Revista: Caribeña de Ciencias Sociales
ISSN: 2254-7630


PROCEDIMIENTO METODOLÓGICO INTEGRADO PARA EL FOMENTO DEL PENSAMIENTO ÉTICO MORAL EN LA FORMACIÓN DE PROFESIONALES AGRÍCOLAS

Autores e infomación del artículo

Yanni Moreira Rodríguez

Osmany Guzmán Simón

CUM Imías

yannimr@cug.co.cu

RESUMEN
José Martí el más célebre de nuestros pensadores, integra los principios educativos; moral, deber y justicia social, a la evolución del pensamiento educativo, planteo la necesidad de formar  un hombre nuevo integral multifacético, crítico, con cualidades morales elevadas, creador, capaz de defender los ideales revolucionarios. De ahí la necesidad de formar un profesional agrícola  con conocimientos acerca  de la ciencia y la técnica, y cada una de las asignaturas que recibe de manera que desarrolle verdaderas cualidades ético- morales, y valores creativos de amor a la naturaleza y cuidado del medio ambiente por lo que este trabajo propone procedimiento metodológico integrado  para el fomento del pensamiento ético moral en la formación de profesionales agrícolas.
  
 Palabras clave: pensamiento,  ético, moral, valores.

SUMMARY  
José Martí the most illustrious in our thinkers integrates the moral educational principles, duty and social justice, to the evolution of the educational thought, I outline the necessity to form a multifaceted, critical integral new man, with high moral qualities, creator, able to defend the revolutionary ideals. Of there the necessity to form an agricultural professional with knowledge about the science and the technique, and each one of the subjects that receives so that it develops ethical true qualities - moral, and creative values of love to the nature and care of the environment for what this work proposes methodological procedure integrated for the development of the moral ethical thought in the formation of agricultural professionals.

Key words: ethical – moral – thought - values.


Para citar este artículo puede uitlizar el siguiente formato:

Yanni Moreira Rodríguez y Osmany Guzmán Simón (2016): “Procedimiento metodológico integrado para el fomento del pensamiento ético moral en la formación de profesionales agrícolas”, Revista Caribeña de Ciencias Sociales (enero 2016). En línea: https://www.eumed.net/rev/caribe/2016/01/formacion-agricola.html


INTRODUCCIÓN.

