Conclusiones: autocorrelación espacial y convergencia sigma

 

Fuente: elaboración propia, a partir de la base de datos REGIO, con el programa SpaceStat 1.90.

 

La comparación de la medida de la autocorrelación espacial con el indicador de la dispersión del PIB per cápita indica que estas dos medidas parecen evolucionar de la misma manera. La comprobación de esta evolución común se efectúa a través del cálculo de los coeficientes de correlación[1] entre ambas variables, para los periodos señalados (cuadro III.6). La correlación detectada para los subperiodos seleccionados resulta siempre superior al 95%. Este movimiento conjunto parece estar reflejando una característica dinámica de la concentración regional.


 

Cuadro III.6:
Correlación entre el I de Moran y la
desviación típica del Ln PIB per cápita

 

Coeficiente

 

de correlación

1980-82

0,9957  

1983-86

0,9977

1987-91

0,9584

1992-95

0,9997

 

Fuente: elaboración propia a partir de la base de datos REGIO, con el programa MS Excel 97.

 

 

Los datos obtenidos muestran que cuando la dispersión de los PIB per cápita regionales se reduce, tal fenómeno viene acompañado de una disminución de la tendencia al reagrupamiento geográfico de regiones similares (I sigue siendo positivo aunque su valor disminuye). Debe destacarse, no obstante, que la vinculación geográfica interregional permanece a unos niveles muy elevados, ya que el valor más pequeño registrado por los I de Moran es de 0,69.

 

Llegados a este punto, cabe preguntarse cuáles podrían ser las razones explicativas del debilitamiento de las concentracio­nes regionales cuando disminuye la dispersión de los PIB per cápita.

 

La respuesta propuesta es la siguiente: si la dispersión de los niveles de PIB per cápita disminuye, es porque las regiones pobres presentan una tendencia a la mejora de su PIB per cápita más marcada que la de las regiones ricas, y/o porque se produce un deterioro en el PIB per cápita en las regiones ricas, mayor que el experimentado por las regiones pobres.

 

En todos los casos, la disminución de la autocorrelación espacial quedaría explicada por el hecho de que ciertas regiones pobres (o ciertas regiones ricas) se vuelven menos parecidas, en términos de PIB per cápita, a las regiones vecinas, pertenecientes al mismo grupo geográfico.

 

En un caso extremo, las diferencias en el desempeño experimentado en el seno de un grupo de regiones, similares al comienzo del periodo de convergencia s, puede provocar la desaparición de determinadas concentraciones geográficas.

 

Para examinar esta cuestión, conviene adoptar una perspectiva más desagregada de la estructura de dependencia espacial en los PIB per cápita regionales.

 

 Para profundizar en lo ocurrido en cuanto a posibles transformaciones en los esquemas geográficos de las regiones de la Unión Europea a lo largo del periodo estudiado, se aplican a continuación las técnicas de “análisis exploratorio de datos espaciales” (AEDE). En concreto, se va a analizar la evolución  de la autocorrelación local de los PIB per cápita y del crecimiento económico regional, con el fin de obtener la correspondencia local a esta configuración global descrita.


 


[1] El coeficiente de correlación ha sido calculado a partir de la siguiente expresión:

 

 

Este texto forma parte de la tesis doctoral "El factor espacial en la convergencia de las regiones de la Unión Europea", de Mª Amparo Toral Arto, cuyos datos y texto completo son accesibles desde la
FICHA DE LA TESIS

 

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