LA EDUCACIÓN PARA LA DEMOCRACIA: LA EXPERIENCIA DEL IFE

LA EDUCACIÓN PARA LA DEMOCRACIA: LA EXPERIENCIA DEL IFE

Carlos Alejandro Montes de Oca Estrada (CV)

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3. Planteamiento del problema

La idea de educar para la democracia es una idea moderna: nace con el Siglo de Las Luces al considerar que la libertad humana sólo es posible mediante el cultivo de la inteligencia, antídoto a la ignorancia y el oscurantismo (Guevara 2002); y la relación de ambos conceptos surge desde el momento en que el individuo es un sujeto social, que hay una estrecha relación entre la sociedad y aquél. Al respecto Morin (1999) señala que:

“Individuo y Sociedad existen mutuamente. La democracia permite la relación rica y compleja individuo-sociedad donde los individuos y la sociedad pueden entre sí ayudarse, desarrollarse, regularse y controlarse. La democracia se funda sobre el control del aparato del poder por los controlados y así reduce la esclavitud (que determina un poder que no sufre la autoregulación de aquellos que somete); en este sentido la democracia es, más que un régimen político, la regeneración continua de un bucle complejo y retroactivo: los ciudadanos producen la democracia que produce los ciudadanos. A diferencia de las sociedades democráticas, que funcionan gracias a las libertades individuales y a la responsabilidad de los individuos, las sociedades autoritarias o totalitarias colonizan los individuos que no son más que súbditos; en la democracia el individuo es ciudadano, persona jurídica y responsable que, por un lado, expresa sus deseos e intereses y, por el otro, es responsable y solidario con su ciudad.”(p. 60).

Así, en la construcción de la democracia, la formación de una ciudadanía es indispensable para que participe en forma libre, racional y responsable en el desarrollo de los procesos democráticos: el sujeto democrático no nace sino se hace o se forma, a riesgo de apuntar un lugar común. Es por ello que a lo largo de su educación escolarizada es fundamental que reciba, desde sus más tempranos aprendizajes, una formación ad hoc, para que así, desde ese mismo momento y después como ciudadano asuma su responsabilidad correspondiente de su entorno, y emerja una cultura democrática. La formación ciudadana implica el fomento de una cultura política que estimule la participación cívica y civilizada, así como el respeto a los derechos humanos, a las diferencias culturales y a las minorías, tanto en el ámbito público como privado, en un marco de justicia y libertad. Para ello, es tarea esencial de la educación, ya sea formal o informal, proveer a la población tanto del conocimiento de los principios que dan forma a la democracia, sus valores, su evolución histórica, como de habilidades y destrezas que estimulen su disposición a participar y a involucrarse en los asuntos públicos. (Guevara, 2002).

De esta manera llega a la preliminar conclusión de que “se ha construido como un modesto aporte a la atención del reto de mejorar la cultura política y la participación infantil y juvenil en nuestro país, la cual es precaria según muestran las encuestas en la materia y los recientes ejercicios de participación cívica” (p. 11).

Todo ello nos lleva a plantearnos el problema de investigación, con las siguientes preguntas:

• ¿En qué consiste el programa ED?

• ¿Cuál es su orientación educativa?

• ¿Cómo se ha aplicado?

• ¿Cuáles han sido sus resultados, seguimiento y el impacto que ha tenido en el estado de Guanajuato, desde su implementación hasta el 2006?

Nuestro problema, por un lado, se restringe a la política educativa que propuso, diseñó, implemento y evaluó el IFE sobre la Educación para la Democracia en la educación básica. Se ubica en el tiempo de su aplicación, en el estado de Guanajuato, desde su inicio en el 2001, hasta el año 2006. Por otro lado, está acotado al a los reportes que el propio instituto elaboró y nos envió electrónicamente a través de su sección de transparencia. No hemos tomado en cuenta los reportes de otras instancias gubernamentales como la de “Transparencia Guanajuato” o el del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública que en su momento solicitamos, pero anexamos sus reportes al final del estudio.

Sería muy pertinente investigar el impacto de dicha política educativa, tanto en los alumnos, como en los docentes y el resto de la comunidad educativa recipiente de tal propuesta. Sin embargo, no entra en nuestros objetivos por aspectos de tiempo, aunque sería muy pertinente para otro estudio posterior.