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III.1 Crecimiento Endógeno: Falso Abandono de la Función de Producción Neoclásica.

 

En medio de las referencias antes descritas, surge la curiosidad acerca de porqué en los estudios de convergencia existe evidencia empírica de de convergencia condicional en países desarrollados, donde el sentido común señala que los rendimientos del capital muestran tendencia creciente.

Dentro de esta curiosidad, llama la atención que en la rama del crecimiento endógeno, el capital reporta un rendimiento creciente debido a las innovaciones producto del conocimiento (habilidades desarrolladas, experiencias, años de estudios, etc).

De acuerdo a Frank (1992), la ley de los rendimientos marginales decrecientes implica que “si se añaden cantidades de un factor variable y se mantienen fijos todos los demás, acaban disminuyendo los incrementos resultantes de la producción” (Frank 1992, pp. 295).

De acuerdo a la definición planteada, los rendimientos decrecientes del capital tomado como prototipo para la formulación de un modelo neoclásico se deben a la consideración de dos factores de producción.

El trabajo seminal de Solow (1956) se centra en descubrir una ruta de crecimiento que asegure que la disponibilidad del capital sean absorbidos por la mano de obra de la economía, el autor considera dos factores de producción, trabajo y capital, donde el primer factor se considera fijo y el segundo es quien traza la ruta de crecimiento económico.

Por tanto, por cada “incremento del mismo factor de producción”, llámese capital físico, a la función de producción, el mismo produce rendimientos decrecientes.

Por otra parte, de los modelos de crecimiento endógeno se desprende que el conocimiento, las habilidades y la experiencia hacen que el factor de producción capital físico se incremente mediante el surgimiento de las externalidades antes descritas, lo cual hace que exista una mayor productividad del factor; validando indirectamente lo expresado por la teoría neoclásica.

En conclusión está teoría considera la combinación de factores para la transformación definitiva en productos, mientras los teóricos endógenos intentan mejorar dicha combinación de factores.

De acuerdo a esta deducción y bajo la óptica de los argumentos de Napolioni (1982), el modelo neoclásico de crecimiento, puede ser considerado estático, debido a que el tiempo juega un papel importante solo en la definición de las magnitudes, es decir, se describe la trayectoria al punto en el que la mano de obra puede disponer del capital obteniendo su máximo beneficio.

Mientras que los llamados modelos de crecimiento endógeno explican los cambios a través del tiempo de los factores de producción. A raíz del residuo de Solow (1956), se ha especulado acerca de que si se quiere explicar los determinantes del crecimiento económico se debe abandonar los supuestos del modelo neoclásico, para ello se han hecho estudios como el de Rebelo (1991) que sugieren “abandonar la función de producción neoclásica”.

La función de producción que se adoptará para abandonar la función de producción neoclásica es la argumentada por Rebelo (1991), la cual es lineal en el stock de capital.

Esta función es conocida con el nombre de tecnología AK e ignora totalmente la existencia del trabajo como factor de producción. El argumento de esta proposición radica en sustituir mano de obra por capital humano.

“el factor trabajo necesita inversión, en el sentido de que debemos sacrificar consumo presente para acumular productividad de lo que llamamos trabajo. ...el capital y el trabajo son dos tipos de capital diferente (físico y humano) pero, al fin y al cabo, ambos son capital. Si todos los inputs de la función de producción son capital y existen rendimientos constantes de escala, la función de producción debe tener la forma AK” (Sala-i-Martín 2000, pp. 52).

De acuerdo a los fundamentos de la teoría de la producción, esta función de producción confunde stocks con flujos. El objetivo de cualquier estudio de producción es “describir las posibilidades de producción de los cuales se dispone, dada la situación de la tecnología y las dotaciones de recursos”.

Tal como se argumentó en la sección I.3.2, el estado estacionario planteado por Ricardo (1819) producto de los rendimientos decrecientes a la tierra, se debe a que uno de los factores de producción es fijo, la tierra, mientras ocurren variaciones en los demás factores.

De igual manera, de la función de producción neoclásica derivada de los estudios de Marshall (1896) los factores que se transforman para obtener producto son el capital y el trabajo. Los rendimientos decrecientes de cada uno de estos factores se evidencian cuando uno de ellos permanece constante, es decir es stock, y el otro se incrementa, es decir es variable o es flujo a través del tiempo.

Si ambos factores se incrementan al mismo tiempo, quiere decir que ambos incrementaron sus stocks, y si la función de producción es homogénea de grado uno, la función de producción presentará rendimientos constantes a escala.

Cuando la función de producción AK sustituye al factor trabajo por capital humano, y homogeniza al capital físico y humano, nos damos cuenta de que lo que existe no es un rendimiento constante del capital, sino un incremento simultaneo del stock de ambos factores, propia de cualquier función de producción Cobb-Douglass, cuyos resultados son idénticos a que si dicha función fuese homogénea de grado uno.

No existe rendimiento constante del factor capital sino decrecientes en cada factor, pero en este caso particular de la función AK existe un incremento simultaneo de los factores, que suponemos se realizará en el largo plazo para ajustar los rendimientos a escala constantes.