Contribuciones a las Ciencias Sociales
Mayo 2012

AGRUPACIONES HUMANAS ATENDIENDO A SU ESTRUCTURA ORGANIZATIVA

 

Diosveldy Navarro Lores (CV)
diosveldy@fcs.cug.co.cu
Universidad de Guantánamo

 

 

Resumen

La agrupación humana como categoría ha sido definida por innumerables estudiosos. En las diferentes definiciones se ha hecho referencia a las características de las distintas agrupaciones humanas y se han clasificado atendiendo a diferentes criterios.

Actualmente, atendiendo a la estructura organizativa y al sentido de pertenencia de sus miembros, existen tres formas de agruparse los seres humanos: los colectivos humanos, con un alto nivel de organización; los grupos humanos con nivel de organización promedio y la chusma o lumpen con un elevado nivel de desorganización.

Los colectivos humanos se aglutinan en torno a objetivos y metas de alto significado social, y conforman hermandades religiosas, asociaciones científicas, laborales, partidos políticos, etc. Los grupos humanos se aglutinan en torno a metas e intereses compartidos de alto significado personal, y conforman grupos primarios (familia, círculo de amigos, grupo clase), grupos secundarios (sindicatos, equipos de trabajo), etc. La chusma, lumpen, escoria, etc, se caracteriza por la dispersión social. Formada por los elementos degradados, desclasados y no organizados, así como aquella parte de la población que para su subsistencia desarrolla actividades al margen de la legalidad o en la marginación social (delincuencia, prostitución, narcotráfico, juegos, etc).

Esta última agrupación humana informe, constituye la materia prima que utilizan muy oportunamente los poderes públicos en los diferentes sistemas políticos para que realicen el “trabajo sucio”. A través de ella ven la luz el mercenarismo, las mafias, el paramilitarismo,  las pandillas, las maras, los “ejércitos de reserva”. De manera lamentable también, en esta agrupación humana prevalece la ley del más fuerte y se crea caldo de cultivo para la gestación de casos de violencia, asesinatos, secuestros, saqueos y terrorismo.

Palabras claves

agrupación humana, necesidades, colectivos humanos, grupos humanos, chusma, lumpen, escoria, mercenarismo, mafia, paramilitarismo,  pandillas, maras, “ejércitos de reserva”, violencia, asesinatos, secuestros, saqueos, terrorismo




Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato:
Navarro Lores, D.: "Agrupaciones humanas atendiendo a su estructura organizativa ", en Contribuciones a las Ciencias Sociales, Mayo 2012, www.eumed.net/rev/cccss/20/

Desarrollo

La agrupación humana como categoría ha sido definida por innumerables estudiosos. Sociólogos, psicólogos, políticos, pedagogos, filósofos, entre otros  han hecho referencia a las características de las distintas agrupaciones humanas y las han clasificado atendiendo a diferentes criterios.

Actualmente, atendiendo a la estructura organizativa y al sentido de pertenencia de sus miembros, existen tres formas de agruparse los seres humanos. Una, en un primer estadio, informe, con un alto nivel de dispersión, unión temporal, situacional y esporádica, sin objetivos ni metas comunes, sin liderazgo, sin estructura organizativa ni normas. A esta agrupación humana en diferentes geografías se le denomina plebe, vulgo, escoria, lumpen, chusma, etc. Su filosofía básica es la sobrevivencia y su jerarquía de necesidades se mantiene en la base de la pirámide propuesta por Maslow: Necesidades fisiológicas: respiración, alimentación, descanso, sexo, homeostasis. 1

Otra, en un segundo estadio, con determinado nivel de organización. Sus miembros comparten metas y objetivos comunes, permanecen juntos períodos estables de tiempo, conforman estructuras formales e informales de dirección, predomina la “unión por afinidad”. A esta agrupación humana en diferentes geografías y en la literatura científica se le denomina grupo humano. Su filosofía básica es la convivencia y su jerarquía de necesidades alcanza los dos peldaños siguientes de la pirámide propuesta por  Maslow: Necesidades de seguridad y protección; Necesidades de pertenencia, afecto, amor y amistad2 .