La revolución cubana ha logrado poner en su justo lugar el ideario educativo cubano, su fin fundamental es la preparación y formación del hombre que enfrentará las exigencias científicas y tecnológicas del próximo siglo. Es por ello que numerosos investigadores se han dedicado a profundizar y reflexionar sobre esta temática.
Al respecto el Che en su artículo  plantea, “se corre el peligro de que los árboles impidan ver el bosque. Persiguiendo la quimera de realizar el socialismo con la ayuda de las armas melladas que nos legara el capitalismo (la mercancía como célula económica, la rentabilidad, el interés material individual como palanca,.), se puede llegar a un callejón sin salida. Y se arriba allí tras recorrer una larga distancia en la que los caminos se entrecruzan muchas veces y donde es difícil percibir el momento en que se equivocó la ruta. Entre tanto, la base económica adaptada ha hecho su trabajo de zapa sobre el desarrollo de la conciencia. Para construir el comunismo, simultáneamente con la base material hay que hacer al hombre nuevo”.1
La formación de ese hombre nuevo y sus valores es centro de discusión y preocupación de los investigadores por constituir una temática que responde a las exigencias del desarrollo social donde el papel activo y creador del factor subjetivo se acrecienta cada vez más, este aspecto está ligado al problema de la actividad valorativa y su influencia en la actividad práctica teórica de la humanidad.
Es por ello que numerosos investigadores, incluidos los profesores universitarios, profundizan y reflexionan sobre esta temática y su influencia positiva en la formación del profesional de una determinada rama del saber ya sea un agrónomo, contador, economista,  ingeniero mecánico, ingeniero agroindustrial o un profesor dedicado a la docencia, quien con su ejemplo enseña y educa a las nuevas generaciones.
En este período de construcción del socialismo se puede ver el hombre nuevo que va naciendo. Su imagen no está todavía acabada; no podría estarlo nunca ya que el proceso marcha paralelo al desarrollo de formas económicas nuevas hoy Lineamientos de la Política Económica y Social del PCC. Descontando aquellos cuya falta de educación los hace tender el camino solitario, a la autosatisfacción de sus ambiciones, los hay, que aún dentro de este nuevo panorama de marcha conjunta, tienen tendencia a caminar aislados de la masa que acompañan. Lo importante es que los hombres van adquiriendo cada día más conciencia de la necesidad de su incorporación a la sociedad y, al mismo tiempo, de su importancia como motores de la misma.
El Dr. Rigoberto Pupo analiza la categoría actividad y establece una dialéctica de su desarrollo, donde la relación sujeto - objeto, las formas del conocimiento, la práctica y por último la actividad axiológica a la que el hombre llega en su recorrido valorativo, de ahí que, haga el valor suyo o no, que se convierta en verdad para él, consideramos que este enfoque es de gran importancia para el estudio de los valores.
José Agustín Caballero fue un impulsor de la necesidad de la formación ética de los alumnos; elemento que consideramos de vital importancia para el desarrollo de la personalidad de nuestros jóvenes profesionales y que marcan el camino necesario para su actuación en la vida y en su profesión.
 Félix Varela al afirmar que el fin de la educación era lograr la formación integral del hombre, pero sobre la base de los valores éticos, su pensamiento va más allá, al colocar la actividad formativa de los valores morales y de los ideales políticos como base del desarrollo de la conciencia de libertad.
Al decir de Fernando Ortiz “no basta para la cubanidad llegar a tener en Cuba la cuna, la nación, la vida y el parte aún falta tener la conciencia de ser cubano y voluntad de quererlo ser.” Esa cubanidad fue la que impulsó la lucha revolucionaria durante la República Neocolonial expresada en el desarrollo del movimiento obrero estudiantil y comunista en su lucha continua de búsqueda de unidad y el desarrollo del factor subjetivo, fue un proceso rico en ejemplos valorizantes.
En las condiciones actuales de lucha ideológica la formación de valores adquiere un papel determinante, ya que constituyen nexos mediadores entre la teoría y la práctica y muestran los niveles alcanzados o no por la conciencia social. Ahora, bien quisiera destacar los análisis y aportes realizados por las doctoras Esther Baxter y Nancy Chacón que abordan los valores dándole una connotación educativa - formativa, valorando el papel que juega la escuela en este caso la universidad en la conformación de la personalidad de las nuevas generaciones. Y estos “... constituyen la unidad de lo objetivo y lo subjetivo, de lo emocional y lo racional, el cual se da sobre la base de la exigencia y necesidades humanas históricas concretas que se expresaran en los valores a través de los intereses individuales y sociales, aspiraciones y anhelos, por lo que constituyen una autoafirmación de la condición humana.
Plantea además una trilogía de los valores morales, dignidad humana, la intransigencia e intolerancia de todo tipo de denominación extranjera y la solidaridad humana en cada uno de ellos va agrupando los valores que se manifiestan y que plantea ir jerarquizando en el trabajo con las nuevas generaciones que consideramos muy valioso en el estudio acerca de la formación de valores.
