Revista: Turydes Revista Turismo y Desarrollo.
ISSN 1988-5261


LA INTEGRACIÓN DE SABERES EN LA ENSEÑANZA DEL TURISMO EN FUNCIÓN DEL DESARROLLO SOSTENIBLE

Autores e infomación del artículo

Ana Verònica Osorio Sànchez*

Mariana Solís García**

Jenny Alexandra Muñoz Cornejo***

Universidad Técnica Estatal de Quevedo, Ecuador

Icruz8908@gmail.com

Resumen
El turismo como sector de mayor impacto social  por sus resultados económicos así como por la masividad de sus movimientos es responsable de encontrar un equilibrio del desarrollo humano, del desarrollo económico y de la conservación del patrimonio histórico cultural. Es por ello que las instituciones de educación superior juegan un papel esencial en este ámbito ya que  definen políticas institucionales de vinculación de disciplinas en las carreras universitarias para promover el desarrollo sostenible desde la enseñanza de diversas carreras universitarias. El reto está en lograr una educación que contemple los problemas ambientales y del desarrollo en su totalidad y las repercusiones del turismo a corto, medio y largo plazo. El presente artículo tiene como objetivo elaborar una estrategia multidisciplinar para la formación de competencias en los futuros profesionales de la carrera Ingeniería en Administración Turística de la Universidad Técnica Estatal de Quevedo, Ecuador, a partir de la integración de saberes multidisciplinares en esta área que permitan potenciar un desarrollo sostenible y un turismo responsable. Esta investigación permitió conocer cómo a partir del interés de los estudiantes de dicha carrera,  estas cuestiones se convierte en el elemento principal que demanda perspectivas bidireccionales entre la universidad y la sociedad.
Palabras Clave: Integración de saberes; desarrollo sostenible; turismo responsable; educación multidisciplinar.
Abstract
Tourism as a sector of greater social impact due to its economic results as well as the mass of its movements is responsible for finding a balance of human development, economic development and conservation of the historical cultural heritage. This is why higher education institutions play an essential role in this area since they define institutional policies of linking disciplines in university careers to promote sustainable development from the teaching of various university careers. The challenge is to achieve education that addresses environmental and development issues as a whole and the impact of tourism in the short, medium and long term. This article aims to develop a multidisciplinary strategy for the training of competencies in the future professionals of the Engineering in Tourism Administration course at Quevedo State Technical University, Ecuador, based on the integration of multidisciplinary knowledge in this area that allows Sustainable development and responsible tourism. This research allowed to know how from the interest of the students of this career, these questions become the main element that demands two-way perspectives between the university and society.
Key Words: Integration of knowledge; sustainable development; responsible tourism; multidisciplinary education.


Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato:

Ana Verònica Osorio Sànchez, Mariana Solís García y Jenny Alexandra Muñoz Cornejo (2017): “La integración de saberes en la enseñanza del turismo en función del desarrollo sostenible”, Revista Turydes: Turismo y Desarrollo, n. 22 (junio 2017). En línea:
http://www.eumed.net/rev/turydes/22/desarrollo-sostenible-turismo.html
http://hdl.handle.net/20.500.11763/turydes22desarrollo-sostenible-turismo


Introducción

En los tiempos actuales la mundialización y la globalización financiera hacen del turismo una expresión acabada de una nueva era. El alcance de la gestión eficaz y eficiente en este sector dependerá de un conocimiento cabal de la demanda real y potencial, de los agentes involucrados en la oferta turística, y  de las relaciones económicas entre los agentes sociales.
A partir de la segunda mitad del siglo XX el turismo se destacó como uno de los sectores socioeconómicos más significativos del mundo, sobre todo por involucrar diferentes actores económicos en su cadena productiva (Moreira, Prevot y Micaela, 2010). Al decir de estos autores, la actividad turística, a pesar de estar relacionada especialmente con los grandes capitales, posee ciertas particularidades que la diferencian de otras: activa el desarrollo local a través del comercio, los bares, los restaurantes, el hospedaje, las agencias de turismo, las artesanías, entre otros; promueve acciones desde el poder público; y produce ingresos y empleo (Coriolano, 2003).
Sin dudas esto hace al turismo el sector de mayor impacto social,  por sus resultados económicos así como por la masividad de sus movimientos. Es responsable encontrar un equilibrio del desarrollo humano, del desarrollo económico y de la conservación del patrimonio histórico cultural; incluye el respeto por los valores y costumbres morales, o sea, lleva intrínseco una cultura ética que garantice la sostenibilidad de los recursos turísticos.
En tal sentido las instituciones de educación superior, definen políticas institucionales de vinculación de disciplinas, generan paradigmas educativos orientados sobre propuestas de articulación entre programas educativos y el mercado de trabajo. Esta interacción necesaria entre las carreras universitarias con las necesidades de la sociedad promueve el desarrollo sostenible en las comunidades.
Las necesidades de desarrollo de la sociedad, demanda la integración social de las ciencias, a través de la formación profesional y su aplicación en la sociedad. En ambos espacios, el profesional está en constante interacción con individuos formados en diferentes áreas del conocimiento, por lo que deberá aprender a socializarse para lograr una aplicación efectiva del conocimiento en el espacio y grupo social en el cual se desenvuelva.
El reto está en lograr una educación que contemple los problemas ambientales y del desarrollo en su totalidad y sus repercusiones a corto, medio y largo plazo. Una educación que oriente la actividad personal y colectiva en una perspectiva sostenible, que respete y potencie la riqueza que representa tanto la diversidad biológica como la cultural; ellos solo se logra con el actuar consciente de los profesionales y la sociedad.
Como planteara Laura Peñaloza y Leticia Tamayo (2006)  la diversidad en la que se desarrolla el sector turístico hace necesario caracterizar, desde el punto de vista educativo, los diferentes niveles y orientaciones a través de los cuales deberá abordarse su estudio, en virtud de que, si bien es fundamental atender su construcción teórico-metodológica, también lo es el desarrollo de estrategias y procedimientos para su operación, como la respuesta que las instituciones educativas deben ofrecer a la sociedad.
En tal sentido la siguiente investigación se encarga de demostrar a través de una estrategia como pueden ser implementados modelos curriculares flexibles. Estos modelos deben estar basados en competencias profesionales, con el fin de permitir la formación interdisciplinaria en la carrera de Ingeniería en Administración Turística de la Universidad Técnica Estatal de Quevedo. Estos futuros profesionales deben ser capaces de desarrollar habilidades y destrezas para desenvolverse en el campo turístico, con responsabilidad social en función del desarrollo sostenible.
En tal sentido la carrera de Ingeniería en Administración Turística según su Plan de Estudios (2015) se caracteriza por formar un profesional de perfil amplio, sus objetivos fundamentales están dirigidos a formar profesionales competentes. Las premisas fundamentales de dicha carrera se orientan a:

