La dialéctica productor directo - medios de producción

Juan Ibáñez López

 

Capitulo 4. El Régimen Capitalista.

Sabido es que, el capitalismo es el modo de producción que sucede al régimen feudal, se basa en la explotación de los obreros asalariados por la clase de los capitalistas. Este modo de producción tiene como esencia, la producción mercantil.

Claro está que la producción mercantil existía en la formación económico - social esclavista y en el feudalismo. La producción mercantil simple sirvió de base para la aparición y desarrollo posterior de la gran producción mercantil capitalista.

La pequeña producción mercantil simple de artesanos y campesinos se diferencia de la gran producción capitalista; pues, mientras que en la primera observamos que el productor directo es el propietario de los medios de producción, que pone en movimiento productivo con su fuerza de trabajo, en el segundo caso, el productor, es decir, el obrero, no es dueño de los medios de producción que pone en función productiva y que al mismo tiempo es explotado por el capitalista dueño de los medios de producción.

La propiedad privada engendra inevitablemente la competencia entre los productores de mercancías, lo cual conduce al enriquecimiento de unos y a la ruina de otros, la mayoría.

En la misma medida en que se va creando una gran masa de desposeídos, se van creando también, las condiciones para que en el mercado entren en contacto los que poseen el dinero, medios de producción y artículos de uso y consumo, y de otra parte, aquellos que por haber perdido sus medios de producción se ven obligados a vender su fuerza para poder subsistir.

“Obreros libres, - decía Marx – en el doble sentido de que no figuran directamente entre los medios de producción, como los esclavos, los siervos, etc., ni cuentan tampoco con medios de producción propios, como el trabajador que trabaja su propia tierra, etc.; libres y dueños de sí mismos”. (1))

En la llamada acumulación originaria, Marx nos va mostrando qué ésta no es más que un proceso histórico en el cual se va expropiando continuamente a los productores directos de los medios de producción con el objetivo de convertirlos en obreros asalariados. Se llama acumulación originaria porque antecede al capital y al modo de producción capitalista.

“La estructura económica de la sociedad capitalista – dice Marx – brotó de la estructura económica de la sociedad feudal. Al disolverse ésta, salieron a la superficie loe elementos necesarios para la formación de aquella”. (2)

El productor directo, solamente pudo disponer de su persona cuando dejó de vivir bajo el yugo del esclavista y del señor terrateniente.

Un aspecto de mucha importancia en el movimiento histórico, es aquel en el cual el productor directo se convierte en obrero asalariado, logrando la liberación de la servidumbre y la coacción gremial.

“El recuerdo de esta cruzada de expropiación – dice Marx – ha quedado escrito en los anales de la historia con trazos indelebles de sangre y fuego”(3). Los capitalistas industriales, los poderosos de hoy, para llegar a este punto desalojaron de los gremios artesanos a los maestros y a los señores feudales, que poseían las fuentes de riquezas. De ahí que su ascensión es producto de una lucha victoriosa contra el sistema feudal “y sus irritantes privilegios y contra los gremios y trabas que estos ponían al libre desarrollo de la producción y a la libre explotación del hombre por el hombre”. (4)

De aquí se deduce que este movimiento condujo directamente a la aparición del obrero asalariado y del capitalista, todo lo cual tuvo como punto de partida la esclavización del obrero. Claro está que en las etapas que siguieron a esta sólo cambió de forma: la explotación feudal se transformó en explotación capitalista.

De lo anterior se desprende por qué Marx, al examinar el proceso que condujo a la formación del proletariado, tomó como punto de partida “... la expropiación que priva de su tierra al productor rural, al campesino” (5).

La expropiación de la tierra al productor rural es la base fundamental de todo el proceso, pero no la única. De igual manera, la disolución de los señoríos feudales y el saqueo de las propiedades de la iglesia con su secuela de miseria y hambre para grandes masas, ampliaron la base del proceso de proletarización.

Para el estudio de la expropiación del productor directo de la tierra, Marx toma como ejemplo a Inglaterra.

El proceso de expulsión del campesinado de sus propiedades comienza en Inglaterra con el siglo XV y se extiende hasta la mitad del siglo XIX. La extensión de este proceso que se prolonga en el tiempo y en el espacio por varios siglos y diferentes situaciones históricas, lo confirma en su condición de ley y refrenda el criterio de que fue dictado por los intereses del nuevo orden económico- social que había surgido, se afianzaba y se desarrollaba vertiginosamente.