A partir de esta valoración de los valores morales presente en muchos de sus trabajos, plantea el Proyecto de la imagen moral del joven cubano abordando las tres determinaciones que conforman esta imagen de la personalidad del joven cubano, los valores presentes en el, como revolucionario y como socialista íntimamente relacionados.
 La moralidad y valor en la formación del hombre nuevo
Martí no escatimaba oportunidad para hacer referencia a este aspecto de la cultura, como cuando escribió: "El que la nación educa, si no aprende para vil, debe, en pago, contribuir a la educación de los demás"; "tengo ante mis ojos La Protesta de Baraguá, que es de lo más glorioso..."; "la pobreza pasa, lo que no pasa es la deshonra"; "un principio justo, desde el fondo de una cueva puede más que un ejército". Incluso en ocasiones enfatizaba tanto el valor que lo resaltaba marcada y enfáticamente: "cuando la mujer culta y virtuosa anima y aplaude y unge la obra con la miel de su cariño, la obra es invencible"2 .
Los progresos humanos en materia de cultura no pueden medirse sin tener en cuenta la elevación moral de los ciudadanos y su superación ética. Una época histórica y una civilización se distinguen de otra siempre por los valores que han atesorado en su cultura. Los lemas de "igualdad, libertad y fraternidad" propugnados por la Revolución francesa, aun con las limitaciones burguesas que tan sólo muy ulteriormente les fueron atribuidas, conmovieron al mundo e iniciaron una nueva era en la historia de la humanidad; todavía hoy se recuerdan los postulados de la ilustración en que la carga ética es la principal característica del discurso.
Los hábitos humanos tienen un vínculo directo con los valores para que la cultura sea efectiva, real, sólida. Incorporar a la esfera de los hábitos buenos modales, composturas adecuadas, adquirir buenas maneras de conducirse, es la garantía de que los valores estén presentes en todos los actos humanos en todas las circunstancias, momentos y lugares. Es la única forma de poder fiar en una actuación sin dobleces, con sinceridad y transparencia; de que aun en condiciones de soledad se continúe procediendo como si hubiese jueces presentes.
Este requisito de la cultura, consistente en la imbricación necesaria de hábitos y valores tiene particular importancia, en los casos de personas cuya función es realizar actividades de servicio al pueblo cuya preparación previa no es visible por los destinatarios, por lo que ellos no pueden juzgar acerca de los requerimientos en el proceso de preparación.
Un ejemplo de ello está en los elaboradores de alimentos, quienes deben prepararlos teniendo en cuenta ciertas reglas de higiene y normas tecnológicas; ¿sería posible la actividad comercial gastronómica si no confiamos en que la conciencia de los que nos venden. Por el contrario, si nuestro elaborador realiza un examen de conciencia en el sentido de si puede por hábito, a solas, sin el control de otros, cumplir con las normas requeridas, entonces tendría derecho a decir: "tengo ese valor, tengo ese hábito, tengo esa cultura".
Se comprende claramente el nexo existente entre la moralidad y el valor, cuando a cada paso en el tratamiento del segundo se acude y se menciona a la moralidad. ¿Tendrán alguna diferencia, o se identifican?. Sería erróneo identificarlos, si bien, están en interconexión estrecha, como se ha dicho y se advierte. Pero la moralidad se distingue porque es sancionada por la opinión pública, ella rige y actúa más bien por el constreñimiento que la sociedad, el colectivo impone —aunque a diferencia del Derecho no aparecen sus preceptos en un código legal de obligatorio cumplimiento, sino que más bien, es la opinión pública quien lo sanciona.
De manera que el sistema de valores de las personas rige su conducta moral, de tal modo que no raras veces se comporta el individuo tozudo de él armado, y transgresor de ciertos patrones morales a los que ha venido obedeciendo sin la suficiente sedimentación en su sistema de valores. El sistema de valores de un pueblo de una comunidad, inspira los ideales, a las ideas. Es imposible que ideales válidos y trascendentales puedan erguirse sobre valores negativos o endebles. Juntos determinan las transformaciones sociales pertinentes en cada momento histórico. Conocido es de Martí la expresión de que “un principio justo, desde el fondo de una cueva,  puede más que un ejército”, o “trincheras de ideas valen más que trincheras de piedra”, que gala de que las convicciones legítimas.
La moral debe verse como función gnoseológica y sociológica, debe interpretarse y asumirse como concepción del mundo donde los individuos hagan suyos principios, valores y normas establecidos por la sociedad y lo más importante es que lo incorpore a su actuación.
Son normas o reglas de conducta expresadas en la manera con que las personas gobiernan su vida y dirigen sus acciones, está muy vinculado al orden social.
La experiencia práctica del desempeño de los profesionales de la agricultura ha descubierto  a través de las  preparaciones metodológicas, y recorridos algunas insuficiencias y dificultades que nos llevaron a la elaboración de este trabajo.