  • Formar Ingenieros en turismo capaces de desarrollar habilidades y destrezas para desenvolverse en el campo turístico.
  • Diseñar sistemas administrativos turísticos para empresas de actividades turísticas.
  • Contribuir a la formación académica de los estudiantes para que sea parte de la solución de los problemas turísticos provinciales, vinculados con la realidad.
  • Contribuir al desarrollo sostenible y cuidado del ambiente.
  • Planificar recorridos turísticos, basado en circuitos turísticos.
  • Mejorar la investigación
  • Conservar el patrimonio turístico natural, cultural e histórico de la región. (“Plan de Estudio de la Carrera Ingeniería en Administración Turística. UTEQ,” 2015)

Cada uno de estos fines, estimulan la comprensión de los problemas sociales, habrá que construir un fundamento teórico desarrollador de actitudes responsables en función del desarrollo sostenible. Por tanto disponer de estrategias pedagógicas apropiadas y espacios integradores para el debate sobre las causas y las consecuencias de diferentes problemas sociales se convierten en un reto que solo se hace posible a través de la interdisciplinariedad según el Plan de Estudio (2015) y la Malla Curricular (2015) de la carrera.
El presente artículo tiene como objetivo elaborar una estrategia para la formación de habilidades en los futuros profesionales de la carrera Ingeniería en Administración Turística, a partir de la integración de saberes en esta área que permitan potenciar un desarrollo sostenible y un turismo responsable. Esta investigación permitió conocer cómo a partir del interés de los estudiantes de dicha carrera,  estas cuestiones se convierte en el elemento principal que demanda perspectivas bidireccionales entre la universidad y la sociedad.
Desarrollo

  • Algunas consideraciones sobre Desarrollo Sostenible

La globalización y el acelerado desarrollo hace del turismo un sector que cada vez se hace más amplio y recaudador de economías considerables, frente a su papel potenciador de cambios y transformaciones que le impactan en lo social, económico, político y cultural. Es evidente que  todos los países enfrentan los retos de la globalización y del cambio tecnológico pero pocos se encuentran inmersos en procesos de cambio simultáneo.
Ello solicita de una cultura que combine valores globales, tradicionales y equitativos, que comprendan los acontecimientos pasados presentes y futuros, así como sus consecuencias y posibles soluciones propuestas, en función de un desarrollo humano sostenible. En estas condiciones, el progreso científico y tecnológico no puede constituir un fin en sí mismo, sino un medio para promover el desarrollo humano equitativo de una sociedad.  (Freyre, 2006).
El  término desarrollo sostenible ha constituido desde décadas anteriores  un paradigma y a la vez una utopía en el desarrollo humano. Tal afirmación ha provocado necesarias consideraciones a un desarrollo alternativo en correspondencia con el crecimiento económico, la equidad y sustentabilidad ambiental y otras dimensiones  que posibilitan la búsqueda  de nuevas vías para el desarrollo (Mattar, 2012; Novo, 2006a). Teniendo como condición  necesaria la educación y la cultura del hombre dentro de un contexto determinado a través de una comprensión dialéctico - materialista de la relación entre lo objetivo y lo subjetivo.
Coincidentemente con (Mattar, 2012) el desarrollo sostenible para los países  en vías de desarrollo se convierte en un enorme reto por la carencia de recursos económicos,  financieros y humanos capacitados. La falta de políticas y estrategias integradas bajo un sistema socioeconómico y capitalista imperante, que se basa  en relaciones de propiedad privada conduciendo a las  diferencias e  individualidades dentro de la economía  y  la  sociedad. Por lo que,  esto trae consigo que la apropiación y el dominio privado de niveles tan elevados de desarrollo científico y tecnológico – en medio de un creciente proceso de desigualdad y exclusión social – reclama, con urgencia, de alguna forma de regulación y protección en favor de los países de menor desarrollo relativo, en aras de la continuidad de la vida en un entorno, humano y ecológicamente, sostenible. (Arana y Valdés, 2006).
De ahí que se defina el desarrollo sostenible como:
Un proceso de cambio a diversos niveles, basado en una cultura y racionalidad diferentes, determinada por valores de compromiso, responsabilidad, creatividad, solidaridad, etc., que permitan  el crecimiento económico con equidad, sustentabilidad  ambiental  y participación democrática en las soluciones, mediante el uso racional  de los recursos naturales, financieros y humanos en aras de un desarrollo económico, científico – tecnológico, además de humano. (Arana y Valdés, 2006:23)
Al decir de Martha Arana Ercilla y Roxana Valdés Espinosa (2006) el desarrollo como transformación  integral, debe combinar aspectos dirigidos a:  

  • El desarrollo humano, como  mejora de la calidad de vida de las personas.
  • El desarrollo sustentable, como preservación en el presente de los recursos que permitirán a las generaciones futuras atender a su propia calidad de vida.
  • El desarrollo económico, como elevación no sólo cuantitativa sino también y fundamentalmente cualitativa de los niveles de producción, lo que es condición necesaria pero no suficiente para el desarrollo humano sustentable.
  • La construcción de las bases materiales y sobre todo de las condiciones y capacidades sociales que garanticen la auto-sustentabilidad del Desarrollo en función del futuro.