Una señal importante para la aceleración de la expulsión del campesinado de sus tierras fue dada por el desarrollo de la industria lanera y el aumento de los precios de la lana. Ello condujo a que en Inglaterra cambió violentamente la correlación entre las tierras de cultivo y las tierras de pastos; de tal forma podemos apreciar que si al inicio a un acre de pasto correspondían de tres a cuatro acres de cultivo, ya en el siglo XVIII a tres acres de pasto correspondía un acre de cultivo. Como se observa, la agricultura pasa de una forma extensiva y exigiendo mas capital y menos trabajo. Menos trabajo exige también el terreno para pastos que viene a sustituir a las tierras de labranza. “Las ovejas – decía Tomás Moro – devoran a los hombres”. (6)

El advenimiento del modo de producción capitalista trajo consigo el despojo de los siervos de la gleba de sus medios de producción y la conversión de los mismos en obreros asalariados, originando la famosa acumulación originaria que significó la expropiación del productor directo, es decir, la destrucción de la propiedad basada en el trabajo.

“... esta espantosa y difícil expropiación de la masa del pueblo, forma la prehistoria del capital. Abarca toda una serie de métodos violentos, entre los cuales sólo hemos pasado revista aquí, como métodos de acumulación originaria del capital a los más importantes y memorables. La expropiación del productor directo se lleva a cabo con el más despiadado vandalismo y bajo el acicate de las pasiones más infames, más sucias, más mezquinas y más odiosas. La propiedad privada fruto del propio trabajo y basada, por así decirlo, en la compenetración del obrero individual e independiente con sus condiciones de trabajo, es devorada por la propiedad privada capitalista, basada en la explotación del trabajo ajeno, aunque formalmente libre”. (7)

Sabido es que cuando el proceso de transformación ha llegado a su punto culminante, los productores directos se han convertido en proletarios, entonces sus condiciones de trabajo se convierten en capital.

En esta nueva situación, los productores directos ahora convertidos ahora convertidos en obreros asalariados, sólo disponen de su fuerza de trabajo, la cual se ven obligados a vender al capitalista y mientras más y más mercancía produce, mientras más aumenta su producción en poderío y extensión. “ El obrero se convierte en mercancía cada vez más barata a medida que crea más mercancías”.(8))

El obrero productor de mercancías, estas mercancías una vez producidas por él actúan como algo ajeno a él, se le oponen, se enfrentan a él como algo ajeno; cuando más produce menos tiene, una contradicción dolorosa, producir mercancías para pasar hambre, crear riquezas para ser cada vez más pobres, es esa la condición que depara el capitalismo al productor directo, despojado de sus medios de producción, es decir, que con la aparición del capitalismo el productor directo, campesinos y artesanos, son despojados no solamente de sus medios de producción, sino también se les enajena parte de su trabajo a través de la explotación.

“Las leyes de la economía política – planteaba Marx – expresan de este modo el enajenamiento del obrero en su objeto: mientras más produce, menos tiene que consumir; mientras más valores crea, más desposeído, menos valioso se hace; mientras más perfecto es su producto, más imperfecto, más bárbaro se hace el obrero; mientras más poderoso se hace el trabajo, más inerme se hace el obrero; mientras más ingenioso se hace el trabajo, más torpe se hace el obrero y más esclavo de la naturaleza”. (9)

La expropiación producto de las leyes inmanentes del modo de producción capitalista, no solamente se ejercen sobre los productores directos ahora convertidos en asalariados, a los que primero se les enajenó sus medios de producción y luego parte del fruto de su trabajo “... la marcha ulterior de la expropiación de los propietarios privados, - decía Marx – cobra una forma nueva. Ahora ya no se trata de expropiar al trabajador independiente, sino de expropiar al capitalista explotador de numerosos trabajadores”. (10)

Efectivamente, la nueva expropiación se realiza obedeciendo al movimiento interno y a las leyes del modo de la producción capitalista, la centralización y concentración de capitales, la libre competencia que origina que unos capitalistas sean constantemente desplazados por otro más poderoso.

El surgimiento de grandes monopolios que llevan a cabo la competencia en condiciones ventajosas, aprovechando las novedades del desarrollo científico- técnico, lo cual trae consigo la disminución constante del número de explotadores, pero no por eso disminuye la explotación encarnizada que se ejerce sobre la gran masa de desposeídos, los cuales se ven agobiados, pero el mismo proceso de explotación capitalista los hacen más disciplinados, más organizados. “El monopolio del capital se convierte en grillete del régimen de producción que ha crecido en él. La centralización de los medios de producción y la socialización del trabajo llegan a un punto en que se hacen incompatibles con su envoltura capitalista, esta salta hecha añicos. Ha sonado la hora final de la propiedad privada capitalista. Los expropiadores son expropiados”. (11)

En la consecución de sus fines reveladores de la naturaleza enajenada de la vida en la sociedad capitalista, Carlos Marx, completa su estudio incursionando en el carácter de la división social del trabajo y las actividades enajenadas que genera, para ello, deja planteado que. :”Está claro, entonces, que sólo cuando el trabajo es aprendido como la esencia como la esencia de la propiedad privada puede el proceso económico en cuanto a tal ser penetrado en su real concreción.

