LA ECONOMÍA MEXICANA. CRISIS Y REFORMA ESTRUCTURAL. 1984-2006

LA ECONOM?A MEXICANA. CRISIS Y REFORMA ESTRUCTURAL. 1984-2006

Hilario Barcelata Chávez

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LA MALA NOTICIA DEL SEXENIO

11 de abril de 1996

Corre por ahí una broma irónica sobre la situación económica del país que dice que un noticiero nacional anuncia tener dos noticias sobre el sexenio Zedillista. Una buena y una mala: La buena es que éste sexenio tendrá un año bueno económicamente hablando. La mala es que ese año ya pasó y fue 1995.

La broma por desgracia expresa un hecho real: los resultados del plan económico han sido tan desastrosos que muy posiblemente, en realidad, éste año y los que siguen serán peores que el año pasado. Año que, por desgracia, fue catastrófico para todo el país.

Dos factores de suma importancia, por lo menos, permanecen como elementos que impedirán alcanzar las metas de crecimiento económico establecidas para éste año:

1.- La deuda externa ha alcanzado un nivel de 173 mil 400 millones de dólares (mdd), casi 10 000 millones mas que el año pasado. Cantidad que representa el 58% del Producto Interno Bruto (PIB). Esa deuda arroja como consecuencia la necesidad para el país de pagar durante el presente año una cantidad cercana a los 28 000 mdd. Lo que equivale al 10% del PIB para éste año.

Esto significa que una parte importante del gasto público se destinará a pagar deuda, lo que estará reduciendo las posibilidades de canalizar recursos para estimular el crecimiento económico.

Las expectativas de crecer a un ritmo del 3% (como prevé el gobierno mexicano) están sujetas al comportamiento del sector exportador. Se espera que el crecimiento de las exportaciones propiciarán una importante reactivación económica. Y las expectativas se fundamentan en el hecho de que el año pasado las ventas al exterior crecieron en un 31.1% estimándose que el presente año mantengan su nivel de crecimiento. Sin embargo, las condiciones para los exportadores ya no serán las misma. Primero porque el año pasado el repunte de las exportaciones se basó en el abaratamiento de su precio por la vía de la devaluación. Segundo, porque las ventas al exterior dependen de la situación que presente la economía de los Estados Unidos, que está mostrando tendencia a la desaceleración.

Pero aún si las exportaciones se incrementarán, se ve muy difícil que puedan impulsar el crecimiento económico, pues los resultados económicos del año pasado demuestran que son incapaces de desempeñar el papel de motor de la economía. Recordemos que a pesar de que dichas exportaciones crecieron en mas del 30%, la economía mexicana redujo su crecimiento en un 6%. De ahí que no tenemos por qué esperar que éste año las cosas sean distintas.

Por desgracia el incremento de las exportaciones es la única esperanza para el crecimiento. Pues el programa económico del gobierno impide que la reactivación económica se de por la vía del mercado interno debido al incremento de la inflación que ocasiona la contracción de la demanda, lo mismo que el incremento del desempleo y la contracción de los salarios reales.

De igual modo la política de tasas de interés al alza sigue representando un gran obstáculo para los empresarios porque los aleja de las posibilidades de financiarse y porque incrementa los costos financieros de quienes tienen contraídas deudas.

Para poder revertir la tendencia negativa del crecimiento económico es necesario revertir el programa económico. Es decir establecer otra política económica. y como eso no va a suceder, al menos en el corto plazo, entonces lo mas probable es que para el año 2000 seamos un país mas empobrecido.