Como señalara en algún  momento uno de los sociólogos de habla hispana que primero insistió en los aspectos sociales del  propio desarrollo, no puede hacer olvidar que en parte alguna está el crecimiento económico,  en sí sea un puro error y que los cálculos de su posibilidad puedan arrojarse libremente por la borda (Medina, 1976 en Arana y Valdés, 2006 ). Junto a ese crecimiento, cuyos indicadores se expresan, esencialmente, en términos cuantitativos, las consideraciones de carácter cualitativo han hecho pasar del concepto de “crecimiento” al concepto de “desarrollo”, y de éste al de desarrollo humano sostenible.
Es por ello que la consideración  del desarrollo en las Ciencias Sociales constituye uno de los principales resultados históricos y, al propio tiempo, un medio fundamental del desarrollo humano en su más amplia acepción y alcance. La causa real del carácter perverso que ha adquirido la relación entre el adelanto científico-tecnológico y el desarrollo humano sostenible, hay que buscarla en la privatización y monopolización del conocimiento y, por tanto, en el afán egoísta y desmedido de obtener poder o ganancias, o ambas cosas a la vez. (Novo, 2006; Freyre, 2006; Mattar, 2012).
El término desarrollo sostenible se encuentra en numerosos discursos políticos, pero su aplicación es muy diversa. El desarrollo sostenible no es por sí mismo un elemento sociológico, sino que debe formar parte de un tejido en el cual la producción, la economía, el bienestar y el ambiente están en equilibrio.
Tener presente que la evolución del pensamiento sobre el desarrollo, en términos históricos, se ha dado en el marco de luchas sociales, a través de la pugna entre el capitalismo y el socialismo, entre la clase obrera y el capital y el pensamiento humano y las fuerzas de la naturaleza. A lo largo de las últimas siete décadas del siglo XX, y parte de esta primera década del siglo XXI, el concepto de desarrollo se ha expandido y enriquecido, pero también se ha fragmentado (Arana y Valdés, 2006; Mattar, 2012), puesto que se va tomando de él aspectos de acuerdo a la gravedad o particularidad que confronten los países en su diagnóstico ambiental sociocultural, económico y político. Según Cisneros (2014) otra dimensión del concepto es que el contexto desde donde se enfoca el desarrollo tiende a ser diferente en los países latinoamericanos, pues en esta región se están sucediendo cambios muy importantes, que se asienta en interrelaciones globales y de naturaleza local.
En las postrimerías del siglo XX la Organización de las Naciones Unidas (ONU) decide crear la Comisión para el Desarrollo Sostenible para asegurar un seguimiento eficaz de la histórica. La protagonista de tal suceso fue la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo de 1992, que se celebró en Río de Janeiro (Brasil) y que se conoce como Cumbre de la Tierra. Donde se puso en primer lugar la importancia de lograr un desarrollo sostenible y no desmedido como el que llevan algunas potencias, sin importarles la finita vida de los recursos no renovables del planeta y la del propio ser humano (“Conferencia de la Organización de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo,” 1992). Estas reflexiones, involucran preocupaciones éticas que encierran responsabilidad moral para con el bienestar de las presentes y futuras generaciones de seres humanos y no humanos; que comprometan a la humanidad a actuar en función del beneficio y no prejuicio, la autonomía, y la justicia social. Todo lo cual justifica el contenido de estas páginas.

  • ¿Puede el turismo contribuir al desarrollo sostenible?

El turismo es responsable de encontrar un equilibrio del desarrollo humano, del desarrollo económico y de la conservación del patrimonio histórico cultural. Esto incluye el respeto por los valores y costumbres morales, o sea, lleva intrínseco una cultura ética que garantice la sostenibilidad de los recursos turísticos.
El mismo como una actividad propiamente de los hombres ha sido objeto de estudio para varias ramas de la ciencia. En ello ha influido su desarrollo a nivel mundial. La Comisión Económica de la ONU, define esta actividad como: El conjunto de actividades que realizan las personas durante sus viajes y estancias en lugares distintos al de su entorno habitual, por un período de tiempo consecutivo inferior a un año. Con fines de ocio o por negocios u otros motivos (Soler, 2004).
Por su parte autores como Díaz (2006) plantea que el turismo:
Es un fenómeno social que consiste en el desplazamiento voluntario y temporal de individuos o grupos de personas, que fundamentalmente por motivos de recreación, descanso, salud o cultura, se trasladan de su lugar de residencia habitual a otro, en el que no ejercen ninguna actividad lucrativa, ni remunerada, generando múltiples interrelaciones de importancia social, económica y cultural. (Díaz, 2006: 18)
Ambas definiciones del turismo, generalmente se basan en los motivos del viaje y el dinero gastado que se encuentran en continua transformación. En la actualidad el constante cambio se está dando hacia definiciones de naturaleza holística que incluyen sistemas emisores y receptores de turistas. Estas definiciones tienen en cuenta la medición del flujo turístico o de sus magnitudes económicas desde el punto de vista de un sistema completo incluyendo la economía solo como una de las dimensiones significativas que lo configuran.
Sin embargo otras definiciones de la terminología comprenden al turismo como moderador en un principio del impacto social a partir de las relaciones que se establecen entre los habitantes de un lugar/receptores y los turistas. La atracción que pueden provocar determinados aspectos de la cultura de los primeros; a través de elementos intangibles, como pueden ser la religión, las tradiciones, u otros elementos de la cotidianidad,  que  de alguna manera, se vinculan al viaje turístico (Goelnerd, C.; Richie, J.  y McIntoch, W., 2002). O sea, aquellas señas de identidad, específicas de cada lugar, que pueden ser captadas con facilidad por los turistas y que muchas veces se utilizan como reclamo para motivar la visita a determinados sitios.
Las perspectivas económicas que el turismo está generando son bastante prometedoras y han convertido el turismo en una mercancía más que se puede vender en el mercado, poniendo en peligro, incluso, su propia supervivencia e identidad. (Goelnerd, C.; Richie, J.  y McIntoch, W., 2002:115). La posición de una "cultura" respecto a su abordaje turístico ha de ser leída desde una visión crítica y problemática, que implica procesos socio-económicos e históricos y donde resulta de primordial importancia aquello que los sujetos inmersos en dicho proceso entienden sobre las diferentes tipologías.
Esta importancia no sólo surge de un contexto que podría ser denominado  "ético" – el cual parte de cierta idea de "respeto" por la diversidad de formas culturales de la humanidad - sino también de una perspectiva pragmática, puesto que es suficientemente sabido que cualquier intento de transformación o gestión será inútil salvo que los protagonistas del mismo estén profundamente implicados en él (Goelnerd, C.; Richie, J.  y McIntoch, W., 2002; Díaz, 2006). De este modo, la conjunción entre lo "turístico" y lo "cultural" implica crear espacios de interacción donde los turistas y las comunidades puedan dialogar respecto del universo de significaciones y concepciones del mundo de la cultura a la cual se acercan, y de las perspectivas que sus mutuas diferencias hacen posibles.
En las relaciones establecidas en el sistema turístico, se da una transferencia de elementos culturales que afectará, en mayor o menor medida, a turistas y pobladores locales. Este intercambio podrá ser beneficioso o perjudicial, dependiendo en gran parte de la planificación turística, pero también del grado de identificación étnica de los implicados.
Según Jafari (2005) el crecimiento sostenido del turismo desde la Segunda Guerra Mundial, especialmente durante las últimas décadas, ha despertado un enorme interés como industria y como fenómeno esto se evidencia en cuatro grupos, cada uno de los cuales constituye una postura o plataforma de pensamiento: Plataforma Favorable, Plataforma Desfavorable, Plataforma Conciliadora, Plataforma Científica.
En tal sentido la plataforma favorable al decir del propio autor, reconocen al turismo como industria aportador de beneficios económico y beneficios socioculturales tales como se muestra a continuación. (Jafari, 2005)