(…) La división del trabajo es la expresión del carácter social del trabajo(…) la división del trabajo, también, no es entonces nada más que la postulación enajenada, alienada de la actividad humana en cuanto a verdadera actividad de la especie o en cuanto actividad del hombre como ser esencial .”(12)

Lo antes señalado, nos da la pasibilidad de afirmar que el desenmascaramiento de la enajenación en Marx no era un fin en sí mismo. Su objetivo era preparar el terreno para la revolución comunista y para la realización del comunismo,

Lo antes señalado, nos da la posibilidad de afirmar que el desenmascaramiento de la enajenación en Marx no era un fin en sí mismo. Su objetivo era preparar el terreno para la revolución comunista y para la realización del comunismo, entendido este como:”…

La supresión positiva de la propiedad privada en cuánto a entrañamiento, y, por consiguiente, como autentica apropiación de la esencia humana y para el hombre; el comunismo entonces, como retorno completo del hombre hacia si mismo como ser social(es decir humano): retorno hecho conciencia y realizado dentro de todo el desarrollo previo. Este comunismo en tanto que naturalismo acabado se iguala al humanismo, y como humanismo acabado se iguala al naturalismo; es la solución genuina del conflicto entre el hombre y la naturaleza y entre el hombre y el hombre: la verdadera resolución de la lucha entre la existencia y la esencia, entre objetivación y la confirmación, entre la libertad y la necesidad, entre el individuo y la especie.

El comunismo es el enigma resuelto de la historia, y sabe que él es esta solución.(…) La supresión de la propiedad privada como la apropiación de la vida humana es, pues, la supresión positiva de toda enajenación: es decir, el retorno del hombre de la religión, familia, Estado, etc. , a su modo de vida humano, social de existencia”.(13)

Efectivamente lo anteriormente analizado nos sitúa ante la precisión de que la problemática referida a la enajenación lleva aparejada, para hacerla verdadera, de una ruptura tanto en el orden teórico, en su composición cabal, así cómo, en la implantación de un proyecto emancipador que rompa totalmente con los modos parciales de enfrentarla. Esto, exige ante todo, la asunción de una p0stura totalizadora en el encause de todas las formas de actividad humana que experimentan los individuos en los contextos históricos en los que se desenvuelve su vida..

Para Marx, el proceso desalienador exigía un enfoque universal ya que sólo así el tiempo histórico tomaría cuerpo desde la génesis, es decir, fehacientemente en la herencia anterior hasta la superación definitiva de esta a través de las múltiples etapas por las que atravesaría en un movimiento dialéctico en el que los creadores del proceso reharían a la sociedad en la medida en que ellos mismos se rehacen al llevar a vías de hecho su ideal societario hasta dar lugar a lo que él llamara identidad positiva comunista

Efectivamente, la base económica del proyecto civilizador comunista es la anulación positiva de la propiedad privada ´,primero como propiedad universal y segundo, como resultado de la evolución progresiva de la civilización en su conjunto. Por tanto lo que vamos a detenernos a examinar de inmediato, es la base de las relaci0nes desenajenadoras, o lo que es lo mismo, a que forma de propiedad deben tender en su proceso de concreción las experiencias socialistas que se realicen, para dar cauce a toda la magnitud emancipadora que se contienen en los puntos de vista de Carlos Marx y Federico Engels al respecto.

No quiere, decir con ello, que el primer paso sea introducir dicha forma de propiedad, y de suyo relaciones sociales, por el contrario , la intención es analizar a partir de los presupuestos de los clásicos del marxismo que mediaciones, que medidas transitorias son las que conducen paulatinamente al encauce de este aspecto tan determinante para la reproducción ampliada de autenticas relaciones sociales .

El contenido del termino anulación positiva de la propiedad privada, consiste en determinar claramente el lugar que el individuo concreto va a ocupar en dicha anulación, lo cual contiene en sí mismo el objetivo de identidad positiva del comunismo; en tanto, no se convierta este en simple y vulgar posesión cuantitativa, sino en contenido cualitativamente diferente que transforme la actividad tradicional a que se encuentran acostumbrados, fruto de una despersonalización de la propiedad que se diluye en conceptos extremadamente vagos y/o amplios, fuera de toda comprobación social, lo que implica, control a todos los niveles y para lo cual todo individuo ha de estar apto para desempeñarlo como necesidad de la propia base de su existencia.

