BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales


EL TÚNEL MÁGICO DE LOS PARADIGMAS ….LA CIENCIA REGIONAL AL ALCANCE DE LOS JÓVENES

Andrés E. Miguel Velasco y otros



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CAPÍTULO 13. LA ESTRATEGIA DEL AMOR

Al notar la huída de la Matlacihua, Bezelao y sus fantasmas, Duende de Agua, el jefe de los niños mayas, dio una orden, y repentinamente de los árboles que rodeaban la gran plaza de Chichén Itzá cayeron varias redes que atraparon a Bezelao y a todo su grupo:

--¡Bravo, al fin atrapamos a los malos!, brincaban llenos de alegría los niños mayas.

--¡Llévenlos hacia el gran cenote!, ordenó Duende de Agua.

--¡No nos hagan nada, nosotros nos hemos portado bien!, vociferaba la Matlacihua.

--¡Ni se les ocurra hacernos ningún daño!, amenazaba Bezelao.

Jaloneando la carga de prisioneros, los niños mayas se situaron a la entrada del gran cenote, donde Duende de Agua ordenó:

--¡Lancemos a los invasores al gran cenote!.

--¿Y si se escapan nuevamente?, preguntó desconcertada Donají, respondiéndole Duende de Agua:

--No podrán hacerlo, pues su única escapatoria es la gruta que conduce al fin del mundo, su lugar de origen, y el cenote donde han sido atrapados siempre se llena con la neblina de copal, y ellos no soportan su sagrado olor.

--¡No por favor, no me echen al agua que yo no sé nadar!, gritaba la Matlacihua, quien agregó dirigiéndose a Bezelao:

--Negrito mío, no me dejes por favor, ayúdame a nadar.

--Si no sabes nadar ese es tu problema, le respondió furioso el dios.

--¡Malagradecido, desdichado, que mal te portas conmigo que siempre te he querido!, gritaba la Matlacihua mientras manoteaba en el agua.

Una vez que los prisioneros se escabulleron en el agua y desaparecieron de la vista de todos, Duende de Agua comentó:

--Este triunfo se lo debemos a la estrategia de saber ver y saber escuchar que empleó Flor de Luna.

--¿Y cómo fue que Flor de Luna aplicó esta estrategia?, preguntaron Donají y José Pablo, por lo que otro niño maya le dijo:

--Flor de Luna ha aprendido a utilizar adecuadamente la metodología de la “investigación-acción”, y esto le ha permitido entender el hablar a todo lo que nos rodea, pues ella conoce el lenguaje del amor, porque éste, en cualquier forma que se manifieste en el humano camino, es siempre un don divino: ¡qué el amor los acompañe siempre!.

Y el mismo niño jefe añadió:

--La mejor estrategia para actuar es el amar. Bienaventurado quien ama, pues el amor es lo más grande, pues su empeño hace inmenso aun lo pequeño. Bezelao y la Matlacihua han utilizado lo más negativo de la “investigación-acción”, que sólo conduce a destruir...

--¿Me sirve el amor como estrategia en la búsqueda de mi mamá?, intervino confundida Flor de Luna.

--Mucho, pues lo que te guía hacia ella es su amor, ya que nuestras madres son las que en realidad nos enseñan a amar prodigándonos su querer, pues en los matices de la flor y el arco iris de color, o las nubes rosadas como algodón y las aguas que cantan su canción, el amor de nuestra madre se nos manifiesta con alegría en cada momento de cada día.

--El amor de una madre es suavecito, una brisa refrescante que llega despacito, intervino una niña maya de abundante cabellera.

--¡No temas!...Haz que tu corazón vibre de amor. Ponle atención y notarás que cada vez que palpita repite la palabra amor, se dirigió a Flor de Luna otra niña maya.

--¡Pero vamos al agua!. ¡El último que llegue no podrá zambullirse!, fue el reto que otro niño lanzó desde atrás, por lo que todos corrieron hacia el cenote cristalino.

--¡Qué lugar tan bonito es este Huitzi, a pesar de que sus colores están opacos!, ¡lástima que no podamos meternos por haber llegado al último!, dijo apenada Flor de Luna, quien a pesar de todo se sentía a gusto contemplando los juegos de los demás niños.

Y mientras nadaban, los niños mayas comenzaron a entonar un canto que decía:

--¡Amémonos así como nos amaron nuestros abuelos y nuestros padres que nos cuidaron con sus desvelos. Y también como amamos la noche y el día, a Mama Luna-Maguey y al Gran Sol Colibrí que nos dan vida. Y como amamos del verde la alegría, y los pájaros que cantan el caminar de nuestra vida!.