Una tercera con un elevado nivel de organización. Sus miembros comparten metas y objetivos comunes, permanecen juntos períodos estables de tiempo, conforman estructuras formales e informales de dirección. A esta agrupación humana en diferentes geografías y en algunas fuentes bibliográficas se le denomina colectivo humano. Su filosofía básica es la solidaridad y su jerarquía de necesidades alcanza los peldaños superiores de la pirámide propuesta por  Maslow: Necesidades de autoestima, autovalía, éxito y prestigio; Necesidades de autorrealización, de lo que uno es capaz, autocumplimiento.3

En esta última agrupación humana se cultivan entre sus miembros altos valores humanos y universales: solidaridad, humanismo, responsabilidad, honestidad, colaboración, entre otros. Su membresía muestra una alta preocupación por su capacitación profesional, alto sentido de pertenencia, capacidad de autodirección, potencian la unidad y la cohesión, son reacios al chisme, el rumor, la cizaña y la manipulación, recursos que no encuentran en ella terreno fértil. Socializan conocimientos, inquietudes, criterios. Se preocupan por obtener elevados índices de respeto, cooperación, ayuda mutua, etc.

La vida de sus miembros se traduce en la búsqueda constante del éxito, la felicidad, el bienestar y para lograrlo recurren a sus capacidades y habilidades personales y colectivas. Se desviven por la realización de actividades socialmente útiles. Su energía psicológica la externalizan esforzándose en ser útiles a los demás, lo que pone de manifiesto el alto significado social de sus actos. Se aglutinan en torno a objetivos y metas de alto significado social, y conforman hermandades religiosas, asociaciones científicas, laborales, partidos políticos, etc.

La segunda forma de agrupación humana, o sea, el grupo humano, es proclive a potenciar la fragmentación social. Marcada tendencia a la formación de subgrupos informales, como piñas, clanes, islas, atendiendo a la afinidad entre la membresía. O sea, las personas honestas y trabajadoras se agrupan en torno a un líder formal o informal, las indiferentes y pasivas se agrupan en torno a otro posible líder, etc.

Los miembros de las diferentes estructuras informales muestran una alta preocupación por una convivencia tolerable, la existencia de climas psicológicos favorables, espíritu de respeto mutuo, poseen ciertos niveles de capacidad para autodirigirse, se esfuerzan por lograr la unidad y la cohesión, algo que no cristaliza en todos los casos, pues son pasto fácil del chisme, el rumor, la cizaña y la manipulación.

Esto último genera una atmósfera constante de duda, incertidumbre, indecisión, vacilación, perplejidad, titubeo y fluctuación entre los miembros de las diferentes estructuras informales. Por otro lado, es poco frecuente la socialización de conocimientos, inquietudes, criterios.

En esta forma de agrupación humana se hacen esfuerzos por cultivar valores humanos y universales entre sus miembros: solidaridad, humanismo, responsabilidad, honestidad, colaboración, laboriosidad, entre otros. Se esfuerzan también en lograr índices de respeto, cooperación, ayuda mutua, etc que no en todos los casos cristalizan. Su vida se traduce en la búsqueda constante del éxito, la felicidad, el bienestar, aunque a diferencia de la anterior, recurren a cualquier medio para lograrlo, incluso, algunos llegan hasta el extremo de condicionar su éxito al fracaso de otros.

Se desviven por realizar actividades que les proporcionen ventajas personales. Su energía psicológica la externalizan esforzándose en vivir y convivir adecuadamente. En este sentido, los miembros ponen de manifiesto el alto significado personal de sus actos. Se aglutinan en torno a metas e intereses compartidos de alto significado personal, y conforman grupos primarios (familia, círculo de amigos, grupo clase), grupos secundarios (sindicatos, equipos de trabajo), etc.

La primera forma de agrupación humana, o sea, la plebe, chusma, lumpen, escoria, etc, se caracteriza por la dispersión social. Formada por los elementos “(…) degradados, desclasados y no organizados, así como aquella parte de la población que para su subsistencia desarrolla actividades al margen de la legalidad o en la marginación social (delincuencia, prostitución, narcotráfico, juegos, etc)” 4.

