La actualización

Caducidad del estilo, los servicios y los contenidos

Por mucho que nos esforcemos, todos los sitios web quedan anticuados en el mismo momento en que se abren al público. Anticuados en contenido, anticuados en servicios y anticuados en estilo.

El estilo que proporcionan los elementos de navegación y orientación, es decir, el elemento estético, quedará completamente anticuado en, aproximadamente, un año. Internet evoluciona rápidamente. Hay una fuerte competencia. El medio estimula que haya muchos diseñadores muy innovadores. Los usuarios de Internet viajan continuamente por el ciberespacio y ven cosas nuevas todos los días. Los usuarios que visiten nuestro sitio web habitualmente empezarán a cansarse del estilo en muy pocos meses. Sólo los grandes artistas del diseño web pueden crear estilos que se mantengan frescos más de seis meses.

La tecnología de Internet está también evolucionando de forma acelerada por lo que surgen nuevas posibilidades de servicio. Pensemos en web dinámicas, web-cams o en una "página para recargar su teléfono móvil". Pero las novedades son un arma de doble filo. Cuando son realmente novedosas y el usuario desconoce su existencia, no las demanda, y si las encuentra de forma inesperada puede quedar desconcertado o no saber usarla. No es conveniente por tanto esforzarse por estar siempre en la vanguardia de la tecnología y los servicios Internet. Pero, claro, si esperamos a ofrecer esos servicios cuando se haya creado una demanda real para ellos... no serán ya ninguna novedad e incluso es posible que se pasen rápidamente de moda.

El contenido queda anticuado aún mucho antes. Cualquier información ya está anticuada en el momento de difundirla. Cualquier solicitud de un usuario debe ser respondida inmediatamente. Los productos o servicios que ofrecemos a través del sitio web están cambiando de características o precios continuamente.

Protocolos de mantenimiento

El plan de mantenimiento y renovación de un sitio web debe elaborarse a la vez que el propio sitio. Forma parte también del sitio. Un sitio web es un conjunto de instrumentos para prestar diversos servicios a los usuarios. Los protocolos que describen cómo deben ser usados esos instrumentos y con que frecuencia deben renovarse.

Las preguntas clave son quién, cuándo y cómo. Quién es el responsable de atender este servicio o de renovar tal contenido. Cuándo, con qué frecuencia debe revisar el funcionamiento, los enlaces, las demandas de los usuarios. Cómo debe prestar el servicio o renovar el contenido.