  •   El insuficiente nivel de independencia y creatividad en las funciones laborales de los estudiantes en la carrera. 
  • La insuficiente preparación profesional práctica de los estudiantes, no mostrando las habilidades y hábitos que se requieren para la realización adecuada de sus funciones. 
  • Limitada utilización de la información científico-técnica en la solución de los problemas de carácter local. 
  • Continúa el predominio a separar la instrucción de la educación sin aprovecharse las potencialidades del contenido para la formación de sentimientos cualidades y valores.

 De  todo lo anteriormente expuesto se deriva el siguiente.
Problema: ¿Como fomentar  el pensamiento ético moral en la formación de valores en los profesionales agrícolas?.

Si se tiene en cuenta el  carácter instructivo y educativo y los contenidos de la asignaturas del plan de estudio que recibe el agrónomo a lo largo de todo el currículo de la carrera  se logra fomentar el pensamiento ético moral en la formación de valores y con ellos una cultura ambientalista y sentimientos de Amor a la Naturaleza; así como  elevar la calidad en los modos de actuación del profesional de la carrera.
1.  DESARROLLO
En la actualidad, y dado que se reconoce la existencia de una crisis medioambiental, los profesionales de la agricultura están llamados a migrar hacia una agricultura con menos impacto negativo en los ecosistemas: agricultura sostenible, conservacionista, biológica y agroecológica. De ahí la necesidad de que  la educación ambiental debe contribuir a la formación del hombre nuevo, al fortalecimiento de sus  valores ético, morales, al desarrollo de la creatividad y la racionalidad para lograr una participación activa de los ciudadanos y profesionales de esta importante rama del saber, en la toma y ejecución de las decisiones, en la solución de problemas, y tener la capacidad y voluntad para asumir las exigencias que imponen las complejas decisiones de orden cultural, social y tecnológico, así como un conjunto de conocimientos y valores indispensables para entender los códigos de esta transformación en el ambiente que actúan.
Las tecnologías para una agricultura conservacionista del medioambiente tienen un alto contenido biológico por lo que necesitan del dominio profundo de los factores naturales y de las interrelaciones entre ellos. La esencia, dinámica y el carácter complejo del contenido de la Sanidad Vegetal que se desarrolla en el contexto  ambiental, manifiesta la necesidad de una metodología, coherente flexible, y participativa, en todos los componentes del proceso, estimulando el desarrollo  de valores, sentimientos ético morales, de la inteligencia y la creatividad, donde la relación sujeto - objeto sea una interacción reciproca que contribuya a la puesta en práctica de acciones responsables en relación con los problemas ambientales y la forma de controlarlos.
Este tipo de agricultura demanda capacidad para la innovación y la utilización de los recursos locales en su diversidad para la solución de las múltiples problemáticas que se les presentarán. Por lo que la orientación del proceso de formación de los estudiantes es muy importante ya que se encuentran en condiciones de apropiarse de lo formativo mediante lo instructivo, lo que debe reflejarse en las cualidades de la personalidad que se quiere formar. La formación del profesional  debe tener como aspecto esencial el sentido que cada elemento de contenido: conocimientos, habilidades y relaciones con el mundo que lo rodea tenga para el alumno en formación, es decir, debe reflejar la valoración de la significación social de ese contenido para él, en el contexto donde opera. En fin, que este profesional para un desempeño exitoso debe conducirse de forma conciente  y creativa, y la Sanidad Vegetal por sus potencialidades y por su relación con el objeto del agrónomo puede hacer una contribución a este objetivo.
1.1 La formación del profesional en la caracterización gnoseológica del agrónomo.
En los momentos actuales, el Ingeniero Agrónomo se forma en once Instituciones de Enseñanza Superior, incluyendo las tres Facultades de Montañas que funcionan en los principales macizos serranos del país, las que comienzan a señalarse como grandes Unidades Docentes; Cedeño (1999). Todas estas Facultades Agrarias en la actualidad forman Ingeniero Agrónomo de perfil amplio, es decir, profesional que es capaz de resolver con profundidad e integralidad, independiente y creadoramente los problemas básicos y generales que se presentarán en las distintas esferas de actuación profesional de su objeto de trabajo, sobre la base de un profundo  dominio del sistema de habilidades correspondientes a una rama del saber que estudia dicho objeto (Álvarez, 1988).
La actuación exitosa  de este profesional en los procesos productivos le exige conocimientos profundos de los factores en que se basan los mismos: las especies vegetales de cultivo (las plantas), los animales de granja y el medio ambiente; los que derivan  del domino de las diferentes ramas de las ciencias que los abordan. Tales son los casos de la Biología en la que se incluyen los contenidos de  Botánica, Sanidad Vegetal, Fisiología Vegetal, Genética, Microbiología y la  Ecología, estos contenidos tienen un rango de variación en los diferentes planes de estudio, pero cualquiera sea el caso han de asegurarse aquellos que resultan básicos para el conocimiento de las  plantas en lo estructural y lo fisiológico. Notable importancia adquieren los conocimientos en las áreas de las características físicas, biológicas y químicas del suelo, que formando parte del medio, junto a los elementos climáticos y ecológicos, aseguran la nutrición de las plantas, así como de las principales plagas y enfermedades que atacan a las plantas y sus formas de control, todo esto en función de  una preparación que le permita actuar sin ocasionarle afectaciones a ninguno de los componentes más allá de los límites de la capacidad de  auto recuperación.
