigaciones que han tenido como objeto o campo de investigación el trabajo metodológico y la orientación educativa, todavía constituye un reclamo para la ciencia argumentar propuestas que respondan a la singularidad del trabajo de orientación educativa que realizan los maestros que interactúan con escolares con retraso mental, en lo que se presentan insuficiencias particularmente en la preparación de este maestro para desarrollar con éxito esta función, que solo pueden ser solucionadas por la vía del trabajo metodológico.
El maestro de la Educación Especial tiene la responsabilidad de orientar desde el punto de vista educativo a sus escolares con retraso mental, para ello debe atender la diversidad en la que se manifiesta el desarrollo de los escolares que presentan este diagnóstico, abogando por personalizar la educación, adaptándola a las necesidades educativas de los escolares, precisando un profundo conocimiento de todos y cada uno, lo cual exige la preparación de los maestros.
En correspondencia con estos propósitos, uno de los cambios más trascendentales que se opera en la Educación Especial cubana consiste en que todos los maestros se conviertan en educadores competentes, capaces de incidir positivamente en la formación de la personalidad de los escolares que presentan necesidades educativas especiales. Aquí el trabajo metodológico se perfila como una vía eficaz para contribuir a la preparación de los maestros, para el desempeño de las funciones que le corresponden en el proceso de formación de la personalidad de los escolares con esta discapacidad.
Una de las funciones que este maestro debe realizar y para la cual tienen que tener una preparación es la de orientación educativa, partiendo de la evidente relación entre educación y orientación puede considerarse como uno de los elementos esenciales en el proceso educativo,
S. Recarey (2011) al realizar algunas valoraciones de los estudios de M. L. Rodríguez (1995) precisó que el maestro es el genuino orientador, y por ende, en el curriculum escolar el intermediario entre la labor educativa y el sujeto de la orientación. Más adelante continúa afirmando que es el maestro el profesional adecuado para poner en marcha los aspectos operativos de los programas orientadores.
Sin embargo, algunos autores enfatizan que el maestro para cumplir con la función orientadora mediante la ejecución de acciones de orientación y para establecer las relaciones pertinentes con las funciones docente – metodológica e investigativa, necesita que se le prepare científicamente para ello. Esto es consecuente con la función teleológica de la filosofía de la educación, desde donde se defiende la idea de la preparación del maestro a lo largo de la vida profesional. Al respecto M.  A. Calviño señaló:
“…el carácter profesional de las relaciones de ayuda supone también que se trata de una actividad sujeta a un adiestramiento y preparación especial, y por tanto solo deben realizarla los que posean dicho adiestramiento  (...) lo que no puede dejar de ser punto de partida es la consideración (...) de la exigencia a un sistema de conocimientos y habilidades científicamente sustentados que se adquieren, preferentemente en actividades especiales de formación”. (M.  A. Calviño 2000, p. 16-17)  
De ahí la relevancia de preparar a los maestros que trabajan con escolares con retraso mental para el desarrollo de la labor orientadora, desde el  trabajo metodológico que se realiza en el contexto escolar.
La preparación de los maestros, según lo establecido por la Resolución Ministerial 200 del 2014 por el Ministerio de Educación (MINED), debe direccionarse desde el trabajo metodológico al ser este:
“…el sistema de actividades que de forma permanente y sistemática se diseña y ejecuta (…) para elevar la preparación político-ideológica, pedagógico-metodológica y científica-técnica de los docentes (…)  a fin de ponerlos en condiciones de dirigir  eficientemente  el proceso  educativo (…) mediante el perfeccionamiento constante de su labor profesional” (Resolución Ministerial 200 del 2014, p. 1)
