INVESTIGACIONES EN CIENCIAS JURÍDICAS: DESAFÍOS ACTUALES DEL DERECHO

INVESTIGACIONES EN CIENCIAS JURÍDICAS: DESAFÍOS ACTUALES DEL DERECHO

Ángel Valencia Sáiz (Coord.)

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INAUGURACIÓN DEL I CONGRESO NACIONAL DE JÓVENES INVESTIGADORES EN CIENCIAS JURÍDICAS

María Valpuesta Fernández
Vicerrectora de Investigación y Transferencia de la UMA

Ilustrísimo Sr. Decano,
Querido Doctor Valencia
Queridos profesores/as, alumnos/as
Jóvenes congresistas

Quisiera, en primer lugar, transmitiros a todos el saludo especial y los mejores deseos de la Rectora de la Universidad.

Junto a ello, quiero expresaros mi satisfacción por encontrarme en la Facultad de Derecho. Entre todos ustedes. Compartiendo este acto inaugural del Primer Congreso Nacional de Jóvenes Investigadores en Ciencias Jurídicas.

Mi felicitación para quien lo ha hecho posible.

Mi satisfacción como Vicerrectora de Investigación y Transferencia pero también mi satisfacción personal.

Hay unas claves familiares que ayudarán a entenderla y valorarla. Provengo de familia de jurista, en mi casa términos como recursos, apelaciones, oficiales, procuradores, señorías, se escuchaban todos los días. Y todos, aún aquellos que hemos dedicado nuestra vida a otras ciencias, sabemos el color y el valor del Derecho, con mayúsculas, aquel que trasciende las leyes escritas y tiempos concretos.

Por mi trayectoria académica (soy de Ciencias, de Química Orgánica) también les puede parecer peculiar.

A veces los estereotipos circunscriben la investigación sólo al laboratorio o al uso de grandes y sofisticados equipamientos científicos. Y no es verdad, Os diría más, es un profundo error pensar así. Por mucho que avancemos en ciencia y tecnología punta, siempre tendremos necesidad de humanistas que nos reencuentren con nosotros mismos. De juristas que nos recuerden donde hay sociedad, hay derecho. Esa ordenación de la razón dirigida al bien común de la que nos hablaba Santo Tomás.

Por ello me gustaría que vieseis en mí la punta del iceberg de una profunda admiración hacia vuestro conocimiento.

La investigación, muchas veces se concibe como algo abstracto, lejano, inalcanzable, algo que se queda en los laboratorios, en los despachos, en las bibliotecas…

A los investigadores se nos identifica como personas con batas blancas o como sabios inmersos en su trabajo y aislados del mundo que les rodea. Tampoco es así. La investigación es una actividad humana orientada a la obtención de nuevos conocimientos. Es un proceso sistemático (índole intelectual y experimental), reflexivo (obliga a razonar, a deducir) y crítico.

Abarca todas las ramas del saber. Puede ser básica (fundamental) o aplicada. Pero siempre importante porque genera conocimiento. La investigación es esencialmente una, un camino, un procedimiento, sean científicos experimentales o, científicos jurídicos como vosotros.

Investigar “investigare” es seguir el vestigium, la huella, encontrar la senda correcta entre muchas. Encontrar la verdad, la certeza jurídica. Investigar es descubrir y gestionar vuestra intuición, ese relámpago en medio de la oscuridad que impresiona.

Os animo a ello. Es una tarea apasionante. Os marcará, os absorverá. Pero merecerá la pena. Tendréis la libertad del científico. Libertad para plantear cualquier cuestión. Para dudar. Para buscar evidencias. Para corregir errores. Para formular una idea capaz de perforar y ampliar las fronteras del conocimiento jurídico. Después vendrá la aceptación de los resultados por la comunidad científica. Su publicación en revistas.

La investigación en España tiene ante sí muchos retos y uno de ellos, y no precisamente baladí es la renovación generacional. En las Ciencias Jurídicas vosotros sois el relevo lógico. El próximo eslabón en la cadena. La fortuna juega siempre a favor de las mentes preparadas. Pero también a favor de los países que saben captarlas. Por encima de cualquier contingencia económica o socio económica. Un investigador, un buen jurista ni se crea de la noche a la mañana ni se crea por decreto.

La constancia en el estudio, el ansia por saber, la autoexigencia en busca de la verdad que fundamenta el conocimiento científico, son valores esenciales para salir adelante. La sociedad española no puede permitirse una fuga masiva de cerebros. Una cosa es que vuestro conocimiento, vuestras ideas, se proyecten hacia un mundo globalizado, y otra cosa que nuestro esfuerzo y nuestra inversión humana como país se disuelvan en el mundo globalizado. La sociedad tiene que apostar fuerte por vosotros. Entre todos, debemos ser audaces de cara al futuro. Crear una conciencia que favorezca el conocimiento, que impregne a todos los programas políticos con la idea de conocimiento. El paradigma en el que basar nuestra sociedad del futuro. “Ubi societas, ibi ius”.

Os deseo lo mejor en esa búsqueda del vestigio, de la huella. Esperamos mucho de vuestro trabajo y de vuestro empuje en este Primer Congreso Nacional de Jóvenes Investigadores en Ciencias Jurídicas que declaramos ya inaugurado.