En un segundo momento del currículo cada uno de los factores es abordado nuevamente, pero incluido en el sistema de interrelaciones con los demás. Las plantas de cultivo se estudian en el  agroecosistema, tal como sucede con las plagas y enfermedades. Para esta oportunidad están reservadas las tecnologías agrícolas que le permiten modificar el suelo en sus aspectos físicos, químicos y bióticos a través de las labores de preparación para la siembra, labores de cultivo, fertilización, inoculación; técnicas para la regulación de los efectos del clima a través de algunos de sus elementos como la luz y la temperatura.  Dispondrá también de técnicas para actuar sobre las  plantas con fines de control de plagas y enfermedades, el mejoramiento genético que propicie los más altos valores fenotípicos en un ambiente ajustado a las características de las nuevas variedades.
En resumen, el agrónomo  conoce y actúa sobre los factores naturales que intervienen en el proceso de producción agropecuario y las relaciones e interconexiones que se establecen entre ellos para favorecer el comportamiento productivo de los mismos  dentro de un marco de racionalidad económica y medioambiental, según las condiciones en el contexto singular en que se desempeña.  Está capacitado además para una comunicación fluida con los colectivos laborales  y tiene una cultura general y humanística que completan su capacidad creativa para una conducta ciudadana en correspondencia con las exigencias sociales.
2. LA FORMACIÓN DE PROFESIONALES AGRÍCOLAS. PROCEDIMIENTO METODOLÓGICO INTEGRADO  PARA EL FOMENTO DEL PENSAMIENTO ÉTICO MORAL  Y LOS VALORES
En este epígrafe  se da tratamiento al problema científico planteado sobre la necesidad de desarrollo de procedimiento metodológico integrado  para el fomento del pensamiento ético moral en  los profesionales de la agricultura, dado el vínculo de su desempeño con los componentes del medio ambiente diverso que demandan un comportamiento creativo en lo relativo a las medidas conservacionistas, la innovación tecnológica y el uso de los  recursos locales.
2.1 Fundamentación teórica de la metodología.
Metodología, palabra compuesta por tres vocablos griegos: metà (“más allá”), odòs (“camino”) y logos (“estudio”). El concepto hace referencia a los métodos de indagación que permiten lograr ciertos objetivos en una ciencia. La metodología también puede ser aplicada al arte, cuando se efectúa una observación rigurosa. Por lo tanto, la metodología es el conjunto de métodos que rigen una investigación científica o en una exposición doctrinal.
En las ciencias sociales, la metodología estudia la realidad social para hallar la explicación veraz de los hechos sociales, utilizando la observación y la experimentación común a todas las ciencias.
Es importante la distinción entre el método (el procedimiento para alcanzar objetivos) y la metodología (el estudio del método). La  metodología es entendida aquí como la búsqueda de estrategias válidas para potenciar el aprendizaje y concretamente en la propuesta, se asume como estrategia que contribuye al desarrollo de habilidades creativas.
 La metodología es parte del proceso de investigación (método científico) que sigue a la propedéutica y que posibilita la sistematización de los métodos y de las técnicas necesarias para llevarla a cabo.
En otras palabras, la metodología es una etapa específica que procede de una posición teórica y epistemológica, para la selección de técnicas concretas de investigación. La metodología, entonces, depende de los postulados que el investigador crea que son válidos, ya que la acción metodológica será su herramienta para analizar la realidad estudiada. En esta tesis, si bien no se plantea involucrar a los estudiantes en una investigación rigurosa, sí se imponen ejercicios de indagación que se aproximan al método de investigación.
Es importante partir del concepto de metodología a considerar en esta investigación, “…Proposición o idea que se manifiesta y ofrece a alguien para un fin determinado”  3 para poder comprender otras definiciones que se irán analizando en este epígrafe y que orientarán hacia la metodología elaborada.
La metodología es una parte de la lógica, cuya finalidad es señalar el procedimiento para alcanzar el saber de un orden determinado de objetos.
Según  el concepto que aparece en el Gran Diccionario Grijalbo, metodología significa “...análisis sistemático y organización de los procedimientos de un proceso o de un grupo particular de problemas, según determinado método…ciencia del método’’ 3
En tal sentido, se aprecia que la metodología es considerada como elemento esencial para cumplir un objetivo importante en la dirección educativa, y que es precisa su utilización para lograr la calidad universitaria, de ser utilizada, habrá un aumento en la calidad del proceso de enseñanza aprendizaje de la Botánica.
Al valorar otras definiciones y conceptos ofrecidos por varios investigadores, a los efectos de esta tesis se entiende como metodología:
“…el procedimiento para realizar una actividad que consta de acciones orientadas metodológicamente, las cuales sirven para accionar en la  solución de problemas que surgen en el contexto ambiental, partiendo de necesidades reales”.
La anterior definición constituye el fundamento que sustenta la metodología, teniendo en cuenta que no debe partir solo de las necesidades, sino de los intereses, expectativas y posibilidades reales de cada búsqueda encontrada en el contexto para lograr un comportamiento creativo de los estudiantes.
En tal  sentido, la formación de un estudiante que responda a estas exigencias implica la elaboración de un currículo que logre, de manera sistemática, el desarrollo de formas de pensar y de actuar frente a los problemas concretos que le plantea el medio ambiental, se  trata de la formación de un profesional reflexivo, crítico, con flexibilidad de pensamiento que le permita la búsqueda y evaluación de diferentes soluciones, alternativas, innovaciones, en fin debe tener habilidades para la creatividad.
La metodología diseñada permite organizar sistémicamente las ideas planteadas por el Ministerio de Educación Superior (MES) sobre la formación del profesional la que ofrece ventajas, pues a través de ella el desempeño de los estudiantes al aproximar contenidos en grandes áreas de saber y de experiencia, permite elevar la cultura general integral, solucionar problemas y  para el fomento del pensamiento ético moral en los agricultores que le permitan responder a los cambios socio-económico, las necesidades y   demandas del desarrollo local.

