POBREZA, MIGRACIÓN, REMESAS Y DESARROLLO ECONÓMICO

POBREZA, MIGRACI?N, REMESAS Y DESARROLLO ECON?MICO

Emeterio Guevara Ramos

Volver al índice

 

 

 

 

3. LOS FONDOS DE INVERSIÓN SOCIAL

Los fondos de inversión social constituyen una importante innovación en materia de política social que ha resultado eficaz para encauzar rápidamente financiamiento externo a pequeños proyectos en zonas de alta marginación o pobreza. Los fondos representan un importante mejoramiento institucional y operacional respecto de los programas públicos tradicionales.

Los fondos de inversión social tienen algunas variantes. La más conocida es la canalización hacia préstamos en pequeñas y medianas cantidades para financiar pequeños proyectos productivos. Realizado de esta manera reciben el nombre de microcréditos.

El microcrédito es un préstamo de una pequeña cantidad de dinero a personas que se encuentran en clara situación de pobreza y marginación para que puedan desarrollar proyectos de autoempleo que les permitan, con el tiempo, obtener una fuente regular de ingresos.

El microcrédito se dirige, por lo tanto, a financiar pequeñas iniciativas empresariales de grupos que, por sus condiciones socio-económicas, no tienen acceso a las vías de crédito convencionales. No existe un único modelo de microcrédito puesto que este instrumento, se ha ido adaptando en función de las necesidades de cada sitio.

El microcrédito ha conseguido romper muchos de los perjuicios que tradicionalmente han existido alrededor de la pobreza, como el hecho de asumir que una persona sin recursos es por definición un moroso.

La selección de los proyectos de cada microcrédito obedece a la demanda y ello significa que, en su mayor parte, tienen en cuenta las prioridades de los beneficiarios pobres.

Los fondos han logrado aplicar las prácticas de adquisición del sector privado y se han convertido en proveedores de infraestructura social eficientes y de bajo costo. Han tenido importancia fundamental en la labor de cambiar el clima de apatía respecto a la política social y han demostrado que los programas públicos pueden funcionar.

Además, han abierto nuevos cauces para la acción social y han desempeñado un papel catalítico en la tarea de que se cobre mayor conciencia pública de las cuestiones relativas a la pobreza. Los fondos de inversión social tal vez constituyan una de las contribuciones más importantes al desarrollo que se haya hecho en la región.

Lo que distingue a un fondo de inversión social de otros programas que aplican los gobiernos para ayudar a los pobres es que éstos son pequeños y flexibles y constituyen unidades especiales del gobierno organizadas para hacer inversiones sociales en comunidades pobres. Los fondos construyen infraestructura económica y social, y aumentan sus actividades de capacitación y las relacionadas con proyectos productivos.

Sus inversiones obedecen a la demanda y tienen como base una lista preestablecida de proyectos con criterios de elegibilidad demostrados y cuya aplicación en la práctica, así como la correspondiente combinación de inversiones, quedan determinadas por la presentación de solicitudes por grupos que reúnen los requisitos del caso. Los fondos tienen mayor autonomía que otros organismos de gobierno. Generalmente, están organizados en forma relativamente similar a la empresa privada, con una plantilla pequeña y altamente cualificada, una buena remuneración y un estilo de administración propio del sector privado.

En relación a la reducción de la pobreza, hay que tener en cuenta que los recursos que tienen incluso los fondos más grandes constituyen una proporción mínima de lo que es necesario para reducir realmente la pobreza. Los fondos son un instrumento entre muchos programas y muchas políticas en virtud de las cuales el gobierno puede tratar de ayudar a los pobres. Lo ideal es que las actividades de los fondos formen parte de un amplio plan coordinado para la reducción de la pobreza, en lugar de constituir una reacción aislada ante el problema.

Por ello, en los lugares en que no exista ya un plan de esa índole, se debe apoyar y promover su establecimiento. El plan debe contener un análisis del problema de la pobreza en el municipio y una clara exposición de la forma en que el fondo y otros programas del gobierno encajan en una serie complementaria de actividades cuyo objetivo es la reducción de la pobreza.

Los proyectos elegibles para ser financiados con los recursos de los fondos se deben basar en criterios de autoayuda, contribuir a la iniciación o financiamiento de programas locales o regionales, contar con una expresa declaración del gobierno del municipio de que no tiene objeción al proyecto y ajustarse a las siguientes condiciones:

- Beneficiar directamente a los grupos vulnerables, pobres y/o marginados de la sociedad que no tienen acceso a los servicios financieros, de desarrollo empresarial, u otro tipo de ayuda necesaria para mejorar sus condiciones de vida.

- Generar, en las cabeceras municipales o en las comunidades, nuevas oportunidades de empleo, reforzar el empleo existente y mejorar los ingresos y el bienestar de los grupos pobres y marginados.

-  La institución intermediaria debe promover el mejoramiento económico y el bienestar de los grupos pobres y marginados. Las instituciones públicas locales de desarrollo pueden incluir entidades al nivel estatal o municipal.

El aspecto más positivo de los fondos ha consistido en que han podido desarrollar la capacidad para llevar a cabo proyectos útiles en zonas desatendidas y con una elevada concentración de pobres. Los efectos de los fondos se dan las áreas que se describen a continuación.