 

Sin embargo estas consideraciones tienen una doble intención que sitúa a la industria turística en el extremo contrario del análisis. Miembros de la comunidad de expertos, especialmente los que en el sector público y en el sector privado se ocupan de la protección de la cultura y la naturaleza, contribuyeron al surgimiento de la postura desfavorable (Jafari, 2005). El mensaje de esta plataforma no se limita a los beneficios económicos y sostiene las debilidades y de la industria turística en torno a que genera empleos que son en su mayor parte estacionales y no cualificados; beneficia solo a las empresas y a las grandes corporaciones; destruye los recursos naturales y paisajísticos; mercantiliza los pueblos y las culturas; distorsiona la estructura de la sociedad anfitriona.
Estas denominaciones  e interpretaciones provienen esencialmente de las políticas que emplea este sector, con el fin de proteger el medio ambiente y hacer más factible y viable la interrelación de diversos factores que convergen en la actividad turística. Desde muchos puntos de vistas (Pere y Ayuso, 2003; Jafari, 2005; “Documento Final de la Cumbre Mundial,” 2005), el turismo sí genera cierto tipo de contaminación. Es innegable que la actividad turística ha provocado la pérdida de valores históricos, culturales y naturales.  
Es por ello que organizaciones internacionales y gobiernos en general que apoyan y llevan a cabo la actividad turística han decidido establecer importantes medidas para potenciar un turismo sostenible; ya que en muchos países mantienen como actividad económica fundamental al turismo por los beneficios que trae consigo. En el seno de las Naciones Unidas se creó un Comité de Turismo Sostenible que se reunió por primera vez en la séptima sesión de la Comisión sobre Desarrollo Sostenible en  abril de 1999 (Fullana y Ayuso, 2003). El objetivo fue generar un diálogo entre gobiernos y representantes de los principales grupos de interés implicados.
Se adoptó una resolución que refleja los resultados de las discusiones mantenidas:

  • Los gobiernos deben consultar y trabajar en sociedad con todos los principales grupos, incluyendo los pueblos indígenas y las comunidades locales para facilitar su participación activa a todo nivel dentro del proceso de desarrollo turístico.
  • Los gobiernos deben maximizar el potencial del turismo para erradicar la pobreza.
  • La industria turística debe desarrollar tipos de turismo que sean compatibles en materia ambiental, social y cultural.
  • La industria turística debe brindar información a los turistas con relación a los valores ecológicos y culturales en las regiones destino.
  • La ONU y la OMT deben promover el desarrollo del turismo sostenible, con el propósito de incrementar los beneficios provenientes, de los recursos turísticos para la población de las comunidades receptoras, al igual que con el objeto de mantener la integridad ambiental y cultural de estas comunidades. (“Conferencia de la Organización de Naciones Unidas sobre  Desarrollo Sostenible,” 1999)

Sin dudas la idea central gira entorno a que, la esencia de mantener al turismo está en su sostenibilidad. El turismo sostenible no es una modalidad sino una política que se aplica y adapta a cualquiera de dichas modalidades del turismo ya sea: Turismo de sol y playa; Turismo de ciudad; Turismo de naturaleza; Turismo ecológico; Turismo de salud; Turismo de congresos y convenciones. (Díaz, 2006)
En 1988 la Organización Mundial de Turismo (OMT), declaró al turismo sostenible aquel que conduce a la gestión de todos los recursos de tal forma que permita satisfacer todas las necesidades económicas, sociales, estéticas, manteniendo la integridad cultural, los procesos ecológicos esenciales, la diversidad biológica y los sistemas que apoyan la vida. (“The Internacional Ecoturism Society. Una guía simple sobre certificación de turismo sostenible y ecoturismo,” 2004) En otro momento es definido como:
Un modelo de desarrollo económico concebido para mejorar la calidad de vida de la comunidad receptora, para facilitar al visitante una experiencia de alta calidad y mantener la calidad del medio ambiente, del que tanto la comunidad anfitriona como los visitantes dependen. (Troncoso, 2012)
De acuerdo con lo resultante de la Conferencia Globe 90, Tourism Stream, Action Strategy, de Vancouver, Canadá, el turismo sostenible se orienta sobre los siguientes principios:

  • El turismo sostenible estimula la compresión de los impactos del turismo sobre los entornos naturales, culturales y humanos.
  • El turismo sostenible garantiza una distribución justa de costos y beneficios.
  • El turismo genera empleo local, tanto directamente en el sector turístico como en diversos sectores de apoyo y de gestión de recursos.
  • El turismo estimula industrias nacionales rentables: hoteles y otras instalaciones de alojamiento, restaurantes y otros servicios de alimentación, sistemas de transporte, artesanía y servicios de guía.
  • El turismo genera divisas para el país e inyecta capital y fondos frescos en le economía local.
  • El turismo diversifica la economía local, especialmente en zonas rurales donde el empleo agrícola puede ser esporádico o insuficiente.
  • El turismo sostenible requiere la adopción de decisiones en todos los sectores sociales, incluidos las poblaciones locales, de forma que el turismo y los otros usuarios de los recursos puedan coexistir. Con la incorporación de la planificación y calificación de terrenos, se garantiza un desarrollo turístico adecuado a la capacidad turística del ecosistema.
  • El turismo estimula mejoras en el transporte, las telecomunicaciones y otras infraestructuras comunitarias básicas.
  • El turismo crea instalaciones de esparcimiento que pueden ser usadas por las comunidades locales o por los visitantes nacionales extranjeros. También estimula y contribuye a costear la conservación de los yacimientos arqueológicos, edificios y barrios históricos.
  • El turismo estimula el uso productivo de terrenos marginales para la agricultura, permitiendo que grandes extensiones sigan cubiertas de su vegetación natal.
  • El turismo refuerza la autoestima comunitaria y ofrece la oportunidad de un mejor entendimiento y comunicación entre pueblos de diferente base cultural.
  • El turismo sostenible, desde el punto de vista del medio ambiente, pone de relieve la importancia de los recursos naturales y culturales para el bienestar económico y social de una comunidad y puede contribuir a preservarlos.
  • El turismo sostenible vigila, evalúa y gestiona los impactos del turismo, desarrollo métodos fiables de seguimiento ambiental y contrarresta cualquier efecto negativo. (“The Internacional Ecoturism Society. Una guía simple sobre certificación de turismo sostenible y ecoturismo,” 2004:35)

Sin dudas, el desarrollo sostenible requiere de la promoción de valores que fomenten el consumo ecológicamente posible a largo plazo al que toda la población mundial pueda aspirar razonablemente. Desde la perspectiva del turismo, la visión más pragmática es intentar compatibilizar la conservación de los recursos naturales y el crecimiento económico. Este análisis permite darse cuenta que el proceso de formación y de la evolución del pensamiento en materia de turismo está mediado por varios factores de interés de la comunidad académica y su implicación en la sociedad. Formar ambientes educativos de calidad para la enseñanza del turismo implica aguzar los sentidos en el estudio, la investigación, la instrucción que en la actualidad comparten un sin número de relaciones entre el hombre y su trabajo, la modernización de la sociedad y paralelamente de la educación.
Hay una relevante importancia de la  sostenibilidad dentro del papel de la educación. Como señala la UNESCO:
El Decenio de las Naciones Unidas para la educación con miras al desarrollo sostenible pretende promover la educación como fundamento de una sociedad más viable para la humanidad e integrar el desarrollo sostenible en el sistema de Enseñanza escolar a todos los niveles. El Decenio intensificará igualmente la cooperación internacional en favor de la elaboración y de la puesta en común de prácticas, políticas y programas innovadores de educación para el desarrollo sostenible. (Novo, 2006b)
Tal definición se propone impulsar una que contribuya a una correcta percepción de la sociedad que genere actitudes y comportamientos responsables y prepare para la toma de decisiones fundamentadas (Aikenhead, 1985) dirigidas al logro de un desarrollo culturalmente plural y físicamente sostenible (Delors, 1996; Cortina, Escamez, Llopis, y Ciurana, 1998).
La educación para un futuro sostenible habría de apoyarse, cabe pensar, en lo que puede resultar razonable para la mayoría, sean sus planteamientos éticos más o menos antropocéntricos o biocéntricos. (García, 1999). Por tal motivo se precisa una educación que ayude a contemplar los problemas ambientales y del desarrollo en su globalidad (Tilbury, 1995; Luque, 1999; Duarte, 2006), teniendo en cuenta las repercusiones a corto, medio y largo plazo, tanto para una colectividad dada como para el conjunto de la humanidad y nuestro planeta (Novo, 2006a; Mattar, 2012).  En tal sentido el turismo como industria debe comprender que no es sostenible un éxito que exija el fracaso de otros, donde se hacen eminentes transformaciones que este sector implica en su interacción con la sociedad  que  transforma.

  • La integración de saberes en la enseñanza del turismo en función del desarrollo sostenible.