1.2 Como contribuir a la formación  del profesional en su sistema de Valores Éticos y Morales.
Los programas de las asignaturas que se imparten en la carrera propiamente de la especialidad que inicia con la asignatura Botánica que es la asignatura que transversaliza a través de todo el currículo a todas las demás tienen en su diseño concebidas actividades que los estudiantes realizan a través del componente laboral investigativo que nos permiten fomentar los comportamientos ético morales, de amor a la naturaleza al cuidado del medioambiente y valores como la responsabilidad, la laboriosidad,  la creatividad y otros.
Como por ejemplo. La propia asignatura Botánica que estudia  las plantas basándose en conceptos  anatomorfológicos a través de la estructura celular y  la  formación de tejidos y  órganos vegetales, el ordenamiento sistemático  según las reglas de taxonomía y nomenclatura vigentes, los procesos relacionados con la reproducción especialmente en plantas con semillas y su valor en la producción agrícola.
La asignatura Sanidad Vegetal tiene como objetivo general
Utilizar  las  técnicas  y  métodos  apropiados  para  la  identificación,  evaluación  y  manejo  de  las  plagas  que  atacan  los  cultivos  económicos ( incluidos aquellos que sustentan la alimentación humana, animal y plantas forestales),  así  como  las  especies  beneficiosas,  aplicando  los  principios  del  manejo  integrado  y  la  preservación  del  medio  ambiente.
A los estudiantes se les proponen actividades que desde el componente Laboral Investigativo  deben enfrentar en la práctica por si solos con la guía del profesor de manera que logre aplicar los conocimientos que aprende en el aula de forma teórica y así elevar el nivel de aprendizaje en función de los objetivos educativos que persigue la asignatura sobre la base de los objetivos instructivos que es el contenido de forma general.

