ESTUDIO ECONÓMICO SOBRE EL TRATADO DE IBN ABDÚN

ESTUDIO ECONÓMICO SOBRE EL TRATADO DE IBN ABDÚN

Eduardo Escartín González (CV)
Universidad de Sevilla

El juez secundario

Llamadohakim, en árabe, fue un cargo instituido para ayudar al cadí en la resolución de los múltiples pleitos que, con el tiempo, se fueron generando, y también debido a la acumulación de cometidos que iban recayendo en el cadí, como la administración del tesoro de las fundaciones pías, la de las herencias vacantes y la de los bienes de manos muertas. Estos magistrados secundarios resolvían en nombre del cadí los litigios menos importantes, entendiendo por tales los que correspondían a la plebe. Según Lévi-Provençal (1957, p. 74) la existencia de estos jueces secundarios “aparece atestiguada en ciudades importantes, como Córdoba, Sevilla o Toledo”, e incluso dice que podía haber uno por barrio y que otros jueces de competencia limitada iban por los pueblos para resolver litigios de poca monta.