Al sumergirnos en el análisis de la diabética productor directo de medios de producción, vemos como Carlos Marx y Federico Engels dejan señalado en “La ideología Alemana”:

“,,, en cambio, en la apropiación por los proletarios es una masa de instrumentos de producción la que tiene necesariamente que verse por cada individuo y la propiedad sobre ellos, por todos. El moderno intercambio universal sólo puede verse absorbido entre los individuos siempre y cuando que sean absorbidos por todos.(…) Solamente al llegar a esta fase coincide la propia actividad con la vida material , lo que corresponde al desarrollo de los individuos como individuos tales y a la superación de cuanto hay en ellos de natural; y a ellos corresponde la transformación del trabajo en propia actividad y la del intercambio anterior condicionado en intercambio entre los individuos en cuanto a tales . con la apropiación de la totalidad de las fuerzas productivas por los individuos asociados, termina la propiedad privada”.(14)

Podemos decir, que en la historia de la humanidad, el proceso de separación del productor directo de los medios de producción, se produjo en un momento dado del desarrollo histórico _ social, allí en el lugar y en el momento en que un hombre fue capas de producir un poco más de lo que necesitaba para vivir.

El desarrollo de las fuerzas productivas trajo consigo, el aumento de la productividad del trabajo y con el, el aumento de la producción. Esto condujo directamente a la aparición de la enajenación del plus producto, que quedaba en los primeros tiempos en las manos de los jefes de tribus o de los militares y más tarde producto de la enajenación aparece la propiedad privada, produciéndose la separación del productor directo de los medios de producción y , en cada paso de avance que llevaba a cabo la humanidad, la separación del productor directo de los medios de producción se hacía más y más profunda.

La unión del productor directo a los medios de producción solamente podrá lograrse con el triunfo del socialismo, cuándo el productor directo interiorice, tome conciencia plena de que él es el dueño de esos medios de producción que día a día pone en movimiento para crear bienes materiales y de servicios para si y para la sociedad que construye.

Podemos decir, que en la historia de la humanidad, el proceso de separación del productor directo de los medios de producción, se produjo en un momento dado del desarrollo histórico- social, allí en el lugar y en el momento en que el hombre fue capaz de producir un poco más de lo que necesitaba para vivir.

El desarrollo de las fuerzas productivas trajo consigo, el aumento de la productividad del trabajo y con ella el aumento de la producción. Esto condujo directamente a la aparición de la enajenación del plus producto, que quedaba en los primeros tiempos en manos de los jefes de tribu o de los militares y más tarde producto de la enajenación aparece la propiedad privada, produciéndose la separación del productor directo de los medios de producción y, en cada paso de avance que llevaba a cabo la humanidad, la separación del productor directo de los medios de producción se hacía más y más profunda.

La unión del productor directo a los medios de producción solamente podrá lograrse con el triunfo del socialismo, cuando el productor directo interiorice, tome conciencia plena de que él es el dueño de esos medios de producción que día a día pone en función productiva o de servicios, luchando por dar satisfacción a las grandes necesidades de las masas, de bienes materiales y espirituales.

 


1-Ibdem, pagina 655.
2-Ibdem, pagina656.
3-Davit I . Rosemberg.”Comentario a los tres Tomos del Capital.”Editorial de Ciencias Sociales, LA habana, 1979, pagina48.
4-C . Marx.”El capital” tomo 1, Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, 1973, pagina699.
5- Ibdem, pagina 699.
6-C. Marx.”Manuscritos Económicos y Filosóficos de 1844”, Editorial Pueblo y Educación, LA habana, 1975, paginas 68, 69.
7-Ibdem, paginas 71, 72.
8-C. Marx.”Manuscritos Económicos y Filosóficosdel1844”.Editorial Pueblo y Educación, La Habana, 1975, pagina 99.
9-Ibdem, paginas 99, 100.
10-C. Marx. “El capital tomo 1.”Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, 1973, pagina699.
11-C. Marx”El capital tomo1”Editorial Ciencias Sociales, la Habana, 1973, paginas 698, 699.
12-C. Marx “Ideología Alemana”. Editora Política, la Habana, 1979, paginas 76, 77.
13-C. Marx.”Manuscritos Económicos y Filosóficos del 1844”.Editora Política, la Habana, 1975, pagina 120.
14-Ibdem, pagina108.
 


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