CONCEPCIONES MÁS GENERALES DE LA METODOLOGÍA.                                                  
La metodología  elaborada  se distingue por las concepciones siguientes.

  • Permite el establecimiento de un estrecho vínculo entre los conocimientos teóricos de las asignaturas y su aplicación práctica en el  contexto ambiental, la asimilación de los conocimientos no se concibe como el único objetivo de la enseñanza sino también como un recurso para la solución de problemas, tareas o situaciones reales.
  • Estimula la búsqueda a través del trabajo conjunto de indagación y reflexión aproximando la enseñanza a la investigación científica, a la actividad productiva y social brindando una mayor solidez a los conocimientos adquiridos en la práctica
  • Permite el estimulo de la actividad cognoscitiva del estudiante, el desarrollo del espíritu investigativo, la independencia cognoscitiva, la creatividad y la capacidad de autoaprendizaje.
  • Posibilita que los estudiantes  interaccionen con el contexto ambiental singular del municipio y  socialicen  los conocimientos individuales, enriqueciendo y potenciando con el conocimiento colectivo.
  • Permite que los estudiantes desempeñen el rol de sujetos de su propia formación profesional, estimulando la adopción de posturas críticas personales y comprometedoras ante el conocimiento de los recursos naturales;  y  la protección del medio ambiente.

CONCLUSIONES
El individuo en su desarrollo va conformando su propio código moral, este nace de su propia vida de sus interrelaciones, es fruto de la época en que se desenvuelve y puede arrastrar tareas e imperfecciones del pasado.
En la construcción de la nueva sociedad se acrecienta la importancia del factor subjetivo y de la conciencia social, se va estructurando un código moral que contiene los principios morales elaborado por las fuerzas revolucionarias, se refleja en él lo mejor que ha conquistado la sociedad socialista en su lucha por el progreso moral, por último señala el camino a seguir por el hombre en su perfeccionamiento moral en su lucha por la edificación de una sociedad superior de ahí que el ingeniero agrónomo necesite de una formación ética, moral en valores sentimientos actitudes y amor por la protección la naturaleza y el medio que lo rodea en aras de obtener de  ella los frutos que espera por tanto los contenidos de las asignaturas básicas  que recibe este profesional a través de todo el currículo son propicias para lograr tales propósitos.

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Recibido: 11/09/2015 Aceptado: 12/01/2015 Publicado: Enero de 2015

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