Consuelo E. Izquierdo Albert
2.3.2 RETOS DEL COOPERATIVISMO.
Este proceso es portador de elementos que conducen a una crisis de la identidad cooperativa, en la medida en que la definición del nosotros cooperativo y el de tradición sobre la diferencialidad propia se hacen cada vez más dificultosos y se prestan cada vez más al matiz. La identidad cooperativa de trazo grueso da paso a la del matiz.
Con esto no queremos decir, entiéndase bien, que la diferencia cooperativa haya dejado de existir, sino que la identidad colectiva construida sobre razones claras y concisas, cede paso a una identidad basada en pliegues cada vez menos definitorios y más difusos.
Se ponen de manifiesto entonces, un grupo de importantes particularidades que devienen retos a enfrentar en el nuevo milenio:
Pérdida de la naturaleza y la esencia cooperativa.
Deficiente estructura, diversificación y base financiera del cooperativismo.
Deficientes procesos de Educación.
Marco legal inadecuado y deterioro de las relaciones Estado-Cooperativa.
Falta de Integración.
Estos retos, están relacionados con la identidad cooperativa, entendida en los términos que hemos planteado y afectada interna y externamente, por lo que aunque pueda entenderse paradójico el cooperativismo debe, recuperar lo que parece la ratificación histórica de su validez: su identidad cooperativa ante el nuevo tiempo histórico marcado por la Globalización Neoliberal.