¿Leyes de la historia?

 

Pulse aquí para acceder al índice general del libro.

Esta página carece de formato, gráficos, tablas y notas.Pulsando aquí puede acceder al texto completo del libro en formato DOC comprimido ZIP (295 páginas, 1,5 Mb)

Alfonso Klauer

Los “bárbaros”

Como recuerda Asimov , los hoy denominados griegos, desde muy antiguo, dicotómicamente dividieron a los pueblos en dos grupos: de un lado, ellos, los “helenos”, y del otro, “todos los demás”. En otros términos, para ellos sólo había helenos y barbaroi. Y “barbaroi”, por cierto, eran todos aquellos que no hablaban el idioma de los habitantes de la Hélade.

“Barbaroi” –que en castellano pasó a ser “bárbaros”–, eran pues los “extraños” a los helenos, los “extranjeros”, todos los extranjeros. Así, en el tiempo en que en todo el Mediterráneo predominaba la cultura y el imperio faraónico, y la Hélade era aún un territorio primitivo y casi desconocido, para los helenos también eran “bárbaros” los muy prestigiados y hegemónicos egipcios. “Bárbaro”, pues, en sus orígenes, era un gentilicio genérico, un sustantivo, no un adjetivo calificativo.

Pero cuando al cabo de siglos los griegos alcanzaron un gran desarrollo, y se convirtieron en el centro expansivo y modelo de la civilización occidental, los “bárbaros” ya no sólo eran considerados extranjeros, sino, por comparación, también “incivilizados”.

Así, poco a poco el término fue adquiriendo cada vez más connotaciones peyorativas, hasta, finalmente, denotar sólo calificaciones despectivas. Los romanos difundieron y generalizaron aún más el uso del término, consolidando y agravando su agresiva nueva connotación.

Hoy, llevándose al extremo las connotaciones peyorativas del término, entre el común de los pueblos –siguiendo por ejemplo al historiador sueco Carl Grimberg–, ya no se habla sino de “hordas bárbaras” .

La República Romana, antes de erigirse en imperio, estaba pues completamente rodeada de “bárbaros”, de pueblos extranjeros. Con el tiempo, muchos de esos pueblos “bárbaros” fueron conquistados y pasaron entonces a formar parte del imperio. Pero la Historia oficial romana –y con ella la Historia tradicional que se lee y estudia en nuestro tiempo–, se encargaron de que durante la mayor parte del Imperio Romano “los bárbaros salieran completamente de escena”. Y, muy extraña y sospechosamente, se les hizo –y hace– reaparecer de improviso durante la crisis final del imperio. Intentaremos pues llenar el vacío –resolver la inconsistencia de la Historia tradicional–, a fin de descubrir si se encuentra o no relación entre los “bárbaros” que había antes de la formación del imperio y los que “aparecieron” a la caída del mismo. Veamos.

Confrontados ante el expansionismo militar romano, algunos pueblos pudieron elegir, tuvieron alternativa. Mas, en rigor, debe decirse que tuvieron una sola posibilidad: “escapar” del vendaval romano. ¿Cuáles fueron esos pueblos, dónde estaban ubicados, por qué ellos sí pudieron escapar y hacia dónde fueron? Focalicemos entonces un instante nuestra atención en el Gráfico Nº 20 (en la página siguiente).
Como puede apreciarse, los pueblos de la península ibérica y la mayor parte de los pueblos de Francia (Galia), además de no haber podido enfrentar con éxito a los ejércitos romanos, también más allá de su voluntad se vieron impedidos de escapar. No tenían a dónde ir huyendo del vendaval romano. Ciertamente los océanos no eran una alternativa.
 

Grupo EUMEDNET de la Universidad de Málaga Mensajes cristianos

Venta, Reparación y Liberación de Teléfonos Móviles
Enciclopedia Virtual
Economistas Diccionarios Presentaciones multimedia y vídeos Manual Economía
Biblioteca Virtual
Libros Gratis Tesis Doctorales Textos de autores clásicos y grandes economistas
Revistas
Contribuciones a la Economía, Revista Académica Virtual
Contribuciones a las Ciencias Sociales
Observatorio de la Economía Latinoamericana
Revista Caribeña de las Ciencias Sociales
Revista Atlante. Cuadernos de Educación
Otras revistas

Servicios
Publicar sus textos Tienda virtual del grupo Eumednet Congresos Académicos - Inscripción - Solicitar Actas - Organizar un Simposio Crear una revista Novedades - Suscribirse al Boletín de Novedades