El sistema educativo cubano tiene en el trabajo metodológico la vía más efectiva para lograr la preparación científica y metodológica de los colectivos pedagógicos, constituye una modalidad de superación para elevar la preparación de los cuadros y docentes, proporcionándoles conocimientos, hábitos, habilidades y valores, y con ello elevar los niveles de calidad de la formación integral de los escolares.
La orientación educativa, debe convertirse en un contenido del trabajo metodológico, por la importancia que tienen al promover en los escolares con retraso mental la búsqueda de posibles alternativas de respuestas  a las contradicciones y conflictos que enfrentan, de aquí que esta tenga un carácter de esencia en todo el proceso educativo.
En el proceso de orientación educativa se identifican problemáticas inherentes al escolar, al grupo, la institución, la comunidad y la sociedad,  que se vinculan con la falta de información, dificultades para tomar decisiones, deficiencias para el manejo de conflictos, así como para encauzar los recursos personales a fin de alcanzar sus objetivos, para el cual el maestro requiere una preparación.
En este sentido, la orientación educativa, es analizada como un contenido del trabajo metodológico. Siendo este último un  proceso de preparación que promueve los recursos personales y sociales de los maestros, permitiendo organizar o reestructurar  el tratamiento a dicho contenido sobre la base de las necesidades y potencialidades de preparación del maestro.
En este proceso se promueven la autoreflexión y la autovaloración, de las mejores prácticas pedagógicas para organizar y dirigir la orientación educativa de los escolares con retraso mental, que le permiten al maestro alcanzar niveles cualitativamente superiores en la formación de la personalidad de los escolares que presentan características especiales en su desarrollo.
Fundamentos teóricos de la orientación educativa a escolares con retraso mental
En el presente artículo se plantea la necesidad de considerar la orientación educativa como contenido del trabajo metodológico, por lo que la orientación educativa se convierte en una categoría que cobra significación, este concepto ha sido definido por varios autores, no obstante consideramos oportuno connotar el criterio de B. Collazo quien la define como:
“(…) un proceso de ayuda que realiza un orientador a un sujeto o un grupo de crecimiento para que aprendan a conocerse a sí mismos y a su medio, descubriendo sus potencialidades, de manera que puedan elegir, decidir y hacer proyectos de vida responsables.” (B. Collazo 2011, p.7)
Por otro lado, C. Vélaz, refiere que la orientación educativa es:
“Un conjunto de conocimientos, metodologías y principios teóricos que fundamentan la planificación, diseño, aplicación y evaluación de la intervención psicopedagógica preventiva, comprensiva, sistémica y continuada que se dirige a las personas, las instituciones y el contexto comunitario, con el objetivo de facilitar y promover el desarrollo integral de los sujetos a lo largo de las distintas etapas evolutivas de su vida, con la implicación de los diferentes agentes educativos y sociales”. (C. Vélaz 2002, p. 37 y 38)
Esta última definición reconoce tres principios básicos que están en consecuencia con la educación cubana: el principio de prevención, del desarrollo y de intervención social.
Relacionado con la orientación educativa en la literatura científica se han argumentado diferentes modelos, donde se destacan entre los más representativos: el modelo de la Orientación dentro del sistema escolar, el de la Orientación en el aula y el de la Orientación dirigida a los tutores, según reconoce M. L. Rodríguez (1995), quien señala las características comunes a estos modelos, las cuales se mencionan a continuación:

  • Este tipo de orientación centra el protagonismo en el profesor o tutor, incitando a que se cree, en el aula, un clima de aceptación y apertura que permita las funciones de guía.
  • Este clima deberá facilitar y velar por potenciar al máximo las actividades instructivas y didácticas como las de ayuda personal.
  • El profesor irá adaptando el currículo a las necesidades específicas del alumnado para un desenvolvimiento integral de los dominios afectivo y cognitivo.
  • La planificación curricular seleccionará aquellos contenidos programáticos que favorezcan el aprendizaje psicológico, social e intelectual.
  • El maestro desarrollará una triple función, ya sea como instructor o docente, ya sea como consejero personal, ya sea como facilitador del desarrollo curricular.

Es por lo anteriormente expresado que coincidimos con el criterio S. Recarey (2011) al considerar la importancia y urgencia de preparar a los maestros de la Educación Especial  para que cumplan en mejores condiciones con la función  orientadora, teniendo en cuenta las particularidades del desarrollo de la personalidad del escolar con retraso mental.
Resulta atinado lo que dijera Martí en su época: “…la escuela ha de preparar al hombre para la vida”. La escuela prepara al hombre para la vida, en todas las épocas, su función orientadora se ha destacado por el hecho de que en ella se ha de preparar al hombre para aprender a vivir y a convivir en el modelo social para el cual se forma, en la actualidad esto se relaciona cada vez más con los objetivos de eficiencia, calidad y efectividad de la educación.
En estas ideas queda explícito que el proceso de orientación, en íntimo vínculo con lo instructivo y lo educativo conforman una triada dialéctica, en la cual lo orientador dinamiza la contradicción fundamental entre los otros dos aspectos señalados.
Por último, consideramos que la orientación educativa es una función integrada y esencial dentro del proceso pedagógico de toda escuela, que adquiere matices más complejos cuando se trata de escolares con retraso mental, de ahí la importancia de intencionar desde el trabajo metodológico acciones de preparación al maestro que lo ponga en condiciones de organizar y dirigir la labor de orientación educativa a esta diversidad de escolares de manera consciente, reflexiva, vivencial y planificada.
Este planteamiento es consecuente con el criterio de C. Suárez cuando reflexiona sobre el valor de la orientación educativa en la solución de los problemas de la escuela, así como por la posibilidad que brinda de integrar las disciplinas de las Ciencias de la Educación y articular las metodologías aportadas por cada una de ellas, por tanto, este aspecto constituye un aspecto fundamental en la preparación del maestro y del resto de los actores educativos.
CONCLUSIONES
El estudio referativo realizado evidencia que aún es insuficiente el trabajo metodológico que se organiza en las escuelas especiales para escolares con retraso mental, en el que no se jerarquiza el tratamiento a contenidos relacionados con las exigencias de la orientación educativa a escolares con esta desviación en su desarrollo, lo que limita la preparación de este maestro para cumplir con eficiencia dicha  función.
REFERENCIAS
Álvarez, J. (2011). Talleres metodológicos para favorecer la capacitación de los directores en el desarrollo del trabajo docente – metodológico en la Educación Especial. Universidad de Ciencias Pedagógicas. Las Tunas. Cuba. (Tesis de maestría)
Bell, R. (2001). Binomios en la Educación Especial: Del discurso a la práctica pedagógica. En Revista Educación no. 93. Ciudad de la Habana. Cuba.
Calviño, M.A. (2000). Orientación psicológica. Esquema referencial de alternativa múltiple, La Habana: Editorial Científico-Técnica.
Collazo, B. (2006). La orientación en la actividad pedagógica. La Habana: Pueblo y Educación. Cuba.
_______. (2011). Modelo de Tutoría Integral para la continuidad de estudios universitarios en las Sedes Municipales. En Orientación educativa. La Habana: Pueblo y Educación. Cuba.
López, R. (2000). Educación de alumnos con necesidades educativas especiales. Fundamentos y actualidad. Ciudad de La Habana: Pueblo y Educación. Cuba.
MINED. (2014). Reglamento del trabajo metodológico del Ministerio de Educación. (RM 200/2014).
Oquendo, O. (2015). La preparación del profesional de la educación para la introducción de resultados científicos-pedagógicos en el proceso docente educativo. Universidad de Las Tunas. Cuba. (Tesis doctoral inédita). 
PCC. (2017). Lineamientos que trazan la Política Económica y Social del Partido y la Revolución.
Peña, Y.(2013). La función orientadora en la formación inicial del profesional de la educación. Ponencia al Foro de integración nacional de las ciencias técnicas “FORINTUNAS 2013”.Universidad de Ciencias Pedagógicas Pepito Tey. Las Tunas. Cuba.
Recarey, S. (2011). Función orientadora del profesional de la educación. En Orientación educativa. La Habana: Pueblo y Educación. Cuba.
Sánchez,  P. (2017). La orientación educativa en la universidad desde la perspectiva de los profesores. En sitio http://rus.ucf.edu.cu/index.php/rus.
Vélaz de Medrano, C. (2002). Orientación e intervención psicopedagógica. Conceptos, modelos, programas y evaluaciones. En Orientación educativa. La Habana: Pueblo y Educación. Cuba.

*Licenciado en Psicología. Se desempeña como Psicopedagogo de la Escuela Especial “28 de Enero”, del municipio Majibacoa, provincia de Las Tunas. Cuba. Investiga en la temática de la atención educativa a escolares con retraso mental.
**Doctora en Ciencias Pedagógicas. Profesora de la disciplina Formación Pedagógica General de las carreras de Educación Especial y Logopedia de la Universidad de Las Tunas, Cuba. Posee varios resultados científicos relacionados con la superación de los docentes para el trabajo educativo, correctivo-compensatorio de los escolares con Necesidades Educativas Especiales.

Recibido: 19/10/2018 Aceptado: 31/01/2019 Publicado: Enero de 2019

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