A inicios del pasado siglo varias universidades europeas contaban ya con cátedras de turismo. En los Estados Unidos las carreras relacionadas con el turismo en las universidades se desarrollaron un poco más tarde (Jafari, 2005). La oferta educativa actual cubre varios intereses que van desde elementales cursos de turismo para todas las edades hasta diversas diplomaturas y licenciaturas universitarias. Desde hace varios años, diversas universidades han ampliado sus programas de doctorado en materias como educación, recreación y planificación regional y urbana para incluir el turismo y unas pocas están ofreciendo doctorados en turismo de un modo independiente. Al decir de Jafari (2005) la cientificación del turismo en los  programas de enseñanza y las lecciones escritas sobre turismo revelan que esta verdadera materia multidisciplinar está experimentando una creciente popularidad tanto en número de centros como en áreas de enseñanza e investigación.
En la realidad actual de los países de América Latina, las teorías y métodos propios relacionados con el turismo son utilizados también por aquellas disciplinas que contribuyeron generosamente en el pasado al desarrollo del corpus científico del turismo (Hayden, 2008). El turismo cuenta una característica especial y única ya que es el fenómeno que permite que los individuos puedan ponerse en contacto de un modo inmediato con las transformaciones sociales, debido al avance del conocimiento sobre su lugar en la sociedad y en la economía.
Algunas asociaciones profesionales han creado grupos interesados en el turismo que cuentan con una estructura orgánica formal (carreras, cursos de postgrado, y otros planes de estudio encargados de la formación de nuevos grupos de interés relacionados con la antropología, la ecología, la economía, la historia, el ocio, el marketing, la gestión empresarial, las ciencias políticas, la psicología y otras ciencias). (Novo, 2006b)
En tal sentido la carrera de Ingeniería en administración Turística de la Universidad Técnica Estatal de Quevedo, Los Ríos, Ecuador, tiene en este sentido una gama amplia de posibilidades en función no sólo de la diversificación de los servicios destinados al turismo, sino de las actividades emergentes del sector en los ámbitos pública, privada y social. En la Malla Curricular (2005) y el Plan de Estudios (2005) de dicha carrera están directamente relacionados los elementos que se orientan en la teoría y la práctica del turismo.
Uno de los temas principales es el de la formación/educación este tema es empleado para sugerir el conocimiento del turismo como totalidad y en sus dos campos, el de la teoría y el de la práctica, puede guiar al objetivo del desarrollo de los recursos humanos presentes y futuros. Su misión se orienta a la formación y educación (la culminación de sus funciones investigadoras y académicas) como tarea esencial en la formación de profesionales competentes con la realidad social del Ecuador.
El análisis del contexto y del mercado laboral turístico de Ecuador, permiten señalar que hay necesidad de incorporar a las currículos educativos elementos que permitan aportar profesionales capaces de investigar, interpretar y reconstruir los fenómenos turísticos acorde a las necesidades sociales cubriendo expectativas del turísticas: de ocio, tiempo libre y recreación y perfilando la generación de un desarrollo sostenible en su entorno local, regional, nacional e internacional propiciando la convivencia humana, la capacitación y utilización de herramientas metodológicas, técnicas de comunicación y la planificación, promoción, distribución y ventas de productos y servicios turísticos, así como la gestión, diseño, ejecución y evaluación de planes y programas turísticos.
En tal sentido se propone una estrategia que visualice la inclusión de las disciplinas de la carrera de Ingeniería en administración Turística; desde una perspectiva interdisciplinar resolviendo las necesidades sociales desde la integración de saberes en la enseñanza del turismo desde el desarrollo sostenible. Dicha estrategia es resultado de la búsqueda y estudio de los modelos curriculares en la formación de profesionales. En esta investigación se asume el Modelo de los Procesos Consientes basado en la Teoría Didáctica y el trabajo con las categorías didácticas cuyo representante es el Dr. Carlos Álvarez de Zayas (1996, 1999).
Etapa Organizativa:
La  estructura organizativa permite al estudiante abordar todos los temas de las diferentes asignaturas que comprenden las disciplinas de Praxis profesional, Fundamentos Teóricos, Epistemología y Metodología de la Investigación con Integración de Saberes Contextos y Culturas.
La Praxis Profesional como disciplina integradora del Plan de Estudio de esta carrera (2005) tiene como punto de partida el objeto de trabajo del egresado que se centra en el estudio de la gestión turística y su vinculación con la sociedad. A partir de la realidad de los procesos culturales que ocurren en diferentes contextos sociales en los que la industria turística tiene acción transformadora. Especialmente aquellos que inciden en el incremento de la calidad de la vida colectiva, el fortalecimiento de la  identidad cultural y la capacidad de participación de la población en dichos procesos.
Así mismo, desde los campos de acción tiene como estrategia principal, a partir de la integración de todas las disciplinas, desarrollar competencias profesionales (saber, saber hacer, querer hacer, saber estar, poder hacer y saber ser) para la gestión de administración de empresas turísticas, gestión hotelera, gestión de la calidad, gestión de alimentos, gestión de técnicas de guiar y emprendimiento;  que los egresados aplicarán desde instituciones, organizaciones, comunidades, empresas y otras entidades del sector turístico.
Partiendo de los modos de actuación propios de la profesión será necesario, desde la disciplina integradora, desarrollar una sensibilidad especial por la diversidad cultural y una actividad práctica, cognoscitiva, valorativa y comunicativa. Ello será sustentado   en una consecuente labor científico-investigativa y una actitud de compromiso con el desarrollo social y de coordinación de los esfuerzos de los diferentes saberes  con enfoque transdisciplinar.
Para ello se deberá establecer la interrelación adecuada entre los componentes académico, investigativo y laboral para que los estudiantes puedan participar activamente en el análisis y la aplicación  de estos presupuestos teórico -  metodológicos en las instituciones, organizaciones y empresas. Los futuros profesionales deben ser capaces de potenciar la acción turística desde el desarrollo sostenible del sector y de la sociedad en sí.
Para ello cada forma en que se organice la docencia debe orientarse o al menos acercarse a lo que a continuación se propone.
Introducción: Se realiza una introducción a la asignatura donde se aborda el OBJETO DE ESTUDIO de la asignatura según corresponda con una o varias disciplinas de la carrera.
Objetivos: Se exponen los Objetivos Generales Educativos e Instructivos de la asignatura que se proponen alcanzar en el curso.
Sistema de Habilidades: el Sistema de Habilidades será le brindado a los estudiantes, debe estar en correspondencia con los objetivos y los contenidos de la misma.
Temas: Se abordan los temas de la asignatura con la siguiente estructura organizativa.
Objetivo del tema: Estos objetivos del tema tributan a los objetivos generales de la asignatura.
Contenido del tema: Se enumeran los contenidos del tema que se explicarán, siguiendo los mismos una secuencia lógica atendiendo a su complejidad y al libro de texto que utilizarán a lo largo del curso.
Orientaciones Generales: Estas orientaciones generales tienen la característica de ir guiando al alumno en su proceso de aprendizaje, se puntualizan las referencias bibliográficas y se enfatiza en el estudio de conceptos, leyes, principios, ya debatidos en las conferencias que se programen.
Apropiación y aplicación de conocimientos: En esta fase el estudiante se enfrentará a situaciones reales sencillas en la que por sí solo puede darle solución ya que a través de las conferencias se ha explicado algunas de ellas. Estas situaciones le sirven de preparación para las clases de ejercitación en la que los estudiantes presentarán los resultados obtenidos y las dificultades que se le presentaron en la solución de la misma. En estas clases de ejercitación el estudiante tiene la posibilidad de apropiarse del método y dar solución a los problemas reales que se planteen, ya sea durante el estudio independiente o en los ejercicios conjuntos en la clase. Aclarar que este estudio independiente los debe remitir al trabajo en el campo de estudio.
Problemas Propuestos con variantes individuales: Estarán concebidos de forma tal que cada estudiante resuelva una situación problemática, más compleja que las anteriores y tendrá que realizarlo individualmente. Se puede apreciar que el estudiante estará en condiciones de poder resolver situaciones problemáticas reales  mucho más complejas, ya que ha estudiado y puesto en práctica el método de solución de problemas en un gran número de variantes. Ya el estudiante ha alcanzado un nivel de asimilación de los contenidos y una sistematización en su aprendizaje.
