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HISTORIA DE LA MODERNIDAD EN MÉXICO, SIGLOS XIX -XX (ENFOQUE ESTRUCTURAL FUNCIONALISTA)

Jorge Isauro Rionda Ramírez



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EXTRANJEROS EN MÉXICO

El siglo XIX, bajo la influencia del pensamiento positivista, que enmarca prejuicios pseudo científicos relativos a la eugenesia social y al darwinismo social, promueven la colonización de europeos en México, bajo la deplorable idea de que una de las razones del atraso del país es la herencia indígena, y que habría por ello de promoverse la promoción racial del elemento europeo, como estrategia para promover el desarrollo de la nación.

Prejuicios tan nefastos como este, son patentes desde los primeros años independientes. El primer antecedente es la presentación por Valentín Gómez Farías ante el Congreso de México de la Ley General sobre Colonización. La que es una respuesta a la necesidad de poblar el norte del país ante la inminente amenaza expansionista de los Estados Unidos de América.

El siglo XIX, tal como lo considera Eduardo Galeano, es una centuria terrible para la población indígena del continente, que vive un sistemático exterminio justificado en los prejuicios que el positivismo sostiene sobre la “superioridad racial” del hombre caucásico respecto a las demás razas no europeas.

La masonería en México, por otra parte, pugnó por un orden natural en la sociedad que atendiera a los valores occidentales, y sus integrantes, al menos del siglo XIX a mediados del XX deben ser personas de clase media y alta, como de una formación educativa occidental, europeizante, de tipo racial dominantemente caucásico. No se ignore que el pensamiento masón influye mucho en los pensadores de la época.

El positivismo se inscribe en la ética liberal y es desde tiempos de Lerdo de Tejada y Benito Juárez que impregna el discurso político de anhelos en pro del progreso económico, en las directrices del capitalismo, el cual es considerado el esquema propio del orden natural.

Bajo esta óptica, la necesidad está entonces en ordenar y organizar la sociedad mexicana, de tal manera que la paz y la armonía social y política de la nación son un bastión para que el progreso se pueda dar. Los indígenas son menospreciados, su cultura y su sociedad despreciada y propiamente son excluidos de las decisiones nacionales, más acordes a los intereses de los mestizos. Asimismo, la población extranjera es sumamente minoritaria, no obstante, durante la época de Porfirio Díaz, llegan a obtener una gran influencia en la vida política y pública del país, así como un gran poder. Especialmente aquellos de origen inglés y estadounidense. Claro ejemplo es la intervención del ejército norteamericano en la Huelga de Cananea en 1906, donde el Gobierno de Sonora le permite actuar para sofocar el movimiento obrero.

La revolución mexicana, así como el régimen social demócrata posrevolucionario, limita en mucho la presencia de intereses económicos en México, especialmente en el segundo lustro de los años 30 donde se dan algunas expropiaciones muy importantes para el desarrollo de sectores estratégicos de la economía nacional, tales como los ferrocarriles, el teléfono y el telégrafo, el petróleo, la energía eléctrica y la minería.

Es estos tiempos México no obstante recibe inmigrantes españoles que huyen de la guerra civil como de la dictadura franquista. Así también llegan grupos menonitas la norte del país, de Europa, especialmente de Alemania, inmigrantes cubanos se exilian ante la revolución cubana y el régimen de Fidel Castro. Otros grupos minoritarios son importantes por su peso económico como son los judíos, así como los libaneses, italianos y franceses,, Numéricamente son muy representativos los centro y sudamericanos.

Una de las razones que explican por qué México no alberga mucha población extranjera en el siglo XIX, fueron las leyes que desde la constitución de 1824, bajo influencia de la Iglesia Carólica, limitan la inmigración aquellas naciones no católicas. Así como en el siglo XX, bajo otra constitución, pone fuertes restricciones a la inversión extranjera como a la participación social, pública y política de extranjeros (Ley de Población).

Otras naciones del orbe, como Argentina, Brasil, Uruguay, Chile, Paraguay, Guatemala, Estados Unidos de América y Canadá, con políticas más hospitalarias, permiten a los extranjeros participar en sus economías, como integrarse con derechos civiles similares a sus ciudadanos (que no les hacen ciudadanos de tercera), a su sociedad, como a ejercer funciones públicas como empresariales.

Recientemente la proporción de extranjeros a aumentado, no obstante seguir siendo una proporción muy poco representativa, como se puede ver en el cuadro siguiente, donde de 1990 repunta de una tradicional y persistente participación histórica de apenas 0.4% de la población nacional, a 0.5%. Se estima que para el 2010 esta bien puede seguir su ascenso para llegar a 0.6%.

INDICADOR: AÑO:

Población nacida en otro país residente en México 1950 1970 1990 2000

Porcentaje de población nacida en otro país residente en México 0.4% 0.4% 0.4% 0.5%

Fuente: Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI) Tomado de Herrera (noviembre de 2007).

Similar al periodo porfirista, no obstante su poca participación en la sociedad mexicana, su peso político y económico en el país vuelve a ser representativo, que bien puede implicar un riesgo para la soberanía y la independencia nacional. Su participación económica a raíz del incremento de la inversión extranjera en México desde los años 90 observa un sustantivo repunte. Aspecto por otra parte benéfico para el desarrollo nacional.

Las comunidades de extranjeros regionalmente explican el repunte económico de muchos municipios como lo es Chipilo (Puebla), San Rafael (Veracruz) y San Miguel Allende (Guanajuato), cuya actividad productiva observa prosperidad y crecimiento. Así como el efecto que tienen grupos como los menonitas en localidades y economías regionales. Destacan las asociaciones de extranjeros especialmente las judías y las libanesas, y recientemente norteamericanas como niponas. La presencia de coreanos, taiwaneses y chinos viene en aumento, como la relevancia de sus negocios y actividades económicas.

Ante la globalización, es de esperar que el aumento de la participación relativa de los extranjeros en la población del país venga en aumento, así como de sus negocios.


 

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