PRINCIPIOS DE ECONOMÍA VITAL

PRINCIPIOS DE ECONOMÍA VITAL

Mario Blacutt Mendoza (CV)

Los Modelos Económicos

Con el objeto de poner de relieve las bases fundamentales de su teoría, un economista debe recurrir, al igual que los supuestos, a la estructuración de modelos, los que son representaciones simplificadas de la realidad. Pero, los modelos usados por los marginalistas están ya sesgados por los supuestos, en este caso, por usar como escenario de operaciones un mercado que ya no es importante, el de competencia perfecta. Es por eso que la mayor parte de sus modelos no tienen ninguna capacidad ni descriptiva ni predictiva. La artificialidad de los supuestos y de los modelos del pensamiento marginalista ha inspirado a varios humoristas, los que despliegan una serie de opiniones sobre la Economía. Vaya el primero de ellos, tomado al azar:

Un Economista es una persona que nos dice lo que va a suceder mañana en el campo de la economía y luego nos explica con lujo de detalles por qué no sucedió así.
Cuando a comienzos de la década del ’70 apareció en os EEUU el fenómeno de la stanflación, en es decir, la coexistencia mutua de altos índice de inflación y de desempleo, algo que no había sucedido antes en ningún país desarrollado, el entonces Presidente Richard Nixon convocó la presencia de Paul Samuelson con el objeto de que le guiara en las medidas que debería tomar para acabar con el extraño fenómeno. Paul Samuelson, de la corriente keynesiana del marginalismo y Premio Nobel le dijo: No se preocupe señor Presidente, lo que usted debe hacer es enfocar sus esfuerzos a luchar contra el desempleo; una vez vencido, la inflación desparecerá como por encanto. En cuanto a las medidas que debe tomar es preciso un paquete de acciones que incluyan la reducción de la tasa de interés, el incremento de la oferta monetaria y una política crediticia más abierta.

El Presidente Nixon, cuya experiencia en política le había enseñado a pedir siempre una segunda opinión, convocó a Milton Friedman,  crítico severo del keynesianismo y creador de la corriente monetarista del marginalismo. La respuesta, en síntesis, fue la siguiente: no se preocupe señor Presidente, concentre sus energías en la guerra contra la inflación; una vez concluida, el desempleo desaparecerá automáticamente. Las medidas más importantes son las siguientes: reduzca la oferta monetaria, aumente la tasa de interés y endurezca la política crediticia. ¡Todo lo contrario de lo recomendado por Samuelson! En 1976, cuando Milton Friedman recibió el Premio Nobel, otro humorista comentó:

La Economía debe ser la única ciencia que premia a dos de sus representantes por el hecho de que uno diga exactamente lo contrario del otro