--¿Por qué dicen eso, que no les basta gozar todo lo que aquí existe?, preguntó intrigada Flor de Luna a la niña que cantaba. Por respuesta, la pequeña le dijo:

--¿Qué gente no vibra suavemente, como mañana fresca de abril, cuando ve que en el confín se anuncia con alegría el canto del cenzontle, el que surca el horizonte?; ¿y qué alma no se conmueve cuando descubre que el Gran Sol Colibrí con su fulgor anuncia en el cielo su estrategia de amor?.

Entonces los demás niños mayas intervinieron cantando con alegría:

--Gracias por las flores y el arco iris de colores, por la brisa y del niño la risa. También por el rocío que al alma llena de amor: ¡gracias de verdad por la estrategia del Amor!.

La más pequeña del grupo se acercó a Flor de Luna mirando con curiosidad a su muñeca:

--¿Te gusta Huitzi?, se dirigió a ella la princesa Flor de Luna.

--Es muy bonita...Me gustaría tener una igual.

La princesa se quedó pensativa, y sin dudarlo mucho se dirigió a la pequeña diciéndole:

--Si Huitzi te gusta quédate con ella.

--No puedo, pues te pondrás triste...se nota que la amas de verdad. Pero Flor de Luna insistió:

--¡Tómala, pues Huitzi se siente feliz con quien la ama!. Y si yo la amo creo que tú la amarás igual, pues se nota tu deseo de hacerlo.

Los demás niños se acercaron a quienes dialogaban, y uno de ellos intervino refiriéndose a la pequeña que rechazaba el ofrecimiento de Flor de Luna:

--¡Acepta el regalo, pues te lo dan con el corazón!.

--Lo acepto. Gracias de verdad, pues entiendo lo que esto significa para ti, se refirió la pequeña tomando entre sus brazos a Huitzi.

Flor de Luna, visiblemente emocionada se dirigió a su muñeca tratando de darle un último consejo:

--Querida. Sé que con tu nueva mamá seguirás siendo tan buena como lo fuiste conmigo. Trata de estar siempre contenta, y si algo te falta hazlo saber a quien desde ahora te cuidará...Por mi parte, te prometo que siempre estarás en mi corazón...

Finalmente, Flor de Luna dio un beso a Huitzi, mientras los demás niños mayas celebraban el acontecimiento. La princesa, en un arrebato de alegría dijo:

--¡Juguemos, ya que todos estamos muy contentos, pues quien entiende el amor es libre, y la libertad es felicidad!.

Los pequeños mayas enseñaron a los niños los rincones de Chichén Itzá, donde abundaban tantas cosas que una sola de ellas haría la delicia de los niños. También enseñaron muchos juegos a Flor de Luna, Donají y José Pablo, con lo cual les demostraron que en su región el tiempo se manejaba a voluntad. En uno de los descansos concedidos por sus compañeros de juego, la princesa preguntó:

--¿Cuál es la relación de la “investigación-acción” con la planificación?.

--Flor de Luna, ¿qué acaso no te das cuenta que las estrategias de la Ciencia requieren resolver el qué, el para qué, el cómo, dónde, cuándo, quién y con qué?, pues si no se responde a esto es muy difícil que se genere el conocimiento, fue la respuesta que una vocecita le dio.

Otra niña maya intervino para aclarar lo siguiente:

--Si, la Ciencia también requiere ser planificada para poder hacerse realidad, ya sea que utilice la “investigación-acción”, o cualquier otro método. Aquí, en Chichén Itzá se utiliza como estrategia el amor, a los seres vivos, a la Ciencia, y también a las regiones...

--Sí en verdad buscan a la mamá de Flor de Luna la encontrarán pronto. No teman, como el amor verdaderamente existe en ustedes, éste será la estrategia que debe guiarlos hacia el ser amado. ¡Que el amor los acompañe siempre!, fue la recomendación que recibieron de los niños mayas.

--¡Vamos niños, es hora de retirarnos y desearles buena suerte a los compañeros más nobles que aquí han llegado!, exclamó Duende de Agua, por lo que todos se acercaron a Flor de Luna, Donají y José Pablo para abrazarlos, y desearles lo mejor. Y a pesar de la penumbra, los niños se alejaron para continuar sus juegos.

Flor de Luna, Donají y José Pablo no sintieron desconcierto. La soledad que los rodeaba no los hizo sentir ningún temor. Nunca supieron exactamente como sucedió, pero en el momento de considerar que su estrategia para acercarse a la mamá de Flor de Luna era sentir amor, una luz que atravesó su corazón los transportó hacia un maravilloso lugar.


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