Etapa Final: Problema Integrador
La situación problémica que se le presenta tendrá un nivel más profundo y complejo e incluso a medida que se vaya adentrándose en cada una de las asignaturas se irán combinando los métodos de análisis y tendrán que aplicar conocimientos y habilidades ya aprendidas en los diferentes temas. Esto implica que el estudiante se retroalimente de lo ya estudiado y aprehendido. Los estudiantes estarán insertados en una institución del sector turístico en acción de su práctica pre-profesional, de forma que propicie la elevación de la calidad de su formación, con el dominio de un conjunto de herramientas que le permitirán contribuir con la transformación del entorno en el que desempeñe su labor.
Por la complejidad de esta inmersión del estudiante en el plano laboral se irá evaluando y controlando al estudiante paso a paso. Esto le ayuda a que desarrolle habilidades y valores, no solo profesionales, sino de la especialidad. El estudiante antes de enfrentarse a un Problema Integrador ha sido entrenado y las cargas se le han ido aumentando paulatinamente.
La combinación de diversas formas de enseñanza-aprendizaje, a partir del principio del intercambio de saberes entre los diferentes actores sociales y el incremento de la actividad académica no presencial del estudiante, le permitirá ir  ganando en independencia de acción, así como transitar por diferentes dimensiones de su objeto de estudio y de trabajo. Todo lo anterior le permitirá irradiar desde la actividad universitaria hacia las instituciones y comunidades en las que se inserte, estimulando el papel protagónico de éstas y potenciando el desarrollo sostenible del turismo en las sociedades que interactúa.
Por su parte la disciplina integradora propiciará los presupuestos fundamentales para el desempeño de los egresados en su profesión futura, cuyos empleadores  principales serán instituciones, organizaciones y empresas cuyo encargo social estará encaminado a la coordinación, la planificación y la participación en la aplicación de las políticas en cuanto a la multiplicidad de los procesos turísticos. En el caso de que algún estudiante no demuestre en su trabajo y disertación que domina estos conocimientos y habilidades, entonces se le dará otra situación problémica con un grado de dificultad similar después de haber aclarado individualmente las dudas con el profesor.
A modo de conclusión
La implementación de dicha estrategia de una forma más profunda en los estudiantes de  Ingeniería en administración Turística de la Universidad Técnica Estatal de Quevedo, Los Ríos, Ecuador permitirá crear nuevos grupos profesionales interesados en el turismo; aumentará el patrocinio de seminarios y congresos. Está claro que con tal concurrencia de medios tendrá el conocimiento del turismo indudablemente la oportunidad de hacer avanzar su discurso multidisciplinar y transdisciplinar utilizando la universidad como centro rector que potencie el crecimiento de profesionales competentes e integrales.
Con esta iniciativa la Universidad seguirá aumentando el número de títulos medios y superiores en este campo. Muchas de ellas ofrecerán sus programas de estudio de turismo en otros Departamentos universitarios, como los dedicados a las ciencias sociales, las primeras que ofrecieron cursos de turismo, ofrecían al principio cursos elementales y después de grado medio y superior. Sin dudas las mallas curriculares incluirán titulaciones básicas de turismo con opciones en especialidades como gestión hotelera, marketing,  planificación y desarrollo, administración pública, turismo en países en vías de desarrollo y turismo internacional, por solo citar algunas que ya están comprendidas en dicha carrera pero que perfectamente tienen espacio en otras de las ciencias sociales.
Ampliar vertical y horizontalmente la ciencia devuelve a las facultades de turismo la obligación de utilizar el conocimiento y contribuir productivamente a su crecimiento. Esta perspectiva es ya una realidad en todas las disciplinas consolidadas de la carrera pero que requiere un mayor esfuerzo en su implementación para que ocupe  una posición más prominente en cuanto a la conservación, la promoción y la adopción de decisiones sostenibles y favorables a la humanidad.
Referencias bibliográficas
Aikenhead, G. (1985). Collective decision making in the social context of science. Science Education, 69(4), 453-475.
Álvarez de Zayas, C. (1996): “Hacia una escuela de excelencia”. Editorial Academia, La Habana, Cuba.
Álvarez de Zayas, C. (1999): “La escuela en la vida”. Editorial Ciencias Sociales, La Habana, Cuba.
Arana Ercilla, M., & Valdés Espinosa, R. (2006). Tecnología apropiada: Concepción para una cultura. In Tecnología y Sociedad (Segunda Edición., pp. 19–30). La Habana: Editorial Félix Varela.
Brandwaiman, Mara A. La Fundación Bariloche y el terrorismo de estado: voces, silencios y resistencias. (1976-1983. En VIII Reunión de Antropología del Mercosur (VIII RAM): Diversidad y  poder en América Latina. Instituto de Formación Docente Continua (IFDC) San Carlos de Bariloche.
Cisneros, M. (2014). El turismo sostenible y su relación con el desarrollo local.
 Freyre, F. (2006). Bioética y Desarrollo Sostenible. En Tecnología y Sociedad. GEST
     (Segunda Edición., págs. 232-243). Editorial Félix Varela: La Habana.  
Coriolano, L. (2003) Os limites do desenvolvimiento e do turismo. Pasos. Revista de Turismo y Patrimonio Cultural 1(2): 161– 171. Disponible en http://www.pasosonline.org/Publicados /1203/PS040603.pdf. Visitado el 25 de enero de 2017
Conferencia de la Organización de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo. (1992). Presented at the Cumbre de la Tierra, Brasil.
Conferencia de la Organización de Naciones Unidas sobre  Desarrollo Sostenible. (1999). Presented at the Séptima sesión del comité de Turismo Sostenible.
Cortina, A., Escamez, J., Llopis, J. A. Y Ciurana, J. C. (1998). Educar en la justicia. Valencia: Generalitat Valenciana.
Delors, J. (Coord.) (1996). La educación encierra un tesoro. Informe a la UNESCO de la Comisión Internacional sobre la educación para el siglo XXI. Madrid: Santillana. Ediciones UNESCO.
Díaz, M. (2006). Compendio. El sistema de turismo, elementos conceptuales. Granma: FORMATUR.
Duarte, C. (Coord.) (2006). Cambio Global. Impacto de la actividad humana sobre el sistema Tierra. Madrid: CSIC.
García, I. (1999). El sistema Tierra y el efecto invernadero, Alambique, 20, 75-84. Goelnerd, C.; Richie, J.  Y McIntoch, W. (2002). Turismo: Principios, Prácticas y Filosofías. Porto Alegre: Bookman.
Hayden, T. (2008). 2008 El estado del planeta. National Geographic España. Madrid: RBA
Jafari, J. (2005, July). La cientificación del turismo. Contribuciones a La Economía. Retrieved from http://www.eumed.net/ce/
Malla Curricular de la Carrera Ingeniería en Administración Turística. UTEQ. (2015).
MATTAR, E. (2012). Políticas públicas para un consumo más sostenible. En Worldwatch Institute La situación del mundo 2012. Hacia una prosperidad sostenible. Barcelona: Icaria.
Moreira, M.; Prevot, R. y Micaela, L. (2010). ¿Cuál es el papel del turismo en el desarrollo local? Un análisis crítico del cluster turístico de Santa Teresa – RJ, Brasil, 19(No. 5).
Novo, M. (2006a). El desarrollo sostenible. Su dimensión ambiental y educativa. Madrid: UNESCO-Pearson.
Novo, M. (2006b). El desarrollo local en la sociedad global: Hacia un modelo “local” sistémico y sostenible. En MURGA MENOYO, M. A. (Coordinadora). Desarrollo local y Agenda 21. Madrid: UNESCO-Pearson.
Luque, A. (1999). Educar globalmente para cambiar el futuro. Algunas propuestas para el centro y el aula. Investigación en la Escuela, 37, 33-45Peñaloza y Tamayo. (2006). Ambientes Educativos de Calidad para la Enseñanza del Turismo. Presented at the IV SeminTUR – Seminario de Pesquisa en Turismo do MERCOSUL Universidad de Caxias do Sul, Brasil.
Pere F. y Ayuso S. (2003). Turismo sostenible. Barcelona.
Plan de Estudio de la Carrera Ingeniería en Administración Turística. UTEQ. (2015).
Resolución aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas. (2005).
Soler, O. (2004). El Turismo en Cuba I. La Habana: Ediciones Balcón.
Tilbury, D. (1995). Environmental education for sustainability: defining de new focus of environmental education in the 1990s. Environmental Education Research, 1(2), 195-212.
The Internacional Ecoturism Society. Una guía simple sobre certificación de turismo sostenible y ecoturismo. (2004). Washington.
Troncoso, B. (2012). Propuesta para una política de desarrollo turístico sostenible. Retrieved from http://kiskeya-alternative.org/publica/bolivar/desarrs.html
Vilches, A., Gil Pérez, D., Toscano, J.C. Y Macías, O. (2017). «Educación para la sostenibilidad» [artículo en línea]. OEI. ISBN 978-84-7666-213-7. http://www.oei.es/decada/accion.php?accion=004

