BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales

 

MÉXICO EN LA ALDEA GLOBAL

Coordinador: Alfredo Rojas Díaz Durán

 

 

Esta página muestra parte del texto pero sin formato.

Puede bajarse la tesis completa en PDF comprimido ZIP (155 páginas, 733 kb) pulsando aquí

 

 

 

OTRO MILENIO DE ESPERANZA

Alfredo Rojas Díaz-Durán


El capitalismo, conlleva una hegemonía que se ha expresado en diferentes formas: es competitivo, monopolista, de Estado tardío, imperialista, salvaje, etcétera. También, se interrelaciona en una serie de niveles hegemónicos, como en lo político, cultural, militar, económico. Pero esta arquitectura tan compleja, ha beneficiado como nunca antes a una selecta minoría, beneficiado mediocremente a una clase media que en el centro es mayoría y en la periferia minoría. Doscientos años de Modernidad, han dejado a los marginados en niveles parecidos a la Edad Media, pero con televisión. Incluso, existen marginados dentro de los marginados, como lo son los indígenas, que durante 500 años una y otra vez, se les ha intentado infructuosamente integrar de golpe al capitalismo europeo; primero dentro de un avasallamiento colonial, luego, dentro del asalariamiento moderno. Formas que, ayer como hoy, siguen considerando ajenas y, además efímeras, pues, de no ser así, no serían en verdad milenaristas.

El pasado siglo XIX, fue testigo de una continua expansión comercial producto de la rescisión continua de las barreras al comercio. Mismo proceso que no detuvo ni el nacionalismo socialista. Veinticinco años después de la Segunda Guerra Mundial, volvimos a un proceso continuo de rescisión de aranceles y restricciones cuantitativas de manera fundamental en países subdesarrollados. Se esperaba que la inversión privada internacional y las instituciones modernas del capitalismo, se convirtieran en un valioso e irremplazable complemento de ayuda. Con el arribo a la fase del imperialismo financiero, el comercio mundial se hace más complejo; sin embargo, el nuevo imperialismo (que inició en la década de 1870-1880) pronto encontró perturbaciones, depresiones, guerras, desajustes y mejoramiento material. Pero también encontró sus propias fórmulas de reconstrucción y adaptación, hasta que, gracias a los descubrimientos tecnológicos y de comunicación, el capitalismo ha encontrado las herramientas que aumentan su memoria y alargan sus tentáculos estrechando el espacio y el tiempo.

Esta fase es conocida por la consolidación de los sectores bursátiles y de finanzas internacionales sobre el conjunto de la industria, servicios y agrominería. En esta fase de monopolización, el mercado es controlado a través de tecnologías, conocimientos, precios, patentes, regulación de aranceles y focalización de mercados clasificados por las principales corredurías internacionales, etcétera. Estos consorcios reconocidos como empresa transnacional, según Raymond Vernon y Harry Jhonson, se entienden como aquella que para conquistar mercados, obtener fuentes de materias primas o economías de escala, decide traspasar sus fronteras nacionales extendiendo sus actividades productivas, comerciales o de servicios a otros países; manteniendo el control mayoritario de la inversión, de la administración de cada empresa y del avance tecnológico; buscando siempre reducir los riesgos y garantizar los máximos rendimientos. Sin embargo, el anhelado desarrollo nunca termina por generalizarse, y los pueblos que se encuentran bajo la supervisión del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional no han conocido más que promedios estadísticos de crecimiento económico pero nunca una mejoría personal en su conjunto.


Grupo EUMEDNET de la Universidad de Málaga Mensajes cristianos

Venta, Reparación y Liberación de Teléfonos Móviles
Enciclopedia Virtual
Biblioteca Virtual
Servicios