Producción de España
BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales

 

MANUAL PRÁCTICO DE LA PRODUCCIÓN DE LA RIQUEZA

Álvaro de la Helguera y García

 

 

 

 

 

 

TERCERA PARTE Producción de España
 

Capítulo I:  Situación y clima

España está situada en el extremo S. O. de Europa y forma con el reino de Portugal la península Ibérica, de la cual constituye las cinco sextas partes, ocupando Portugal la otra sexta parte.

Limita al Norte con el mar Cantábrico y los montes Pirineos, que la separan de Francia; al E. con el mar Mediterráneo; al S. con este mismo mar y el Océano Atlántico, unidos por el estrecho de Gibraltar, que a su vez la separa de África; y al O. con Portugal y el Océano Atlántico. Podemos, por consiguiente, considerar a España fronteriza de cuatro naciones distintas, que son: Francia, Portugal, la posesión inglesa de Gibraltar y la pequeña república de Andorra.

Según la división moderna que de ella se hace, consta de 49 provincias, incluyendo Baleares, islas que posee en el mar Mediterráneo, y las Canarias, que están situadas en el Océano Atlántico; pudiendo clasificarlas en:

 

Fronterizas: de Francia, Lérida, Huesca y Navarra; de Portugal, Orense, Salamanca, Zamora, Badajoz y Cáceres.
Marítimas: En el mar Mediterráneo, Baleares, Valencia, Murcia, Alicante, Castellón, Barcelona, Tarragona, Málaga, Granada y Almería; en el Océano Atlántico, Canarias y Coruña, que lo es a su vez, en el Cantábrico; y en este mar, Vizcaya, Santander, Oviedo y Lugo. Sevilla está considerada como marítima por la importancia de su puerto en el río Guadalquivir.
Marítimo-fronterizas: Cádiz, en los mares Mediterráneo y Atlántico y en la frontera de Gibraltar; Gerona, en el Mediterráneo y en la frontera francesa; Guipúzcoa con la misma nación y en el mar Cantábrico; y Huelva y Pontevedra, en el Océano Atlántico y en la frontera de Portugal.
Interiores: Madrid, Toledo, Ciudad-Real, Cuenca, Guadalajara, Ávila, Soria, Segovia, Valladolid, Burgos, Palencia, Álava, Albacete, León, Logroño, Teruel, Zaragoza, Córdoba y Jaén.
Tiene además España en África las posesiones siguientes:Al N., Ceuta, Alhucemas, Peñón de Vélez, o de la Gomera, islas Chafarrinas y la de Alborán, que está deshabitada, y Melilla.
 

En el Golfo de Guinea, Fernando Poo, Corisco, Annobón, Elobey grande y pequeño, el territorio del Muni o Guinea española, la península del Río de Oro y la pequeña posesión llamada Ifni.
España, con todas sus posesiones, tiene una superficie de 507.420 kilómetros cuadrados y 494.940, contando solamente la parte peninsular.
El clima, por su situación geográfica y por su latitud, entre los paralelos 36 y 44 así como por su proximidad al continente africano, cuyos cálidos vientos recibe, y por la gran extensión de sus costas, debía ser en general templado, igual, suave y benigno, cualidades que no reúne en absoluto, sin que pueda decirse que llegan al extremo opuesto; pero que en algunas regiones están sumamente modificadas por diferentes causas determinantes de alteración en las condiciones climatológicas, sobre todo en lo que a la temperatura se refiere, por influir de gran manera en los caracteres atmosféricos.

Son las principales entre estas causas, la des-igualdad de terreno, tan montuoso por algunos sitios que casi se aproxima al de Suiza; la gran elevación de sus cordilleras, muy numerosas y la despoblación constante de su riqueza forestal.

De aquí la diferencia tan notable que se observa en los climas de las diferentes regiones de la península, entre los que podremos distinguir tres predominantes, que son:

En la región del N, y NO., algo frío e igual, pero húmedo y lluvioso; pues les vientos reinantes que casi siempre predominan son los del Sudoeste, que ocasionan lluvias frecuentes.

El de la región del centro, que componen en su mayoría la meseta castellana y las grandes llanuras de la Mancha, tan desigual que se suceden las estaciones bruscamente, tocando los dos extremos: frío intenso en el invierno, v excesivo calor en el verano; pues la mucha elevación sobre el nivel del mar, y el estar resguardada de su influencia por grandes cordilleras que la separan de él, hacen que no pueda sentir sus beneficiosos efectos.

Y el de la región comprendida al Levante, en el litoral del Mediterráneo y el Sur de España, que es templado y suave en general; pues recibe los cálidos vientos africanos cuyos efectos son contrarrestados por las agradables brisas y por los fríos vientos emanados de las cordilleras Celtibérica, Penibética y Mariánica, en cuyos picos más elevados hay nieve perpetuamente.

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