5.1 Introducción

En la vinculación de las sociedades campesinas con el sistema capitalista, la antropología económica ha centrado su atención en la vulnerabilidad del sistema social campesino desde la realidad de un sistema económico dominante que expolia a las comunidades de sus excedentes y las subordina a la realización de actividades que sacan a los miembros de la comunidad de sus grupos identitarios. Sin embargo, el proceso de marginación se puede estudiar también desde las prácticas ideológicas que contribuyen a disminuir la capacidad de negociación y construcción de autonomía de las comunidades campesinas tanto en el ámbito político como económico (Arizpe, 1976). Esto explica porque aún cuando algunas comunidades campesinas cuentan con capacidades productivas y recursos naturales su situación socioeconómica no ha mejorado.

En la vinculación constante de las comunidades rurales con el sistema capitalista existe un proceso de transformación irreversible que tiene influencia en la forma de reproducción social de las comunidades, la teoría económica predecía la incorporación completa de la economía campesina a la capitalista, sin embargo, este proceso de asimilación se ha enfrentado a un proceso de cambio que si bien ha modificado patrones de conducta económico no las ha transformado en sociedades capitalistas. Más bien ha derivado en la construcción de un tipo de sociedad nueva. Este es precisamente el enfoque que se encuentra detrás de la argumentación de la construcción de las ANGE.

La revisión que se presenta en este capítulo consta de dos partes: en la primera se presentan las formas en las que la sociedad campesina ha sido sujeta a un proceso constante de marginación que ha garantizado que la construcción de iniciativas comunitarias no prosperará y que se da por una práctica ideológica de instituciones económicas y políticas; aquí también se presenta las implicaciones que ha tenido la incursión del sistema capitalista en diferentes áreas de la vida comunitaria. El siguiente apartado hace una recopilación un tanto abstracta de la forma de organización social de las comunidades rurales. La combinación de ambas partes permite rebasar una perspectiva un tanto idealizada de las formas comunitarias, es decir, este capítulo propone mostrar algunos impactos de la forma de vinculación de las comunidades rurales con el sistema capitalista, pero también mostrar cómo a pesar de esa vinculación sobreviven instituciones y formas de integración social y productiva dentro de las comunidades que las hacen ser formas sociales muy particulares, con una racionalidad que no es la de la economía campesina cerrada, de subsistencia, pero que tampoco es la del sistema capitalista.