Generalmente, se consideran apolíticos, no les interesa quién tiene o no el poder, no les preocupan los cambios, ni el progreso ni el estancamiento, “(…) muchos luchan o participan en conflictos por obtener beneficios económicos y personales, normalmente tienen poca o nula consideración en la ideología, nacionalidad o preferencias políticas con el bando para el que lucha”5 , “(…) por norma, profesan absoluta lealtad a sus señores, y cuando su amo es derrotado, el vencedor los incorpora a su propio ejército sin problemas ya que, mientras haya suficiente alimento y puedan participar de los botines, siguen fielmente y sin quejas a sus cambiantes señores”6 .

A los mismos no les interesa si la convivencia es o no soportable, si los climas psicológicos son o no favorables, no les interesa tampoco lograr la unidad y la cohesión. Esto genera la presencia eterna de transgresiones de las normas sociales, la indisciplina, la independencia. No se preocupan por la adquisición de conocimientos, ni por su capacitación, ni por cultivar valores humanos. En este sentido, los individuos ponen de manifiesto el alto sentido egoísta, irracional e inhumano de sus actos.

Carlos Marx caracterizó a esta capa social más baja y sin conciencia de clase, en el capítulo V de su libro "El 18 brumario de Luis Bonaparte":

“(…) Junto a roués arruinados, con equívocos medios de vida y de equívoca procedencia, junto a vástagos degenerados y aventureros de la burguesía, vagabundos, licenciados de tropa, licenciados de presidio, huidos de galeras, timadores, saltimbanquis, lazzaroni, carteristas y rateros, jugadores, alcahuetes, dueños de burdeles, mozos de cuerda, escritorzuelos, organilleros, traperos, afiladores, caldereros, mendigos, en una palabra, toda esa masa informe, difusa y errante (…) en cuanto que todos sus componentes sentían, (…), la necesidad de beneficiarse a costa de la nación trabajadora.”7
La vida de estos individuos se traduce en la búsqueda constante de medios para sobrevivir, incluso, hasta el extremo de hacerlo en una virtual carrera de lobos, en la que cada cual trata de devorar al que se le interponga. Su energía psicológica la externalizan esforzándose en sobrevivir aunque sea a costa de la destrucción de los que le rodean, acciones por las que en ocasiones reciben honorarios.
Por estas razones, constituyen la materia prima que utilizan muy oportunamente los poderes públicos en los diferentes sistemas políticos para que realicen el “trabajo sucio”. Generalmente “(…) vagan como hordas de saqueadores por todo el territorio, no muestran intención de disolverse y volver a sus tierras de origen, pues para ellos “patria” se convierte en aquel lugar en donde conflicto y botín coinciden” 8.
En este sentido, ven la luz el mercenarismo, las mafias, el paramilitarismo,  las pandillas, las maras, los ejércitos de reserva. Existen y existirán a contrapelo de lo que los gobiernos implementen para su control. Sobreviven al  margen de los mecanismos de control social, pues son astutos, sumisos y obedecen ciegamente a la clase poderosa que los manipula, les proporciona alimentos y les permite participar de los botines.
De manera lamentable también, en esta agrupación humana prevalece la ley del más fuerte y se crea caldo de cultivo para la gestación de casos de violencia, asesinatos, secuestros, saqueos y terrorismo.
Bibliografía consultada

  1. http://es.wikipedia.org/wiki/Pirámide_de_Maslow

  2. http://es.wikipedia.org/wiki/Lumpen

  3. http://pepoladas.over-blog.es/article-35573663.html

  4. http://www.westfr.de/conrad/. Mercenarios y aventureros blancos en África central

  5. Marx,  Karl. El 18 brumario de Luis Bonaparte.  Capítulo V.

1 http://es.wikipedia.org/wiki/Pirámide_de_Maslow

2 Ibidem

3 http://es.wikipedia.org/wiki/Pirámide_de_Maslow

4 http://es.wikipedia.org/wiki/Lumpen

5 http://pepoladas.over-blog.es/article-35573663.html

6 http://www.westfr.de/conrad/. Mercenarios y aventureros blancos en África central.

7 Ver Capítulo V, cuarto párrafo, de "El 18 brumario de Luis Bonaparte" de Karl Marx

8 http://www.westfr.de/conrad/ Mercenarios y aventureros blancos en África central.