* Magister en Educación a Distancia y Abierta, Licenciada en Ciencias de la Educación. Coordinadora de las Carreras de: Licenciatura en Secretariado Ejecutivo en Técnicas Informáticas e Ingeniería en administración Turística y Empresas de Recreación de la UTEQ. Directora del Proyecto “Desempeño laboral y rendimiento académico de los estudiantes de la Universidad Técnica Estatal de Quevedo, Los Ríos, Ecuador”, de FOCICYT 2017-2018.

** Licenciada en Psicología. Magister en Gerencia en Procesos Educativos Innovadores. Asesora y Consultora Local del Proyecto Prevención Fronteras de la Epidemia del VIH/SIDA. Profesora de la universidad Técnica Estatal de Quevedo, Ecuador. Correo: msolis@uteq.edu.ec

*** Magister en Gestión de la Educación mención en educación media. Especialista en diseño curricular Diplomado Suprior en Gestión Prospectiva de la Educación, Licenciada en Ciencias de la Educación mención Idiomas (Inglés – Frances) Profesora de Segunda enseñanza especialización Inglés – Frances. Docente: Unidad Educativa “24 de Mayo”, Universidad Técnica Estatal de Quevedo


Recibido: 13/03/2017 Aceptado: Junio de 2017 Publicado: Julio de 2017

Nota Importante a Leer:

Los comentarios al artículo son responsabilidad exclusiva del remitente.
Si necesita algún tipo de información referente al articulo póngase en contacto con el email suministrado por el autor del articulo al principio del mismo.
Un comentario no es mas que un simple medio para comunicar su opinion a futuros lectores.
El autor del articulo no esta obligado a responder o leer comentarios referentes al articulo.
Al escribir un comentario, debe tener en cuenta que recibirá notificaciones cada vez que alguien escriba un nuevo comentario en este articulo.
Eumed.net se reserva el derecho de eliminar aquellos comentarios que tengan lenguaje inadecuado o agresivo.
Si usted considera que algún comentario de esta página es inadecuado o agresivo, por favor, escriba a lisette@eumed.net.
Este artículo es editado por Servicios Académicos Intercontinentales S.L. B-93417426.