EMPRENDURISMO, CULTURA, CLIMA Y COMUNICACIÓN ORGANIZACIONAL Y SU APLICACIÓN A LA PEQUEÑA Y MEDIANA EMPRESA EN LA ZONA METROPOLITANA DE GUADALAJARA, MÉXICO

EMPRENDURISMO, CULTURA, CLIMA Y COMUNICACI?N ORGANIZACIONAL Y SU APLICACI?N A LA PEQUE?A Y MEDIANA EMPRESA EN LA ZONA METROPOLITANA DE GUADALAJARA, M?XICO

Coordinador: Rigoberto Soria Romo

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3.1. Las mujeres y el cooperativismo

En los párrafos anteriores se señalaba la generación de fuentes de trabajo como un importante detonante para la generación de cooperativas, en este sentido es necesario considerara que diferentes estudios dan cuenta de la situación de desventaja de la mujer en el terreno laboral, caracterizada por tasas menores de ocupación, salarios inferiores, mayores dificultades para acceder y promocionar en el mercado laboral por cuenta ajena y dificultades adicionales del orden social tales como el sostenimiento de la unidad familiar. En suma, el empleo femenino es claramente inferior al masculino, tanto desde el punto de vista cuantitativo como desde la calidad de la ocupación. El escaso atractivo que el mercado laboral presenta para las mujeres puede explicar el papel que el autoempleo puede desempeñar al respecto (Nieto, 2006).

La evidencia muestra que las cooperativas son instrumentos valiosos para la integración laboral y social de determinados colectivos en situación de exclusión. Las cooperativas reportan ventajas significativas en el ámbito de la creación y mantenimiento del empleo (Ribas y Sajardo, 2005). Por ello las mujeres en las cooperativas encuentran una oportunidad para el desarrollo de su faceta laboral no solo como trabajadoras asalariadas, si no también a través de la creación o participación directa en la empresa, permitiéndoles llevar a cabo iniciativas empresariales únicas que responden a sus necesidades y a las de su entorno.

Apelqvist (1996:38) apunta las semejanzas existentes entre los valores cooperativos y la forma en que las mujeres conceptualizan el trabajo. La autora comenta que.

“las culturas femeninas se caracterizan por la autoayuda, la confianza en sí mismo, la democracia, la igualdad, la equidad y la solidaridad. Las mujeres creen en los valores éticos de la honestidad, apertura, responsabilidad social y preocupación por los demás, actúan invariablemente de acuerdo a ellos”.